CAPITULO 61

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Rachel.

El resto de la semana se repitió la misma rutina, pero las pesadillas seguían, apenas y dormía, me despertaba a mitad de la noche, no sabía que hacer para que pararan pero eso comenzaba a frustrarme y provocaba que apareciera mi mal humor

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El resto de la semana se repitió la misma rutina, pero las pesadillas seguían, apenas y dormía, me despertaba a mitad de la noche, no sabía que hacer para que pararan pero eso comenzaba a frustrarme y provocaba que apareciera mi mal humor. Me levanté de mi cama frustrada de que de nuevo no pude dormir, me dirigí a la cocina con el fin de prepararme un té, revisé mi celular mientras esperaba que el agua hirviera, una llamada entrante apareció en la pantalla de mi celular, sonreí al ver que se trataba de Harry.

— Hola amor.

— Hola nena, ¿cómo amaneciste? ¿Pudiste dormir?— negué pero recordé que no podía verme.

Suspiré.— No, de nuevo.

— ¿Quieres que vaya?

— No quiero molestarte.

— Cariño jamás lo harías, voy para allá, llevaré el desayuno así que no prepares nada.— dice mientras escucho como toma sus llaves.

— Dios, te quiero tanto.— susurré en la línea.

— Y yo a ti más, besos, no tardaré.— Colgó.

Hice el té y caminé a la barra de la cocina, me senté mientras me quedaba viendo un punto fijo. Necesitaba hacer algo, solté un suspiro mientras tomaba mi cabeza entre mis manos, mi cabeza dolía demasiado sabía que se debía a mi falta de dormir; tomé mi celular, lo desbloqueé dirigiéndome a contactos intentaría llamar a Zayn sabía que el me podía ayudar, lo consideraba mi mejor amigo y lo extraño como tal.

Pip pip pip

Seguía bloqueada,tiré el celular en la encimera acuné con mis manos la taza y me levanté para caminar a la gran ventana en mi departamento, recuerdo cuando entré aquí junto a Zayn ambos amamos éste lugar. El sonido de la puerta me distrajo de mis pensamientos, deje la taza en la mesa de centro y me dirigí a abrir.

— Hola preciosa.— dijo Harry en cuanto abrí la puerta para después depositar un lindo y corto beso en mis labios.

— Hola.— lo abracé.— ¿Qué has traído?

— Burritos, te encantarán.— me guiñó un ojo.— Después podríamos ir de nuevo a la cama a que duermas un poco.

— Es imposible.— recargo mi barbilla en mi mano mientras observo como trae unos platos, saca el jugo de naranja junto a unos vasos, sonreí de lado al ver su atención.

— ¿Había pasado antes?— Asentí.— ¿y cómo terminaron?

— Zayn.— miré mi burrito.— él no lo sé, se lo contaba todo el tiempo y me ayudó, creo que tenía las palabras correctas siempre, es mi mejor amigo, pero eran sueños diferentes como accidentes con mis padres pero eran igual de horribles, fue antes de lo que sucedió con Hugh, tengo la sensación de que pasan cuando alguna persona en mi vida se aleja... en ese momento tu estabas lejos y ahora él lo está... ni siquiera me habla.— Agaché mi mirada algo triste.

Adore you | h.sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora