Quiero protegerte

2.4K 245 3
                                    

Narra Namjoon

- Solo quiero saber más de ti.- respondí como excusa, tal vez su padre la envió a Corea por algún motivo especial.

- Solo me dijo que allí corría peligro.- en ese momento miré su rostro, pude ver como estaba desconcertada. Así que supuse que era lo único que le habían dicho.

- Ya veo no pudiste oponerte. Seguro que eres una niña de papa.- respondí con voz burlona y ñoña.

- Deja de decir eso, no me conoces.- gritó levemente, se levantó de las escaleras y comenzó a caminar.

- ¿Por qué me importa que esté mal?- me pegunté al sentir una punzada. Me levanté y anduve detrás de ella. Sus pies se movían torpemente, son solo verla caminar podía decir que estaba de mal humlr. Pensaba que no iba a parar nunca, cuando se sentó en las gradas del campo de deportes.

- ¿Estás observando a la chica nueva?- preguntó Jin de repente.

- ¿Qué? No, solo la vi por casualidad.- respondí tras girarme y mirarle.

- ¿Por qué la observas tanto? ¿Acaso… el gran demonio se enamoró?- preguntó entre risas.

- No seas estúpido, no me enamoraría de una humana.-

- Tiene un aroma muy dulce, tal vez pueda jugar un poco con ella.- respondió con una mueca mientras que la mirada.

- No te atrevas, sabes lo que hacemos aquí.- contesté como si eso fuera excusa suficiente para que no jugara con ella.

- Huir de tu querido hermano.- contestó un tanto borde.- Que por cierto… ¿A que no sabes dónde está?-

- Claro que no, dejó de importarme su vida desde el mismo momento en el que me desafío.

- Pues está en Luxemburgo. Si no me equivocó Tn es de allí.- contestó con una mueca.

- No sé nada de Tn, así que me da igual.- respondí antes de irme de allí y volver a dirigirme a clase.

- Deberías ser amable como yo. Así no te darán ni la hora.- contestó con una sonrisa antes de marcharse. Ni siquiera hice caso a sus palabras, seguía en mi propio mundo.

- Así que ese es el motivo por el que su padre la mando a Corea. Quiere alejarla de mi hermano.- no podía creer lo que acaba de averiguar, pero eso solo me hacía preguntarme más cosas.

Enamorada del diabloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora