Like Cats and Dogs. |YoonMin| |Omegaverse|

Noche de guerra

- ¿Tu exnovio es el de la americana negra? - Preguntó.
- Sí, ¿por qué?
- Porque conozco al omega que le acompaña. - Aseguró apretando su mandíbula. Ella no dijo nada sólo se le quedó mirando. ¿Qué diablos hacía YuGyeom con ese tipo? - ¿Tiene dinero? Tu exnovio, digo.
- Sí, bastante. Es hijo de un empresario de finanzas. ¿Cómo lo sabes?
- Porque su acompañante es un prostituto de alto nivel. - Comentó.
- ¿Le conoces de eso? - Preguntó sorprendida pero sin intención de juzgar. Los alfas tenían necesidades irrefrenables que apaciguar. Era mejor que lo hicieran antes de que cometieran alguna otra estupidez. Casi todo el mundo entendía eso. Al menos la gente más joven, que intentaba ver las cosas de manera más moderna.
- Digamos que éramos... somos amigos. Supongo. - Añadió. ¿Por qué lo dudaba? YuGyeom era su amigo, le apreciaba muchísimo. Y ellos habían quedado en que sólo serían eso, amigos. Claro que, después de como le había tratado JungKook y que no habían vuelto a hablar después de que el omega huyera de su casa, sus dudas eran razonables. Quería hablar con él, pero no podía mientras estaba trabajando. ¿Qué haría su cliente si otro alfa se acercaba a robarle tiempo que había pagado? Además de que ese mismo alfa eataba ligando con la que había sido su omega. - No importa. Ya buscaré el momento de hablar con él. Cuando no esté trabajando.
- Pues el chico parece tan interesado en hablar contigo como tú. - Le hizo saber la omega. - Porque está lanzando un aroma bastante fuerte.
- ¿No será que tu exnovio quieres que te des cuenta de que está con otro para darte celos? - Ella se encogió de hombros.
- Tal vez. Tal vez sean las dos cosas. ¡A la mierda! - Ella era mucho más bajita que su atractivo acompañante, así que se puso de puntillas y le besó. JungKook tuvo que reconocerse a sí mismo en ese instante, que estaba furioso. Consigo mismo, con YuGyeom, con su trabajo de mierda y con su cliente. Uso esa furia para corresponder al beso con fuerza. La tomó por la cintura. No sabía si JiEun había querido que fuera tan intenso, pero no se negó a seguirle el ritmo. Es más, aceptó de buen grado la lengua sedienta y ardiente de JungKook dentro de su boca. Se abrazó a su cuello. Enredó sus manos en el pelo del chico. Aquello estaba bien para los dos, aunque sintieran que no lo hacían por motivos muy honestos. Estaban siendo autodestructivos, pero ya no importaba.
- Si teneis intención de seguir así, deberiaís coger una habitación de las de arriba. - Les interumpió una voz. Se separaron y vieron a la pareja en discordia. YuGyeom agarrado celosa y posesivamente de la cintura. Parecía pequeño y sumiso al lado de su cliente. Muy distinto al omega independiente que él conocía. Supuso que tenía que interpretar el papel según reclamaba su cliente. Además, el aroma que emanaba era bastante fuerte, pero JungKook había bebido y tenía a una omega dispuesta a su lado soltando su propio olor, por lo que el tigre no podía identificar que sentimiento quería expresar con su aroma. Quizá estaba enfadado, quizá triste, quizá sólo quería excitar al alfa que había pagado por él.
- Apuesto a que vosotros ya teneis una. - Planteó JiEun.
- Mmm... - Dudó el alfa. - Quizá subamos a conocernos un poco mejor. ¿Verdad, cachorrito? - YuGyeom sonrió de manera que a JungKook le pareció forzada.
- Claro. Lo estoy deseando. - Aseguró. Obviamente mentía. El tipo no estaba mal, pero era bastante mayor que él y tenía pinta de ser un baboso.
- ¿Y quién es tu acompañante? - JungKook pensó que, o le daba igual su presencia, o fingía muy bien. Lo mismo pensaba de JiEun.
- Es Jeon JungKook. Un viejo amigo al que hacía bastante que no veía. - Se sonrieron y el tigre la rodeó por la cintura suavemente. - Quizá también subamos a... rememorar viejos tiempos. - Se sonrieron aún. YuGyeom, sin embargo, y a pesar de que sabía que era mentira que JungKook se hubiera acostado hace un tiempo con ella, no le agradaba que el tigre estuviera con otra mientraa él tenía que atender a un alfa asqueroso con el que no quería estar. Algo en su intinto de omega le decía que quería refugiarse en los brazos de JungKook, pedir su protección de alfa. Recibir su calor y su cariño. Escapar de ese alfa que no le agradaba nada. JungKook habría querido arroparle de la misma manera y ofrecerle todo su afecto aunque fuera sólo como su amigo. Habría querido, de no estar enfadado además de embriagado con el perfume de JiEun.
- JiEun, linda. ¿Por qué no dejas de fingir con este pelele y subimos tú y yo a la habitación que tengo reservada? - Planteó altivo el alfa.
- ¿Dejar a un dios griego como JungKook tirado e irme contigo? - La omega rió escandalosamente. - Te recuerdo que rompí contigo porque eras te comportaste como un capullo.
- No intentes evitar lo inevitable. Tu eres mía. Sólo estás refunfuñando como lo haces siempre. - El tipo aún parecía tranquilo, incluso hablaba con jocosidad. Pero se palpaba que no tardaría mucho en perder los nervios.
- Esta vez no. - Aseguró ella. - Ya no soy nada tuyo. Y mucho menos de tu propiedad. - Ahora tenía valor para decir lo que llevaba tiempo pensado. Estar rodeada de gente y protegida fieramente por el tigre, le dio fuerzas. - Se acabó.
- No montes una escena, querida. - Su voz salió más grave y se acercó a ella peligrosamente. - No voy a permitir que una omega de mierda me hable así. - La agarró del brazo para tirar de ella. Pero antes de poder hacer ningún movimiento, JungKook agarró el brazo del tipo.
- Sueltala.
- Tú no te metas, niñato. - Gruñó, pero no consiguió achantarlo y el joven le miró casi sin expresión. - Deja de fingir que juegas en la liga de lo mayores y vete a casa con tu mamá. - JungKook apretó un poco más su agarre y sonrió al ver el fugaz gesto de dolor del alfa.
- Puede que no lo parezca. - Siseó en su oído. - Pero hace ya mucho que la liga de los mayores se me quedó pequeña. - Apretó más y más hasta que el alfa tuvo que soltar a JiEun por miedo a que JungKook le rompiera el brazo. - Lo ves. No ha sido tan difícil. - Decidió que aquello acabara allí. Tomó a la mujer de la cintura y, dándole una última mirada a YuGyeom, se giró y echó a caminar junto a JiEun hacia otra parte del club. Pero el otro alfa no parecía satisfecho. De alguna mesa cogió un vaso de cristal al azar y lo lanzó hasta que este golpeó la cabeza de JungKook y se hizo añicos contra ella. JiEun chilló. YuGyeom enmudeció. JungKook se llevó la mano a la nuca y se dobló un poco. Luego se miró la mano y comprobó que, por suerte, no estaba sangrando. Cuando se dio la vuelta y miró a su agresor, el cual le miraba como si no entendiese cómo podía seguir en pie, sus ojos ya brillaban rojos de furia.
- ¿Qué...qué eres? - Pronunció tembloroso mientras daba un par de pasos hacia atrás.
- Es curioso. - Habló JungKook al tiempo que avanzaba muy lentamente hacia su presa, con sus ojos encendidos. - Mi hermano odia cuando la gente titubea de miedo a su alrededor, pero a mi no termina de desagradarme. - Aseguró sonriendo de lado, con absulota fiereza. - Para que luego digan que todos los tigres de Bengala somos iguales. - Negó con la cabeza y chasqueó la lengua burlándose de aquel alfa que le miraba con los ojos aún más abiertos desde que había dicho que era un tigre. - No, yo no soy como mi hermano. El día que mi hermano perdió el control, mandó a un chico de su clase al hospital. - Se acercó lo suficiente como para poner la mano en su hombro y hablarle al oído. - Yo te mandaré directo a la morgue. - Acto seguido le cogió del cuello y apretó sin piedad. Estaba furioso, cada vez más. No sólo por el dolor de su nuca, sino porque ese tipo le daba asco.
- JungKook, no merece la pena, cariño. - Pronunció JiEun algo miedosa por la situación. YuGyeom, sin embargo, agarró el brazo de JungKook y forcejeó con él mientras gritaba.
- ¡Suéltalo! ¡Lo vas a matar! - Los gritos del perro sólo le enfurecían más. ¿Por qué lo defendía? ¿Era idiota o algo? Exasperado por su actitud, y claramente sin pensar con claridad por su gran enfado, empujó a YuGyeom con su brazo libre y este cayó al suelo de culo. Fue por el quejido que dio, que JungKook soltó el cuello del alfa y se dirigió hacia el omega, que miraba incrédulo sus ojos de rubí. - ¿Siempre va a ser así contigo ahora, JungKook? Ya no reconozco a mi amigo amable y cariñoso en ti. - Esas palabras tampoco hicieron bien en el tigre. Aún furioso, le arrebató las llaves de la habitación de la planta de arriba que el alfa, que ahora luchaba por no ahogarse, había reservado. Luego cogió la mano de JiEun, todo lo delicadamente que pudo en ese momento, que no fue demasiado, y juntos empezaron a subir las escaleras mientras todo el mundo se apartaba de su camino. Dejando a YuGyeom aún sentado en el suelo y al exnovio de la omega aún recuperándose.

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Sí que comentáis cuando se os incentiva. ¡Qué listas! Jajaja
¿Y ahora que pasará? ¿Dejaremos que JungKook pruebe de todo? Quiero opiniones de lo que pasará y, si me convencen, el siguiente lo subo mañana. ¡Qué ya es mucho curro!