Mientras tanto Ahmena recibiría la peor noticia de su vida que la derrumbara todas sus ilusiones, enseguida ambos hombres llegaron con el cuerpo del Príncipe ya frio sin vida al campamento donde se encontraba Ahmena.
Ahmena escucho el galopar de los caballos que llegaron, enseguida bajaron François y Donatien de los caballos. Y el padre de esta entro al campamento a darle la noticia a Ahmena, ella lo vio entrar y él tenía una cara que no podía descifrar y pregunto.
— ¿padre encontraron a Dhivano dime?
—Ahmena yo...—dijo desesperada.
François empezó a llorar.
——qué te pasa padre dime ¿Por qué lloras? dime ¿dónde está Dhivano?
—lo lamento Ahmena, lo lamento—No dejaba de repetirle.
— ¿qué lamentas padre?, respóndeme ¿ Lo encontraron? ¿Esta con ustedes?
—si hija lo encontramos—le respondió a tales cuestionamientos.
—entonces ¿dónde está? quiero verlo.
—es que Dhi...Dhivano
—dime ¿él está bien verdad? Respóndeme padre dime.
—no lo está Ahmena, él no está bien.
— ¿le paso algo? ¿Dime, dime que es lo que le paso? Respóndeme, ¿Por qué no me dices las cosas?
—no se como decírtelo—se le traba la lengua torpemente porque no buscaba manera de expresar la horrible verdad.
— ¿decirme que?
—tienes que ser fuerte hija muy fuerte, Ahmena...
— ¿fuerte en qué?—La joven no entendía el mensaje que su padre trataba de expresarle
—es que Dhivano...
—habla ya padre—Le decía enojada y desesperada.
— él está muerto Ahmena—Al fin soltaba aquella pesada verdad de sus labios.
La joven queda con cara de horror no lo podía creer y esta le grito muy agitada.
—no es verdad, no es cierto, mes estas mintiendo padre, por favor dime que me está mintiendo—Decia con una gran desesperación.
Ahmena tapo sus labios con su mano y empezó a llorar y solo decía.
—No es cierto de lo que sale de tus labios no es verdad, me niego a creerlo...
—no te miento hija....
—no es verdad no, deja de jugar me está broma cruel, padre él no puede estar muerto, no lo está ¡¿Dónde está padre donde dime?! Ya basta de bromas.
—yo jamás jugaría con algo así Ahmena...
—dime ¿dónde está?
Y le grito fuertemente:
— ¡dimelooooo!
—está en el campamento donde compartirías con la esta noche.
Ahmena salió corriendo de prisa, entro al campamento donde su hermano hacía en la entrada de este, el al verla solo le dijo:
—lo siento hermana, de verdad lo siento.
Donatien abrazo a su hermana y le dijo:
—solo te queda la resignación.
Y esta con su cabeza decía no, aunque no pronunciaba palabra alguna, empujo a su hermano y enseguida entro al campamento y lo vio tendido en el suelo, fue directamente donde hacia inerte el cuerpo de su amado envuelto con unas sábanas, esta quedo quieta frente a él se acercó y toco sus labios que ya estaban azules, la locura se apodero en ella y lo abrazo, abrazo a quel cuerpo de su amado y solo grito y empezó a llorar.
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Ahmena y Dhivano [Terminada]
Historical Fiction¿Alguna vez oíste de la Maldición de la Luna Negra? Conoce la historia del amor de Ahmena y Dhivano, dos amantes unidos por el destino y esta maldicion uno viene de la opulencia, el lujo y, sobre todo del rechazo de su padre. La otra viene de la pob...