Teléfono

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Cuando HoSeok llegó al hotel desde el Cerro de la Luna, se sentía agotado. Se tiró en la cama. Por suerte, sus padres le habían dejado, por ser su primogénito, tener una habitación para él solo en el hotel.
Había sido un día muy cansado, pero había merecido la pena. La ceremonia en honor a la presentación de su hermana había sido hermosa. Emocional y con un profundo significado espiritual. Habían ido al templo del cerro y habían otorgado ofrendas al dios omega lobo.
- Oppa. - Sonó una voz bien reconocida por HoSeok al otro lado de la puerta. - ¿Puedo pasar? - HoSeok se levantó para abrir la puerta.
- ¿Ocurre algo, JiWoo? - Su hermana bajó la cabeza. - Pasa. - Dijo haciéndose a un lado y dejándola entrar en su cuarto. Ella entró y se sentó en la cama de su hermano. - Cuéntame que te preocupa.
- Hobi-Oppa... ¿cómo haces para ser tan perfecto? - HoSeok rió cansado. - Papá y mamá siempre están adulándote. HoSeok es bueno en esto... HoSeok es siempre obedece... Bla, bla, bla... ¿Cómo lo haces? Yo no puedo ser siempre lo que ellos quieren. - HoSeok se frotó la nuca.
- Yo no soy tan perfecto como crees. - Reconoció. - Me temo que sólo finjo serlo delante de papá y mamá. - Admitió finalmente. Su hermana y él tenían buena relación, pero no le había contado lo de TaeHyung. No quería que lo soltase en un arrebato adolescente.
- ¿Y te funciona bien? - Le preguntó. HoSeok se sentó a su lado.
- Es una mierda. - Reconoció. - Todos tenemos secretos, JiWoo. Pero ocultarle cosas a la manada es... doloroso. Dime, ¿qué te perturba, hermanita? - Antes de poder hablar, la muchacha se echó a llorar.
- Creo que estoy embarazada, Oppa. - HoSeok tragó saliva con dureza.
- ¿Qué coño? ¿Quién? Me cago en la... - HoSeok se levantó de la cama y se llevó las manos a la cabeza. - Hace sólo cinco meses que te presentaste, JiWoo. ¿En qué pensabas? ¡Joder!
- Oppa... - Sollozó angustiada. HoSeok se dio cuenta de que no solucionaría nada poniéndose histérico. Se volvió a sentar a su lado y dejó que se apoyara en su hombro abrazándola.
- Está bien. No te preocupes. - Intentó calmarla. Pero, ¿cómo iba a hacerlo si él estaba temblando? - Joder, JiWoo. - Expresó más tranquilo. - Ni si quiera sabía que tuvieras pareja.
- No quería que papá y mamá lo supieran. Ya sabes lo pesados que se ponen con esas cosas. - Aseguró. - Pero no queríamos que pasara esto.
- ¿Es un buen chico? - Ella asintió y HoSeok respiró un poco más tranquilo. - ¿De tú instituto? - Volvió a asentir. Al menos sabía que era un lobo, eso apaciguaría a sus padres. Intentaba calmarse, pero no le era fácil. - Joder, JiWoo. ¿en tu instituto no hay clase de educación sexual? ¿Cómo ha pasado?
- Yo... Estábamos en su casa y bebimos un poco.
- ¿Beber? ¿Desde cuándo bebes? - Habló HoSeok deprisa. - ¿Qué más no me has contado? ¿Fumas? ¿Te has drogado?
- ¿Qué? ¡No! - Exclamó. - Te estás desviando, Oppa. Además, tu también bebes.
- Yo soy mayor, soy lo suficientemente fuerte como para soportar el alcohol y defenderme si pasa algo y, por los dioses JiWoo, yo no puedo quedarme embarazado, soy un alfa. Y siempre llevo un condón en la cartera. ¿Es que ese chico no sabe lo que es un condón? ¿Ni la pastilla anticonceptiva?
- Fue una imprudencia, Oppa. Lo sé. Bebimos y no nos acordamos de usarlo. Y luego... estábamos tan nerviosos. - Lloriqueó.
- ¿Cómo de segura estás? - Preguntó. - ¿Te has hecho alguna prueba? - La loba negó.
- Estoy muy asustada. ¿Usted es un alfa fuerte, Oppa? ¿Puede notarlo? Si papá puede notarlo, yo...
- No funciona así, JiWoo. Sólo puede notar si estás embarazada tú alfa, si estás marcada. - Le explicó.
- Si él me marcara...
- Ni se te ocurra, JiWoo. - Le quitó rápidamente la idea de la cabeza. - Lo primero es saber si es una falsa alarma. Puede ser sólo eso. Cuando lleguemos a casa yo mismo compraré un test de embarazo. - La abrazó con fuerza. - No te preocupes ahora mismo y ve a dormir.
- No quería defraudaros así a papá, a mamá y a ti. - Sorbió su nariz.
