Capítulo N°88

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Me dispuse a caminar hacia mi antigua casa, si, estaba en Harrelson, volví.

Tome mis dos maletas y salí de la cabaña, en la que estaba el portal por el que ingrese hace un año y deje mi vida atrás, el lugar seguia como lo recordaba. Mi mente vago en los recuerdos que aún me perseguían como fantasmas del pasado, pase por el ropero que trababa la puerta, y respire el aire puro que había en ese bosque, recorrí los frondosos árboles dirigiéndome al lugar que en el pasado fue mi casa.

(...)

Después de tres horas caminando llegue, la puerta estaba destruida, al igual que el interior, alguien estuvo acá.

Deje las maletas en la entrada y recorrí el lugar, el polvo se había apoderado de la posada, parecía una casa abandonada, imágenes recorrieron mi memoria, la primera vez que ingrese por esa puerta con mis padres. Subí a mi habitación, y al igual que el resto de la casa este cuarto no era la excepción.

Baje a la cocina a prepararme un té.

- ojalá que al menos funcione la hornilla- Murmuré encendiendola- ¡si! ¡Existo! -sonreí mientras calentaba el agua.

Observe a mi alrededor, que pasó acá.

-quizá sea mejor limpiar esto- anuncie preparando mi té, y en cuanto estaba listo lo lleve a mis labios y bebí un sorbo. - o quizá sea mejor ir a dar una vuelta- limpiar o salir, salir o limpiar. Mhh...

(...)

- nada a cambiando- Murmuré observando el Colegio- por donde puedo entrar... - busque con la mirada alguna puerta oculta, un pasadizo, una ventana... ¡Una ventana! Mi vista se fijó en una pequeña ventana que estaba a unos metros del suelo, bingo.

Después de varios minutos intentando trepar, al fin lo logre.

Caí... ¿Como se dice? ... Con una elegancia sin precendentes, colisionando el rostro contra el bendito piso.

- maldición- bufé y me levante del suelo, al parecer estaba en la enfermería, genial.

Mi salón debe estar por... Allá, corrí hacía donde se suponía que debía estar mi curso.

Un momento...

¿Porque estoy invadiendo el Colegio? Bien, no bueno dar marcha atrás ¡adelante!

Llegue a la puerta del Salón, la abrí, todo seguía igual.

- ¿ya encontraste lo que buscabas? - me sobresalte por la voz detrás mío, al parecer no estoy sola en mi invasión.

- solo quería... - que mierda...

En cuanto me di vuelta encontré a Christopher... ¡Esto no tiene sentido!

- Que haces acá... - Murmuré, el sonrió ¡¿Que diablos esta pasando?!

- ¿ya encontraste lo que buscabas? Debemos irnos- ¿Que?...

- como...

- un momento más, no me presiones- oí mi voz, esperen ¿mi voz? Me di vuelta en busca de la voz, y allí estaba yo, buscando algo entre los asientos.

- apresurate, ya van a cerrar el Colegio. - bufo Christopher.

- ya voy, ya voy, es que no lo encuentro- dijo mi otra yo.

Solo me quede allí totalmente aturdida, me encontraba en medio de Christopher y yo, bueno, mi otra yo la única diferencia era que ella estaba un poco más joven que yo, y al parecer ninguno me podía ver ni oír.

- eres muy torpe, como pudiste olvidar las llaves de tu casa. - volvió a quejarse Christopher. Estaba recargado en el marco de la puerta.

- Uhhh, disculpe señor perfecto- dijo mi otra yo sin dirigirle la mirada a Velez.

El Chico Misterioso || Christopher Velez y tu ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora