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Viernes por la mañana, hoy nos iríamos a Boston por lo que no asistiríamos a la universidad, nuestro vuelo sale a las 6:00 am, Harry quedó en pasar por mí, eran las 5:00 am cuando mi celular tintineó indicándome que me había llegado un mensaje.
"Estoy abajo."
Tomé mi pequeña maleta, sólo traía tres cambios junto a mis cosas personales. Me aseguré de cerrar con llave y tener todo.
Al llegar abajo Harry se encontraba en la puerta de entrada, sonreí y me acerqué.
— ¿Lista?— Asentí dándole mi maleta, luego de ver que abrió el maletero.
— ¿Tú lo estás?— Levanté una ceja divertida.
— Espero regresar completo.— Bromeó.
Llegamos al aeropuerto luego de un trayecto tranquilo, al ser muy temprano el tráfico no era tanto y eso estaba mucho a nuestro favor ya que el aeropuerto estaba a 40 minutos de mi casa. Registramos nuestras maletas para evitarnos problemas y al dejarlas nos fuimos a Starbucks para comprar unas bebidas.
— Muero de sueño.— susurró Harry abrazándome por los hombros y recargándose en mí.
— Yo igual, dormiré todo el vuelo.
— ¿Tus padres saben que iré?
— No, te odian, ¿cómo les voy a decir?, es mejor que solo llegues y se aguanten.— me encogí de hombros, él me miró.— ¿Qué?
— Pero me dijiste toda la semana que no me odiaban.
— Si bueno... creo que no era verdad, pensaba decírtelo en el vuelo así habría menos posibilidad de que huyeras, pero eres un preguntón.— golpeé suavemente su brazo.— y no huirás.
Entrelacé nuestros brazos mientras en mi otra mano traía mi Café; caminábamos a la puerta de abordar que nos habían señalado ya que no tardarían en anunciar el vuelo.
"Pasajeros con destino a Boston, Massachusetts favor de pasar abordar por puerta B98"
Soy toda una adivina, entregamos nuestros boletos y nos dejaron pasar.
— Pido la ventana.— Dije como niña pequeña. Harry soltó una risita y me dejó pasar primero.
— Serán las 7 horas más largas.— Dice Harry cuando ya nos encontramos en el aire. A mi comenzaba a darme sueño por lo que decidí dormir.
