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De compras

Narra Odelia




Por un momento llegué a pensar que la historia de Sidney y Aiden, era una cara antigua de nuestro pasado, algo así como una reencarnación, pero estaba muy alejada de ello, el hijo del primer vampiro que logre embarazar a la bruja blanca, sería el salvador, es decir cualquiera, un amigo de Jimin, o el que supiese sobre mí, gracias al cielo no resultó ser "Cualquiera".

Gran peligro significo para muchos, soy el fin de muchas cosas, las caretas se romperían para mostrar a los verdaderos monstruos de la historia, humanos codiciosos que enfermaron a un grupo de brujas, las cuales crearon una raza en contra de la humanidad.

Y ahí estoy, intentando digerir la historia, porque hasta hace unos días o más, era una fracasada de la que nadie se acordaba o le importaba, si moría, vivía, o si al menos se encontraba bien.

Incansablemente, pensaba en mamá, quería verla, contarle lo que me sucedía, aunque sonara a locura, si no estuviera Charles iría corriendo a sus brazos, la amo a pesar de haberme fallado tanto.

En James, cinco años separados, ni una llamada en cumpleaños, navidad, absolutamente nada, bien, no tengo celular para comunicarme, sin embargo mi madre decía "Si te aman, siempre habrá forma de conectarse, buscará la manera de acercarse aunque cueste", ¿Y por qué James no me buscaba?




Odelia– Quiero ir de compras al mercado, cosas para mí y la casa, por favor.– Le supliqué correteando por el pasillo de la casa.

Jimin Te dije que no, es peligroso y no me lo perdonaré si algo malo te pasa.– Iba con un libro en mano directo al despacho– Además no voy a estar en casa.

Odelia– Me aburre estar encerrada.– Hice un puchero.

Jimin Pues, haz postres, siempre hay hambre.

Odelia– ¿Qué parte no entiendes que tengo que ir al mercado?

Jimin Paró en seco, justo en la puerta del despacho– Bien, vas a ir.

Odelia– ¡¡Sí!!– Festejé.

Jimin Pero con mi amigo Kook.

Odelia– Oh, ¿Qué rayos? No, estoy grande para ir acompañada.

Jimin O vas con él o no vas nada.

Odelia– Lo abracé– Si me dejas ir sola, prometo darte lo que quieras cuando vuelvas.

Jimin Sonrió mirando el techo, y la esperanza renació en mi interior– Es una linda oferta... Pero no.– Cerró la puerta.

Odelia– Jimin, ¡¡Me las vas a pagar!!– Bufé– Es un inútil.

Jimin Te oí.







Hice unos gestos de niña enojada, en silencio, cual chavo del ocho, bien, no igual porque a mi edad, se vería realmente ridículo.

El señor lindo, bello, y conservador de Jimin, estuvo encerrado en su oficina privada por unas dos horas, para salir, darme un beso en los labios y decir...






Jimin En media hora Jungkook pasará por ti, si te toca o se insinúa, me avisas.







Y se marchó de nuevo, sin decirme a dónde iba, por qué o por cuánto, la verdad que no conozco a ese tal Jungkook, lo he visto dos veces y gracias, solo cuando Jimin me raptó, y el día que le mostró quién era yo.

Correo Equivocado ✉❌ (Park Ji-min)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora