-POV Camila.
Al día siguiente tuve una gran pelea con mis ojos para que se abrieran, me demoré algún tiempo hasta que me desperté con la claridad, miré el reloj y corrí. Ya había pasado el medio día. Este nuevo horario me va a causar grandes problemas. Con mucha vergüenza salí de la habitación, queriendo ser invisible, pero no lo logré.
Chris: Ella despertó! -gritó, viniendo a abrazarme.- ¡Buen día hermana de mentiras!.
-¡Buen dia, lindo!. -dije un poco ronca.
Entré al baño, hice mi higiene matinal y entonces bajé, con la vergüenza de mirar a todos ahí.
-Discúlpenme por haberme levantado tan tarde. -sonreí timida.- este horario me confunde.
Clara: Es normal que te atrape al inicio. Además te hace bien dormir, no hay ningún problema.
Taylor: Yo sólo desperté temprano porque siempre voy a caminar a la playa y si no me obligo a ir en la mañana, luego no voy. Si te sirve de consuelo, Lauren aún duerme.
-Creo que sirve.
Clara: ¿Tienes hambre? -preguntó-
-Si tengo. -admití, sonriendo.
Clara: ¿Puedes esperar un poco más?. Mike ya está en camino con la comida.
-Claro que si.
Estaba sentada de espaldas a la puerta de la cocina, cuando una voz ronca sonó.
Lauren: ¡Mierda, mi cabeza me está matando!. -se quejó.
Clara la miró con reprensión y suspiró, dándole la espalda, me viré aprensiva, lo admito, sin embargo cuando la vi, mi mentón cayó. La chica parada en la puerta simplemente me dejó sin aliento. Su cabello castaño, un poco despeinado, un cuerpo escultural indescriptible, el rostro con trazos bien femeninos, ojos verdes, en los que soy capaz de perderme fácilmente y aunque esté con una resaca, no deja de ser la chica más linda que he visto. No existen personas así en México, de hecho.
Clara: Finge que eres educada Lauren. -dijo, mientras lavaba la ensalada.
La escuché quejarse y dar algunos pasos firmes, hasta llegar al lado de Taylor, que la miraba con cautela.
Lauren: ¡Hola!. -dijo seca, Taylor le dio un pequeño golpe en el estómago, que gimió de dolor. -¿Qué te pasa loca?.
Taylor: Deja de ser mala, ella no te hizo nada. -me defendió, molesta.
-Taylor, no importa. -le sonreí.- ¡Hola... Lauren, es así?
Yo sé que lo es, pero sirve para hacer un poco de broma.
Lauren: Sí, así es. -dijo simplemente, dejando en seguida la cocina.
Clara: Disculpa por eso, querida. -se sentó en la mesa, conmigo y Taylor.- Lauren creció sin límites.
-Seguro es porque acaba de despertar. -intenté hacerla sentir mejor.
Clara sonrió y luego se levantó, dejándome con Taylor en la cocina. Unos segundos después Lauren entró, tomando un cigarro de su bolsillo.
Taylor: ¡Tú no vas a fumar aquí!. -le dijo autoritaria.- no vamos a sentir el olor de esa mierda.
Lauren: ¿Te estás comportando así sólo porque la mexicana llegó?. -levantó una de sus cejas, tomando agua del refrigerador directamente de la botella.
Taylor: ¡LAUREN!. -gritó.
Lauren: ¿Y ahora qué?. -la encaró.
Taylor: Más personas van a tomar. -señaló la botella.- sírvete en un vaso.
Lauren: No tengo ninguna infección contagiosa para que alguien me impida beber. -regresó la botella al refrigerador.
Taylor: deja de ser tan puerca, chica!.
Lauren: ... hey, extranjera. -dijo, haciéndome verla y sintiendo un poco de miedo.- ¿A ti te da asco la saliva?.
Cuando abri la boca para responder, Taylor intervino.
Taylor: No necesitas responder nada. -dijo, mirándome.- Ella tiene nombre, Lauren. -la encaró.
Lauren: Olvidé el nombre de ella. -me miró, cerrando un poco los ojos, como se estuviera intentando recordar mi nombre, confieso que me puse algo roja con su mirada.
-... Camila. -dije simpática, aunque ella no lo merecía.
Lauren: ¡Eso!. -tronó sus dedos, como si se hubiera acordado.- Camila. -repitió.- Taylor, ¿será que ella me puede responder ahora o vas a volver a interrumpirme?.
Taylor: Te voy a interrumpir. -levantó su nariz.- porque no se hace ese tipo de preguntas a las personas.
Lauren: ¿Te comiste un libro de 'Moral y buenas costumbres' en la hora del café o qué está pasando?.
Taylor: Lo que está pasando es que Camila acaba de llegar de otro país y ya tiene que presenciar tus ataques. -dijo, seria.- intenta no ser idiota.
Lauren la encaró por algunos segundos, Taylor no se dejó intimidar y mantuvo la mirada en la de ella, con una expresión seria.
Lauren: ¿Quieres un cigarro?. -dijo por fin, ofreciéndole a Taylor y luego en seguida, a mi.
Taylor: Idiota. -dijo, enojada.
Lauren: Relájate TayTay, eres una aburrida del carajo. -volteó los ojos.- eso es malo para la salud.
Taylor: Mírate a ti misma antes de venir a hablar de salud conmigo.
Lauren: ¿Estás insinuando algo, hermanita?. -preguntó algo irónica.
En ese momento Clara entró a la cocina.
Clara: Es increíble ustedes dos. -miró a Taylor y a Lauren.- da para escuchar la conversación hasta allá afuera, qué va a pensar Camila?
Lauren: Que Taylor es una neurótica problemática. -dijo simplemente, guardando los cigarros en el bolsillo.
Taylor: Voy a mostrarte a la neurótica, estúpida. -se levantó furiosa.
Clara la sujetó por el brazo, Lauren ni parpadeo, continuaba con una sonrisa irónica en los labios.
Clara: ¡YA BASTA USTEDES DOS!. -gritó.- no quiero escuchar una palabra más. -Dijo autoritaria, Taylor se sentí nuevamente con la mirada fija en Lauren.
Mientras Clara dejaba la cocina, Taylor susurró.
Taylor: ¡Te odio!. -dijo brava.
Lauren: Es recíproco. -le guiñó un ojo y salió de la cocina, dejándome sin ninguna reacción con todo lo que acaba de pasar.
