C A P I T U L O 45
Llegué a casa envuelta en un mar de lagrimas. Dí un portazo con toda la rabia acumulada en mí ser por lo idiota que se había comportado conmigo; mucho más que la vez anterior. Entendía que estaba enojado pero no era la razón más correcta por la que me tratara así; como basura.
Sentía dificultad para respirar, traté de calmarme como más podía. Era imposible cuándo sus palabras se repetían muchas veces en mí cabeza, cómo si oyera su voz por todos lados, la dureza, lo neutra que era contra mí. Éstaba volviéndome loca. Que la única forma para deshacerme de aquel rencor que estaba sintiendo era gritar tan fuerte hasta quedar sin aire.
Fuí corriendo hasta mi cuarto, me encerré en él y allí exploté como nunca.
Recordando la escena del beso; recordando como sus manos se entrelazaban con la de ella. Recordando como Finn me rechazó y sobretodo, como trató nuestra promesa como si ya no importara, como si la pulsera ya no obtuviese un valor alguno para él. Ardía demasiado.
Entonces, mis ojos se enfocaron con la libreta que estaba sobre mi pequeño escritorio. Maldita sea. Por culpa de ésa mierda había perdido lo que más amaba en éste mundo; éstaba tan cegada que ni siquiera medí las consecuencias de mís actos ni de mis decisiones. Por culpa de éstar atrapada en una absurda fantasía descuidé lo que estaba a mí lado y ahora, jamás volverá. No podía con éso.
Abatí todo lo que había sobre la mesa, furiosa. Un estruendo se escuchó cuando todo cayó al piso, rompí cada hoja volviéndola miseria, rompí los lapices. Cada uno de ellos, ni siquiera media lo que estaba haciendo, estaba cegada. Dolida. Destruida por dentro. Y cuándo ví el rostro del chico que comenzó todo, lo rompí en mil pedazos lanzándolo a la basura. Volví a tirar cada objeto que estaba ahí.
El olor a sangre se impregnó, estaba segura que me había lastimado pero no sabía donde, ni siquiera sentía el dolor físico, nada se compara con el dolor sentimental que tenía en éste momento.
Dos toques en la puerta me hacen reaccionar, la voz de mí madre se oye desde el otro lado y gruño con molestia al no querer abrir. No quería hablar con nadie ni contestar preguntas, mucho menos que intentaran alentarme porque no iba a funcionar. Me dí cuenta que, el lugar donde me había lastimado era mi palma derecha, tomé un trapo que estaba dentro del gabinete y lo envolví para parar la sangre.
Respiré. Mamá insistió y no me quedó otra opción que abrirle la puerta o ella lo misma lo hará y tendremos un fuerte lío.
―Escuche un estruendo. ¿Qué ocurre? ―preguntó, preocupada.
―Nada mamá. ―repliqué, neutra.
Ella me analizó por unos segundos, meneando la cabeza como si adivinara mis pensamientos. Aparté la mirada para no ser testigo de lo que verdad sucedía.
―¿Lograste hablar con él?
―No quiero hablar de éso. ―pasé saliva secando mis lagrimas con brusquedad.
―Pero...
―Mamá por favor. ―me volví a verla juntando los dientes, con la voz quebrada.
Lo cual, asintió con comprensión y decidió no insistir más en el asunto. Era algo que adoraba de mamá, nunca me obligaba a que le contara las cosas ni me forzaba hasta que yo quisiera soltarlo.
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EL CHICO DE MIS DIBUJOS© [✔]
Fanfiction❝...sɪ ᴅᴇ ʟᴀ ғᴀɴᴛᴀsɪ́ᴀ ʜᴇ ᴠɪᴠɪᴅᴏ, ᴛᴜ́ ᴇʀᴇs ᴘᴀʀᴛᴇ ᴅᴇ ᴇʟʟᴀ ᴀᴜɴǫᴜᴇ ɴᴏ ʜᴀʏᴀs sɪᴅᴏ ᴍɪ sᴜᴇɴ̃ᴏ ᴄᴏɴᴄʀᴇᴛᴏ ᴅᴇsᴅᴇ ᴜɴ ᴘʀɪɴᴄɪᴘɪᴏ. ᴍɪ ᴀʟᴍᴀ, sᴇʀ ʏ ᴇsᴘɪ́ʀɪᴛᴜ sᴀʙɪ́ᴀɴ ǫᴜᴇ ᴘᴇʀᴛᴇɴᴇᴄɪ́ᴀɴ sᴏʟᴏ ᴘᴀʀᴀ ᴛɪ...❞ •✦───────────•✧ Élisabeth Wilson, es una joven carismática y apas...