Bajé sin saber exactamente a donde ir, en cuanto puse un pie en el jardín me sentí desubicada, las personas ahí reunidas se hablaban y reían con tanta naturalidad que me intimido bastante.
- Elizabeth –De pronto Michael me tomó por el brazo
- Me sentía perdida –Susurré sonrojada
- Lo noté cariño, ya te presento a todos –Sus palabras me intimidaron aún más
Pasamos entre tíos, primos, sobrinos y varios nombramientos familiares más, creí que la cabeza me estallaría después de escuchar tantos nombres. Algunos eran tan sencillos como Michael y algunos otros se sentían de la realeza, mirándome por sobre el hombro.
- Dejé al final los más importantes –Supuse que se refería a sus padres– Ella es mi hermana Emma, una de las personas más importantes de mi vida –La preciosa rubia sonrió– Ella es Elizabeth...
- ¡Oh Elizabeth! –Soltó emocionada– tenía tantas ganas de conocer a la chica que lo hizo volver al tenis –Reímos
- Un gusto –Dije sonriente
- El gusto es mío... Oye Michael ¿Por qué no me dijiste que era hermosa? –Él pareció apenarse un poco
- Es de esas cosas que no puedo describir ¿Entiendes? Si no la ves por ti misma, no sabes cuan hermosa es –Me sonrojé y ella lo miró con ternura
- Papá está por allá –Señaló Emma
- Pero le presentaré primero a las personas importantes –Dijo él, logrando que ella lo mirara mal
- ¿No puedes ser un poco amable con él, ni siquiera en su cumpleaños? –Él se rio
- Te presentaré a mi abuelo –Dijo señalándome a un bello anciano y le sonreí a su hermana en respuesta a una sonrisa suya
- ¿Por qué?
- No Elizabeth, no es momento para preguntas –Dijo serio
Caminamos hasta el hombre, quien nos miró sonriente.
- ¡Oh la bella Elizabeth! Lleva semanas hablándome de ti –Soltó de inmediato
- Vamos abuelo, no me hagas sonrojar –Dijo Michael
- Michael –Me tendió la mano
- Elizabeth –Tomé su mano
- ¿Entonces ya eres parte de la familia o es un poco tonto mi nieto? –Se carcajeo ante el color rojo de mis mejillas
- Abuelo, danos tiempo –Rio Michael
- Dime Elizabeth ¿No crees que es un buen tipo?
- Es un magnifico hombre –Dije mirando a Michael
- Exacto, no te distraigas porque ¿Ves a aquella pelirroja? –Disimuladamente mire a una chica de cabellos rojos y piel blanquísima– está dispuesta a todo por tenerlo –Michael se carcajeó
- Es una amiga de años abuelo –Dijo amable
- Ajá, a mis años no me engaña –Se burló el abuelo
- ¿Sabes qué? Elizabeth debe conocer a mis padres, te busco más tarde –El anciano soltó una carcajada y me palmeó el hombro
Caminamos entre algunas personas y llegamos hasta sus padres, ella era una mujer a la que se le notaba la clase desde kilómetros atrás, elegante y delicada, me intimidaron bastante.
- Ella es Elizabeth –Dijo Michael sin la misma emoción con que me presentó a su abuelo
- Un gusto señorita –Se adelantó el padre a saludar– soy el padre de Michael

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Flores en tu pelo
Ngẫu nhiên- ¡Arriba cariño! -Las delgadas manos de mi madre mueven mi pequeño cuerpo- Vamos, vamos Lia, no hay mucho tiempo. - ¿Mami? ¿Qué sucede? -Pregunto con el pelo sucio y enmarañado sobre mis ojos - En silencio -Susurra luego de un bajito "shh" Me toma...