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La cabina 14644 en la cubierta 14 estaba justo al otro lado del pasillo, y Seokjin aun asi habia tardado más de veinte minutos, agarrando una camiseta manchada y algunos documentos contra su pecho frente a la habitación de Namjoon. No se atrevió a entrar ni a llamar. La posibilidad de dejar las cosas junto a la puerta cruzó por la mente de Seokjin, pero Yoongi le había dado instrucciones estrictas para que se las entregara personalmente. Así que se quedó cerca de la puerta, fingiendo no escuchar la acalorada discusión desde atrás.
-¿Entonces no quieres visitarlo?- la voz de Namjoon era fuerte y llena de incredulidad.
-¡No lo sé!- Taehyung casi gritó, claramente emocionado después de discutir durante más de veinte minutos- ¡Él lastimó a Jimin! ¡Casi lastima a Yoongi! No le importaba un comino...
Namjoon lo interrumpió, alzando la voz aún más.
-¡NO ERA EL MISMO! ¡ESTÁ ENFERMO! ¡NO SEAS INJUSTO, TAEHYUNG!
Taehyung soltó una risa triste, herido y derrotado.
-¿Sabes que?- se puso los auriculares y le dio la espalda a Namjoon- No quiero hablar más de esto.
Seokjin se sobresaltó cuando la puerta se abrió y el chico con hoyuelos en las mejillas salió, dándole primero una mirada confusa, luego gruñó un "Hola" enojado y se marchó furioso. Seokjin lo vio alejarse, queriendo decir algo, pero al final se dio la vuelta y entró en la habitación.
Taehyung miró por la puerta del balcón. Música fuerte y agresiva a todo volumen en sus auriculares para desconectarse de la vida real.
Seokjin dejó su entrega sobre la cama y se acercó vacilante. Estaba bastante seguro de que Taehyung quería estar solo, pero le dio un golpecito en el brazo de todos modos.
-Puedes venir a nuestra habitación- fue una oferta tranquila, tosca, inaudita gracias al impresionante tono bajo de barítono de Mister Di'Anno.
Una lenta sonrisa se formó en el rostro de Taehyung, sin afectar a sus ojos marrones. Apagó el clásico de Iron Maiden y se dio la vuelta, pareciendo agradecido por la persona que vio.
Seokjin sorbió la nariz, sin saber qué decir, y luego se echó hacia atrás con un gruñido, cuando le pusieron un par de auriculares viejos en la cabeza.
Taehyung sonrió.
-Top Gun. ¿Conoces esa película?- apretó un botón en su iPod, mirando a Seokjin a los ojos mientras comenzaba su canción favorita, extra cursi y de besos.
Seokjin parpadeó a través de su largo flequillo y luego lo hizo a un lado, sintiéndose tímido y un poco incómodo con la situación. Él conocía la canción, y sabía que era para chicas enamoradas, porque Jongin casi había arrancado el botón del estéreo cuando la canción sonó en la radio en su viaje por carretera a Busan un día. Pero de alguna manera sonaba bien ahora, y Jongin no estaba allí.