- No es eso lo que debería preocuparte, JiWoo. No te centres en lo que vayan a pensar nuestros padres. Eso da igual porque, piensen lo que piensen ellos, yo siempre voy a cuidar de ti, ¿de acuerdo? - JiWoo asintió conmovida. - Pase lo que pase estaré contigo. Pero has de ser más responsable.
- Lo sé. Lo siento. - HoSeok besó su frente con amor.
- No te preocupes. Ve a dormir. No te preocupes por nada, yo me hago cargo.
- Gracias. Sabía que tú me apoyarías.
- Buenas noches, lobita.
- Buenas noches, Oppa. - Dijo con una sonrisa esperanzada, pero aún con lágrimas en los ojos, mientras se marchaba a su propia habitación.
- ¿Cómo es posible? - Se tiró a la cama de golpe en cuanto su hermana salió de la habitación. Enterró la cabeza en la almohada y chilló con todas sus fuerzas intentando liberar el estrés que la noticia le había causado. Como un acto reflejo, cogió el móvil y marcó el número de TaeHyung, su hermoso novio.
- ¿Diga? - Se oyó al otro lado de la línea.
- TaeHyunnie... - Le llamó mimoso.
- ¡Hobi-Hyung! - Habló entusiasmado de oír su voz. - Creí que hoy estaría demasiado ocupado y cansado para llamarme. ¿Cómo está?
- TaeHyunnie... - Volvió a llamarle meloso. 
- ¿Qué ocurre, Hyung? 
- Mi hermana cree que puede estar embarazada. - Dijo sin más, como pidiendo que el gato consolara el dolor de cabeza que le había provocado todo aquel nuevo lío. Cómo si no tuviera ya bastante.
- ¡Eso es genial, Hyung! ¡Vamos a ser tíos! - HoSeok había olvidado lo mucho que TaeHyung adoraba los bebés. 
- Esa no es la cuestión, TaeTae. - Habló el lobo cansado. - Mis padres no saben nada. Se va a liar una buena. 
- ¡Oh! Pobre JiWoo, tiene que estar asustada. - Opinó TaeHyung.
- ¿Pobre JiWoo? ¿Y yo qué? - Se quejó. - Tu novio soy yo, consuélame a mí.
- ¿Cómo que tú...? ¿Qué tienes tú que ver en eso...? - Se creó un silencio horrible y confuso. - ¡Jung HoSeok! - Gritó TaeHyung al otro lado de la línea haciendo que el lobo se espantara sorprendido. - ¿No serás tú el padre?
- ¡¿Qué?! ¡¿Estás loco?! - Ladró HoSeok. - Me acabas de llamar incestuoso. ¿En qué diablos estás pensando, gato desquiciado?
- Me asustaste, Hyung - Reconoció TaeHyung riendo.
- Aishh. - Expresó HoSeok tirado en la cama. - Cuanto estrés... 
- Mmm.... Hyung... - Habló TaeHyung dudoso.
- ¿Qué?
- Yo conozco una manera de liberar el estrés. - Dijo finalmente. 
- ¿Cuál? - Preguntó HoSeok sin mucho interés, sin saber a lo que se refería su omega. - ¿Gritar a pleno pulmón?
- No exactamente. Algo más placentero para los dos. - HoSeok se incorporó en la cama creyendo entender a lo que se refería el gato. Pero no quería equivocarse y verse como un pervertido.
- ¿A... a qué te refieres?
- Sabes a lo que me refiero, Hyung. - Habló sensual. - Debes liberar tu estrés.
- ¿Y cómo planeas hacerlo estando a kilómetros de distancia?
- ¿No ha oído hablar del sexo por teléfono, Hyung? - HoSeok tensó su mandíbula. De repente estaba nervioso. TaeHyung conocía todas sus facetas, menos esa. ¿Y si no eran compatibles en gustos? No es que HoSeok tuviera parafilias extravagantes como varios de sus amigos, pero cada uno tiene sus cosas. Por otro lado, estaba más que ansioso por saber como gimiría su gatito. De pronto se dio cuenta, TaeHyung era virgen, HoSeok sabía que no era tan inocente y desconocedor como JiMin, pero tampoco es que fuese un experto. 

- TaeHyung... Yo nunca hice esto del sexo por teléfono. Siendo nuestro primer contacto... ya sabes... verdaderamente sexual. ¿Estás seguro de que quieres hacerlo así? - TaeHyung tardó unos segundos en responder y HoSeok se alegró de que de verdad lo estuviera pensando. - Se puede esperar y hacerlo bien. - De todas formas, HoSeok ya lo había esperado por mucho tiempo, podía aguantar un poco más. 
- No quiero esperar... - Habló con un precioso puchero en su voz. - Lo quiero ahora, Hobi-Hyung. - HoSeok rió. 

- Si tan convencido estás... - HoSeok se mordió el labio. - ¿Qué llevas puesto, gatito? 



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Siento dejarte con las ganas... antes de lo que crees estará el siguiente ;D


Like Cats and Dogs. |YoonMin| |Omegaverse|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora