Siempre se vuelve al primer amor

Capítulo 34: Viaje IV

Narra Laura

La luz que entraba por la ventana me hizo despertar y al instante un dolor de cabeza invadió mi cuerpo. Como puedo me giro para no tener aquella luminosidad directo en mi cara, al hacer el movimiento chocó con un cuerpo y me sobresalto.

Con dificultad empiezo a abrir los ojos y lo veo ahí durmiendo al lado mío. Guido estaba con el torso desnudo y se lo veía en un profundo sueño.

-¿Qué carajo pasó? - me senté en la cama y me agarre la cabeza.

Rápidamente las imágenes de anoche empezaron a hacerse presente en mi cabeza, las risas, la botella que nos tomamos, los besos y como disfrutamos haciéndolo.

Si buscaban en el diccionario la palabra mierda les apuesto lo que quieran que aparece una foto mía al lado de la descripción. ¿Cómo le iba a hacer esto a Fran? Me volví en cualquier cosa y no me estaba gustando.

-Guido - lo sacudió como puede debido a que todo me daba vueltas - despertarte.

-Se me parte la cabeza - dice sin moverse - ¿Qué paso?

-No... no teníamos que despertarnos así - dije tapándome la cara.

-Estuvo buenísimo - dijo con una sonrisa - cuando quieras podemos repetirlo.

-Ándate - dije con bronca - ándate de mi cuarto.

-Claro ya me usaste y ahora no queres nada más - dijo parándose.

Tenía que ser joda, ¿Cómo va a decir semejante pelotudez?

-Sos un pelotudo - agarre el buzo que estaba en el piso - no tuvo que haber pasado.

-Lo decis ahora pero anoche no decías lo mismo - dijo con una sonrisa y le revoleó un almohadón.

-Cuando salga del baño no quiero verte - solté con un poco de bronca y me fui de la habitación.

Apenas entre al baño lo primero que hice fue ir abajo de la ducha, pensaba que así se me iba a pasar un poco el dolor de cabeza pero claramente no fue así. No podía hacer movimientos muy bruscos porque enseguida me mareaba y sumado al agua caliente no me hizo muy bien que digamos.

Salí de aquel cuarto con vapor y me encontré a Guido sentado en la cama.

-No entendiste cuando te dije que te vayas ¿no? - pregunte un poco irónica.

-Tenemos que hablar - respiro hondo - lo de anoche fue...

-Un error - complete yo la frase - todo aclarado, ahora déjame sola y no le digas a nadie.

-No quería decir eso - se paró y se acercó a mi - fue lo que veníamos deseando hace mucho y con el alcohol en el cuerpo lo pudimos expresar.

-NO QUIERO NADA CON VOS - solté con bronca, de alguna manera se lo tenia que hacer entender - YO ESTOY BIEN CON FRANCISCO, VOS Y YO NO TENEMOS NADA, QUIERO OLVIDARTE Y EMPEZAR DE NUEVO PERO NO ME DEJAS EN PAZ.

-No digas cosas de las que te puedas arrepentir - dijo con algo de angustia.

-¿SABES DE QUÉ ME ARREPIENTO? - el negó - DE SEGUIR CON VOS CUANDO DESCUBRÍ LA VERDAD, DE AQUELLA VEZ QUE TE CREÍ CUANDO ME DIJISTE QUE ME AMABAS, DE ESO ME ARREPIENTO.

-Hiciste bien en creerme, porque fue real - dijo el serio - cuando te dije que te amaba fue en serio.

-No quiero escucharte - cerré los ojos - ándate y olvídate de lo que pasó.

-Si es lo que queres - en su mirada se reflejaba tristeza - te lo cumplo.

Agarro sus cosas y se fue de la habitación, inhalo una bocanada de aire y después la expulsarla, sentí como mis piernas me fallaron y caí al piso, fue ahí cuando estallé en llanto. Al principio no entendía porqué, es decir, ya estaba hecho y Fran no lo sabía pero tampoco quería ocultarlo no iba a hacerle eso.