Capítulo 16 Parte 1

1.3K 144 23
                                    

MARCUS

Bajo las escaleras tranquilamente, cuando llego a la recepción camino en dirección a la salida. La recepcionista me pregunta si sucedió algo a lo que le respondo que no y prosigo mi camino sin esperar comentarios de su parte.

No pienso pagar por el arreglo de la habitación que esos mafiosos destruyeron.

En las calles abunda una completa alteración y confusión por el aparente secuestro. Continúo mi recorrido ignorando los cuchicheos a mí alrededor. Deberían estar acostumbrados a este tipo de escenas, este pueblo es famoso por su inseguridad y ser el nido de muchos criminales.

Mientras camino pienso en como localizar el escondite de esos bandidos; tomando en cuenta el tiempo que les tomo en llegar a nuestra posada se nota que mandaron a sus subordinados a seguirme. Por lo tanto, ellos aún deben permanecer en la caverna esperando noticias.

Con eso en mente me dirijo nuevamente a la caverna de mala muerte a esperar que realicen su segundo movimiento. Encontrarse con la víctima y cerciorarse que ella es lo que tanto andan buscando.

***

Permanezco escondido e inmóvil en un lugar angosto al lado de la caverna, donde una pequeña ventana es la única que me brinda un poco de luz. Estoy sentado y cruzado de brazos sobre unas cajas que apile contra la pared. Cuando llegue se encontraban esparcidas por el suelo desordenadamente, intuyo que aquí fue donde ella se escondió y luego derribo lo que había en su camino, delatándose a sí misma.

Me impresiona su nivel de ineptitud.

Suelto un suspiro de solo pensar el martirio que tendré que lidiar cuando la recuperé y se queje porque no estuve ahí para evitar el secuestro.

Sería mejor dejarla con ellos ─pienso tentativamente, a su vez, que lamento no poder hacerlo. La necesito conmigo aunque sea un completo fastidio. Además no quiero que alguien más se quede con lo que me pertenece.

Escucho que las voces en el interior empiezan a hablar del tema que tanto estaba esperando. Fueron cuidadosos y esperaron hasta que cayera la noche para movilizarse.

Solo logro entender que "ya tienen a la presa y que irán a revisarla." Se escuchan las sillas chillar contra el piso cuando los sujetos se levantan de su asiento, muchos pasos y un portazo sonoro indicándome que han salido de su madriguera.

Desde lejos los observo mientras lo sigo con cautela. Los tres hombres que hablaron conmigo en la tarde van adelante y son seguidos por otro sujeto a sus espaldas. En total cuatro enemigos, eso sin contar a los que deben estar en el escondite.

Confió en mis habilidades de pelea, podría con todos los adversarios que se me opusieran; sin embargo, hay algo en ese sujeto, El jefe, que me dice que es mejor evitarlo. Los demás me tienen sin cuidado.

Me han conducido hasta las afueras del pueblo; posteriormente, caminan hacia el bosque que se encuentra hacia el este. Atravieso malezas y esquivo ramas con sumo cuidado, convirtiéndome en uno con la oscuridad. Me detengo y permanezco agachado detrás de unos arbustos observándolos ingresar a una cabaña vieja y deteriorada que se encontraba escondida en lo más profundo del bosque.

Medito unos cuantos segundos mis siguientes movimientos y decido revelarme sin reparo. Me dirijo a un costado de la cabaña cerca de una ventana rota, termino de destrozarla procurando no causar ningún ruido que llame la atención.

Ingreso a la cabaña y permanezco agachado, me encuentro en un corredor totalmente oscuro; giro mi cabeza hacia ambos lados buscando algún signo de vigilancia por parte de los bandidos. Me doy cuenta que está despejado y me levanto lentamente. La madera cruje por los años que lleva levantando esta casa, por alguna razón siento un aire pesado en el ambiente.

Atrapada en otro mundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora