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Los libros sobre arquitectura naval eran bonitos a la vista, porque tenían imágenes tan impresionantes, pero eran realmente difíciles de leer. Al menos para Kim Seokjin, porque no era un buen lector. Yoongi, por otro lado, no solo se veía deslumbrante, de pie en el mar o tomando el sol en una toalla, también era el hombre más inteligente del mundo y podía leer todas las palabras difíciles con fluidez, con solo echarles un vistazo.
Seokjin estaba absolutamente fascinado por el tiempo que Yoongi hojeaba las páginas, leyendo el texto como si conociera el libro desde hace siglos. Se sentó completamente desnudo entre las piernas de Yoongi, apoyado contra su pecho desnudo, y escuchó con atención, deseando que las tontas olas del océano ya estuvieran tranquilas porque quería escuchar toda la maravillosa voz profunda y no perderse nada.
-Los grandes barcos modernos son quizás los proyectos de ingeniería modernos más complejos y representan las estructuras móviles más grandes hechas por el hombre- Yoongi apoyó la barbilla en la parte superior de la cabeza de Seokjin mientras leía. El libro era bastante aburrido para su gusto, pero era lindo cuánto lo disfrutaba Seokjin, así que luchó contra el texto aburrido, pretendiendo que era lo más emocionante que había leído en su vida- Los barcos aún transportan más del 90% del comercio mundial y aún transportan un gran número de personas en cruceros de placer y transbordadores en todas las áreas del mundo.
Seokjin se sintió personalmente involucrado al escuchar la palabra "cruceros". Eran ellos. Sorbió la nariz, tratando de encontrar la palabra en el mar de letras negras, y alcanzó su pene desnudo, acariciándolo sin darse cuenta.
-Se necesitan barcos y otras estructuras marinas para explotar las riquezas de las... jodidas profundidades- Yoongi apretó los dientes por la última palabra, golpeando el costado del muslo desnudo- Quita las manos de tu puto pene, dije- tomó la barbilla del hombre con fuerza y forzó su cabeza hacia atrás para crear un incómodo contacto visual- Pide disculpas.
Seokjin chasqueó los labios.
-Lo siento.
-¿Por qué carajo?
Los ojos marrones parpadearon nerviosamente.
-Tocando.
-¿Qué tocaste?
Seokjin se inclinó a ciegas para señalar su pene y se estremeció porque su muslo dolorido fue golpeado una vez más inmediatamente. El agudo escozor que se extendía por su piel hizo que su corazón se acelerara y el travieso músculo de su trasero reaccionara de manera inapropiada.
-Mi pene.
-¿Quién tiene permitido tocarlo?
Seokjin volvió a chasquear los labios. Era difícil tragar con la cabeza tan estirada hacia atrás.
-Tú.
-Mira a mi jodido cachorro siendo tan inteligente- Yoongi mantuvo la mirada seria por un momento más, luego soltó la barbilla del hombre y frotó el calor del punto doloroso que había creado, pasando la página- Su diseño, construcción, mantenimiento y operación, en los cuales los arquitectos navales juegan un papel importante o ejercen una influencia considerable, son actividades fascinantes. Aunque una de las más antiguas...- se detuvo a mitad de la palabra cuando Seokjin volvió a inclinar la cabeza hacia atrás, todo por su cuenta, y se estiró para tocar la nuca y la mejilla con dedos torpes.
-Taehyung es malo cuando le pegas- las tímidas palabras de Seokjin, que sonaban bastante ásperas, fueron acompañadas de un ligero rubor que recorrió las pálidas mejillas.
Yoongi dejó el libro, sorprendido por la pregunta.
-¿Es un castigo cuando Taehyung recibe azotes?- abrió las piernas dobladas un poco más, haciendo que Seokjin se girara en parte para poder mirarlo más cómodamente- Muy raramente. Es más parte de nuestro juego.
Seokjin evitó sus ojos, una breve punzada de celos recorrió su pecho. No le gustó que Yoongi y Taehyung tuvieran un juego privado secreto con piel caliente y erizada y penes duros. Yoongi chasqueó los dedos, haciendo que su sumiso volviera a mirar hacia arriba.
-Lo golpeo, lo azoto, lo amordazo porque le gusta. Es un tipo especial de dolor que se siente bien para algunas personas. Pero no lo hice al principio, ¿verdad? El juego de impacto requiere mucho de jodida confianza.
-Hm- Seokjin sorbió la nariz, tirando de los dedos de su mano derecha. Quería confesar que quizás él era una de las personas a las que les gustaba el dolor especial, y que él también podía ser parte de las escenas, pero las palabras no salían- Bueno- se reclinó de nuevo, contra el pecho cálido y seguro que tanto le gustaba, y tomó el libro, indicando que su pregunta había sido respondida y que quería leer un poco más. Pero no importa cuánto trató de concentrarse en las maravillosas y profundas palabras que vibraban a través de la garganta de Yoongi, sobre los petroleros y los buques de guerra, su mente simplemente no dejaba de volver a la huella roja de la mano, sabía que era visible en el costado de su muslo. Ni siquiera tuvo que mirarlo para comprobarlo, podía sentir que estaba allí.
-... debido a la variedad de estructuras flotantes y los muchos compromisos necesarios para lograr el diseño más efectivo, es exigente- Yoongi acarició el costado de la cara de Seokjin, sabiendo exactamente que su sumiso quizás estaba físicamente en la playa, pero con la mente muy lejos en una sala de juegos bien equipada en Seúl. Así que no le sorprendió escuchar una declaración muy tranquila, muy tímida, pero también desafiante, murmurada entre 'superpetroleros gigantes' y 'barcos piloto'.
-Confío en ti.
Él no se rió ni sonrió, sino que besó una mejilla muy cálida, que no tuvo que mirar para saber que estaba sonrojada en un bonito tono rojo.
-Lo sé. Y veo lo que te gusta. Pero el dueño marca el ritmo. ¿Verdad? No el cachorro travieso.
*****
Alrededor del mediodía el cielo se nubló y el viento refrescó, pero el joven sentado en una de las mejores mesas del Sunset Cafe, no prestó mucha atención al clima. Vestía ropa seca, medio litro de jugo en el estómago y en su plato solo estaban los mansos restos de la mejor langosta con salsa de mantequilla y limón que el restaurante tenía para ofrecer.
Yoongi se rió entre dientes, pasando un trozo de pan por los jugos de su plato.
-¿Por qué no entraste y preguntaste?- disfrutaba al máximo del estado hablador de Seokjin y ni siquiera estaba de humor para corregir la postura casual del hombre. Verlo hablar con tanta libertad era raro. Facciones totalmente relajadas, el codo en la mesa, el pómulo apoyado en el dorso de los dedos, una pequeña sonrisa constante en los labios. Puso estrellas en los ojos marrones y un deslumbramiento en un rostro pálido, transformándolo por completo en otra persona. El hombre que era en el centro, el hombre que se suponía que era, el hombre que se escondía el 99% del tiempo debido a inseguridades y severos sentimientos de inferioridad. Pero estaba bien, porque al menos no se había ido por completo. Todavía estaba allí, y Yoongi sabía cómo atraerlo para que jugara.
-No pude. El pie de apoyo estaba roto-la voz de Seokjin adoptó un tono alegre y más alto, con un encantador crujido al final- Jongin Hyung estaba enojado y quería irse antes de que llegara la policía- resopló al recordarlo- Fue un día de mierda.
-Hm, no lo sé- Yoongi se encogió de hombros, la esquina de su boca se inclinó en una media sonrisa- Suena como un jodidamente gran día para mí.
Seokjin sorbio la nariz y miró hacia arriba, encontrándose con ojos oscuros. Algo cálido atravesó su pecho, haciéndolo consciente de la brillante banda de acero alrededor de su cuello. El objeto más preciado del mundo.
-Hm- él sonrió en respuesta, empujando tímidamente el pie de Yoongi debajo de la mesa, y luego sintió que su corazón se apretó de alegría y emoción, cuando el gesto fue devuelto después de 7 segundos.
