El Chico Misterioso || Christopher Velez y tu ||

FINAL

Al disiparse el humo observe a Danny junto con sus amigos, algunos lobos mostraban sus dientes en forma de amenaza, además de que habían una gran variedad de seres a quienes no conocía pero estaba agradecida de que estuviesen allí, creó que eran algunos de los que conocimos en el tren tiempo atrás. Solo algunos.

- Hola princesa- saludo Danny sonriendo abiertamente, quise correr a abrazarlo pero en ese momento Veltrom se levantó furioso, junto con Jack y Sofía, además de los guardias restantes.

- No se saldrán con la suya... - murmuró chasqueando los dedos y en seguida me sentí a desfallecer, Christopher me sostuvo para que no impactará mi rostro contra el suelo y sin poder evitarlo mis ojos se cerraron.

Al abrirlos estaba de nuevo en lo que fue escenario de mis pesadillas, ese lugar lleno de césped verde y un paisaje bellísimo, no me sorprendí al ver a quien tenía detrás mío.

- Eres un cobarde... Atacarme de espaldas, y en mis sueños- reí dándome vuelta enfrentado a Jack, él me veía indignado.

- Y tu eres solo una mocosa humana y débil.

- Pero no cobarde- lo observe con una ceja levantada, me miró entrecerrando los ojos y sonrió.

-si así lo quieres - sentí el suelo temblar y en seguida caí rendida de nuevo.

Al abrir los ojos me encontré en la misma habitación en la que me torturaron, Jack estaba de brazos cruzados frente a mi.

- Bien, sin trucos, ni nada... En la vida real, tu y yo- avanzo hacia mi peligrosamente, observe el lugar y mi vista se encontró con una navaja, justo detrás de él. Cualquiera lo vería como un peligro, un desafío, una estupidez, pero yo lo veía como una oportunidad.

Reuní todo el valor que tenía y me desplace por entre sus piernas logrando hacerlo caer y tomando la navaja, en un santiamén me gire clavando la afilada punta en su ojo derecho. Mientras oía sus gritos agonizantes me levante y corrí en dirección a la única puerta, al salir me halle con un laberinto de pasillos.

Demonios, si debí prestar atención cuando me llevaron a rastras al comedor.

-Como se supone que saldré de aquí... - oí pasos detrás míos, sabía que era Jack.

Maldición... Me escondí en uno de los tantos pasillos esperando a que Jack se alejará, lo ví mirar a todos lados y correr justo en la dirección contraria, suspire aliviada.

Sentí dos manos cubriendo mi boca, mientras intentaba gritar.

- Shhh, silencio- reconocí la voz al instante.

- Cesar... - hablé girandome y abrazándolo con todas mis fuerzas- te extrañe mucho...

- y yo a ti pequeña... - Estuvimos unos segundos así, abrazados.

- ¿como llegaste aquí? - pregunté observando sus ojos y reteniendo las lágrimas.

- Danny me envió a encontrarte, y por suerte lo hice- sonreímos observandonos de forma profunda.

- ¿Que está pasando? - oí la voz de Christopher detrás mío, César nunca quito su sonrisa, más sin embargo yo me puse muy nerviosa.

- Nada, amigo, vine a buscar a ____.- respondió Cesar, Christopher colocó su mano sobre mi hombro acercándome hacia él.

- Gracias... - murmuró Chris mirándolo con un poco de desconfianza. - Tenemos que irnos linda, vamos- me dijo y lo seguí por varios pasillos.

- Los chicos están afuera distrayendo a los guardias, no sabemos dónde está Jack ni Sofía, y Veltrom desapareció.