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Lunes por la mañana, hoy era mi primer día en la empresa Styles, Harry me llamó hace unos días diciéndome que su padre había aceptado que hiciera mis prácticas en su empresa, estaba nerviosa no sabía como vestirme, entraba a las 10:00 am, son las 9:00 y aquí estoy sentada frente a mi closet sin saber que usar. Ya me había duchado luego de llegar del gimnasio, hace dos horas que me habían levantado.
Un toque en mi puerta me interrumpió mientras cepillaba mi cabello, corrí a la puerta para abrir, al hacerlo no había nadie, solo había una caja, salí al pasillo para ver si podía mirar a alguien en el ascensor pero nada, estaba solo. Fruncí el ceño mientras tomaba la caja, caminé a mi habitación y la comencé abrir.
Primero había una nota:
"I'm going to pick up the pieces"
¿Eh?, ¿qué era esto?, dejé la nota de lado y había una caja mas pequeña, éste contenía un rompecabezas, de un corazón, estaba armado pero le faltaban piezas. No entiendo, ¿Quién envió esto?
Luego de revisar de nuevo y leer una y otra vez la nota, me rendí no había nada más, solté un suspiro mientras lo dejaba de lado, no tenía tiempo para averiguar.
Caminé a mi closet antes de que se hiciera mas tarde, al final había decidido por unos pantalones blancos holgados de tiro alto, una camisa de color navy, la fajé por dentro, tomé un blazer corto blanco, mis zapatos de tacón navy y listo, mi cabello lo había peinado con todas mis cremas de forma que se hicieran mis ondas naturales. Rápidamente puse un poco de corrector, rubor, rímel y brillo labial, anteriormente había lavado mis dientes, cogí mi bolso con todas mis cosas dentro y finalmente salí.
9:57 am finalmente había llegado, me preocupaba que hubiese tráfico pero por primer vez tuve suerte y me tomó 10 minutos llegar. Entré al ascensor y presioné el botón del piso 10 tal y como Harry me había indicado que hiciera.
— Hola Harry.— Saludé en cuanto salí del ascensor y lo miré.
— Hola, papá está en la oficina vamos.— comenzó a caminar entre unos escritorios, había secretarias con trajes que dejaban ver demasiado, enserio, demasiado, todas miraban a Harry como si fuera un Dios. Estoy segura que las escuché suspirar cuando él pasaba por su lado, pero Harry caminaba con la cabeza en alto, con una expresión seria en su rostro, no las tomaba en cuenta.— ¿Estás nerviosa?
— Mmm... creo que no, tengo conocimientos no creo que sea difícil.— Sonreí de lado, él asintió.
