Like Cats and Dogs. |YoonMin| |Omegaverse|

Reencuentro

- No puedo creer que me hayas convencido para que te dejase venir. - Habló NamJoon. - Y más aún para que condujeras tú.

- ¿Convencerte? ¿Por qué debería tener que convencerte? - Expuso Jin algo sorprendido. - Hago lo que me da la gana y si conduzco yo es porque no pienso dejar que conduzcas tú en un trayecto tan largo. Muchos menos llevando a TaeTae con nosotros. 

- ¿Por qué? HoSeok y yo ya no sacamos la licencia de conducir. - Anunció recordándole.

- Eso no quita que tú sigas siendo un torpe y un peligro para la sociedad. - Aseguró. - Y no esperarías que no iba a venir a apoyar a HoSeok con esto junto a los demás. 

- Aún deberías guardar reposo. - Comentó algo más serio. - Prométeme que no te callarás si te sientes cansado o algo.

- Estoy bien. Estoy harto de tanto descansar. - Aseguró. Pero sabía que NamJoon sólo se estaba preocupando por su salud. - Pero te avisaré si me encuentro mal. Lo prometo. - NamJoon se quedó un poco más tranquilo. TaeHyung, en el asiento de atrás, no prestaba atención a la conversación. YoonGi le había contado lo de la cabaña a todos y también lo del celo y las intenciones de su familia. No le sería fácil soportar estar encerrado con un omega teniendo su celo. Se temía lo peor. Estaba muy ansioso por llegar, pero, por otro lado, tenía mucho miedo de encontrarse una situación que no le gustaría. Ni él mismo sabía como reaccionaría. 

En el otro coche, YoonGi conducía mientras JiMin iba de copiloto. A pesar de estar conduciendo, el tigre no soltaba la mano de su omega. De entre todos, JiMin había sido el único que había tenido que poner una excusa para irse ese fin de semana con sus amigos. Aunque no todos habían dado demasiado detalles. Sus padres habrían puesto el grito en el cielo si se enteraban de que intentaban detener un matrimonio tradicional como el de HoSeok. Además, no podían enterarse de que iba en el coche con dos alfas de tigre de Bengala. JungKook iba en el asiento de atrás. Al principio, había querido quedarse en casa para poder buscar a YuGyeom pero no sabía muy bien por donde empezar y se torturaba pensando que había vuelto a perder a su amigo. Esta vez, quizá para siempre. Además, no le apetecía mucho quedarse en casa sin su hermano después de lo que había pasado con su madre. Y debía estar con HoSeok y TaeHyung. Sobretodo con TaeHyung, al que era tremendamente cercano. Sin embargo, él mismo no se sentía como un buen apoyo y una buena compañía en ese momento. De ser así, habría ido en el coche con él. 

- ¿Crees que llegaremos a tiempo, Hyung? - Preguntó JiMin aprovechando que TaeHyung estaba en el otro coche. 

- Eso espero. - Aseguró. - Pero no le va a ser fácil controlarse.

- HoSeok está demasiado enamorado de TaeTae-Hyung como para traicionarle. - Opinó JungKook. 

- Jamás lo haría conscientemente. - Comentó YoonGi. - Pero el celo no es ciencia exacta y perder el control no es tan difícil. - JungKook nunca se había enfrentado al olor de un omega estando en celo sin supresores. Cuando el celo le atacó, el único omega que estaba presente era su madre y su aroma a café no resultaría sexualmente atractivo para él, por razones obvias. JiMin miró por la ventana deseando llegar pronto. Había empezado a llover y traqueteo de las gotas golpeando contra el cristal del coche le agradaba. 

Llegaron cuando ya era casi de noche. Era un bosque bastante tupido y no habían visto una casa en varios kilómetros. Seguía lloviendo y JiMin se regocijó en el olor a tierra mojada que siempre le acompañaba y le calmaba y que ahora, por la meteorología, era tremendamente fuerte. YoonGi aparcó frente a la puerta de la cabaña. JiMin aspiró fuerte mientras habría la puerta. 

- Me encanta este olor. - Anunció y sonrió a YoonGi. 

- Vamos, salid del coche e id directamente a la cabaña. - Dijo el tigre mayor con cariño. - JungKook, coge el paraguas, no vaya a resfriarse JiMin. - JungKook obedeció. Sabía que si JiMin se empapaba su temperatura podría bajar y hacerle daño. - Jin-Hyung y yo tenemos que ir a aparcar los coches allí. - Dijo señalando un aparcamiento que había a unos 100 metros de la cabaña. - No dejéis sólo a TaeHyung. - Les dijo. Aunque no había falta que se lo recordara. Y dile a NamJoon que se asegure de que lleva los supresores para dárselos a HoSeok antes de nada. Tened cuidado, que no sabemos como está la situación. Dicho esto, YoonGi arrancó el coche dejándolos allí y Jin hizo lo mismo. JiMin cogió la mano de TaeHyung para darle fuerzas. TaeHyung lo agradeció. aún tenía miedo y ansiedad por entrar. Avanzaron hasta la cabaña.