Re: Zero Arco 6 El『Salón de los Recuerdos』

Capítulo 80: Muerte de la mente.

Huele a ira.

Fragante, suave, un olor a ira pura. Revolvía su pequeño y delgado cuerpo, él sabía que esto lo elevaría a otro nivel.

Ley: Jajaja~tsu.

Batenkaitos subió y bajó la escalera de caracol y gruñó ante las palabras de Ram. Al ver las fuertes emociones en sus ojos carmesí, Batenkaitos rió extasiado mientras respiraba la ira, el odio y el asesinato a los que se enfrentaba. Decir que vivía solo para este momento no sería exagerado en absoluto.

Ley: Bien, está bien, está muy bien, porque está bien, claro que está bien, ¿Acaso no está bien?. Por lo general, no hay nadie que nos mire con una cara tan enojada. Es un sentimiento muy valioso, ¿no? ¿Lo entiendes? ¿Entiendes lo felices que estamos ahora~tsu?

Batenkaitos se relame mientras daba pequeños saltos por la emoción. Así es, encontrarse con esa clase de emociones era algo inusual para Batenkaitos. Los 『Recuerdos』 y 『Nombres』 que fueron robados por la autoridad de la 『Gula』 eran borrados del mundo y ni siquiera pueden ser reconocidos por nadie más que Roy y Louis. La tristeza de perder a un ser querido, la ira, la sensación de pérdida, todo desaparecía por completo, dejando absolutamente nada.

Ley: Eso es normal, por supuesto. Hasta ahora nunca nos había importado.

Como los miembros activos del culto de la bruja eran personas odiadas, muchas veces se encontraban con gente que los odiaba. Sin embargo, la autoridad de Ley lo hacía diferente, no había nadie que lo odiara personalmente, y mucho menos alguien que tuviera como objetivo matarlo. Era una ley natural creada por la autoridad de la 『Gula』, una ley natural invisible, que había sido destruida. Destruida por la aparición de alguien que no se veía afectado por el poder de la 『Gula』.

Ley: ¡Natsuki Subaru~tsu!

Murmurando el nombre del hombre con el cual Louis estaba obsesionada, Batenkaitos siente un cosquilleo en su delgado pecho. No, él no había sido inspirado por Louis. Él lo conoció antes. Había pensado mucho en ese hombre, de una forma más fuerte y profunda de lo que Louis lo había hecho. Es decir...

Ley: Nee-sama, entiendes, ¿verdad?

Existe una profunda relación entre ese dulce dolor en el pecho y la mirada de desprecio de la chica. No, de hecho no es tan profunda. Se puede decir que la primera es solo una persona cualquiera, mientras que la otra es irremplazable. Ella debería ser capaz de entenderlo. Sentimientos dulces, pálidos, sentimientos demasiado fuertes.

Estos sentimientos de amor y odio, encerrados en su pecho dolorido, esperando ser liberados. Por eso, con tanta convicción y expectativa,  decidió abrir su boca y hablarle.

Ram: Ram ya te lo dijo. Por favor muere mientras chillas como un cerdo.

Ley: ————tsu!

En un instante, el ataque de Ram hizo que Batenkaitos volara hacia las escaleras. Al final logró esquivarlo, pero la punta del bastón que sobresalía apuntaba exactamente a su ojo derecho. Si hubiese tardado aunque fuese solo un momento en quitar su cabeza, Ram habría estado agitando su cerebro desde su órbita.

Ley: ¡Lo sentimos Nee-sama! ¡A menos que hubiésemos comido uno, no podíamos imitar el chillido de un cerdo, pero no podemos morir sin hacer nada~tsu!

Ram: Ram lo ha reconsiderado. Si no puedes imitar algo que suene como un cerdo, sería un insulto para los cerdos.

Volando sobre las escaleras de caracol, el aterrizaje se retrasa por la cantidad de escalones. Ram lanzó una tremenda rafaga de golpes mientras hablaba con Batenkaitos, desbordando una fría intención asesina. Girando su esbelto cuerpo, Ram atacaba con el bastón, lanzaba una patada y daba un golpe con el codo.