TE DESEO

Cap. 64 Ahora mismo tu cercanía me haría daño.

Ivy Carter

Verlo tan lleno de dudas le dolía aún más. Entendía que estuviera confundido porque hasta ella lo está, pero no es ni siquiera capaz de concentrarse en otra cosa, se sentía muy dolida aún por la escena. Definitivamente le aclarara algunas cosas, pero muchas de ellas son complicadas de decir. Él la ama y ella a él, no tiene duda de eso, simplemente tiene miedos que le impiden dejarse ir por completo. Muchos de ellos son imposibles de expresarle ahora, porque si lo hace terminará llorando de nuevo frente a sus ojos y ahora no quiere mostrarse vulnerable. Su cercanía llegó a debilitarla aún más, hasta que poco después él se sentó en el sillón cruzando los brazos y mirándola con lo que define algo de frialdad. Mantener la mirada con la de él le resulta difícil. Su mente aún seguía con la maldita escena y se le hacía más difícil creer que este hombre era de ella, porque comienza a creer que su cuerpo nunca ha sido para ella como él tanto decía, y ahora que lo vió siendo tocado por otra su corazón estaba más que apagado. Quiere expresarse, no le es fácil, pero sabe que el necesita una explicación.

A pesar de que este tipo de problemas la hacen volver a llenarse de inseguridad y a encerrarse en un pequeño escudo auto protector. Sus preguntas le rodeaban la cabeza. ¿Cómo le hará entender que no se trata de él? Él es perfecto para ella. Que quiere protegerlo y que simplemente está herida por creer cosas que nunca hubo como esa conexión que creía tener, por darse cuenta de que nunca podrá ser tan única para él como quisiera, que esta pequeña escena la hizo ver que es él podría reemplazarla fácilmente. Le duelen tantas cosas que solamente se estaba guardando para ella, siente que si le deja saber sería una completa burla ante sí misma por no haberse dado cuenta antes.

- Creo, que anoche pudiste no haber asimilado por completo el riesgo de amarme con mi pasado. Dime, ¿qué harías si alguien se llega enterar? La verdad al final siempre sale y estoy preparada para admitir mi complicidad, ¿pero tú? ¿Seguro que quieres arriesgar tu empresa? ¿La confianza de todos? ¿Te arriesgarías a ir a la cárcel?

Le pregunta manteniendo su semblante burlón mientras alza una ceja. Sigue negándose a mostrarse vulnerable, no quiere demostrarle que está herida porque esta vez siente que debe levantar un poco de su dignidad.

- Porque, aunque pagaras fianza y tuvieras a tus abogados no hay mucho que pueda salvarte del escándalo frente a la prensa. ¿Qué crees que dirían tus asociados al enterarse de que eres cómplice de un crimen? ¿Crees incluso que aún tendrías el respeto de estos empleados que simplemente agradecen el buen cheque? Se les olvidará la lealtad cuando vean la gravedad del problema en el que te metiste. No creo que se atrevan a meter las manos al fuego. Solo quería que pensaras un poco más en eso. Esto del amor es completamente nuevo para mí. No se amar. ¿Cómo podría si nunca lo recibí?

Finge una sonrisa rodando los ojos con algo de indiferencia.

- Mis padres siempre distantes, mis hermanos cada uno estaba por su lado y ni hablar de algún novio porque conoces al último y él ni siquiera me atraía. Yo te amo, pero no sé cómo darte algo que nunca recibí. Me alejo porque me da miedo tu amor.

Le dejó saber lo último poniéndose un poco más seria.

- Porque esa manera en que me cambias me hace sentir que no tengo el control de mi misma. Me da miedo que me ames porque para mí es extraño que lo hagas cuando nadie más lo hizo.

Expresa omitiendo la parte donde en realidad le duele que la ame y no puede ser suficiente para él.

-Y me aterra que me ames porque yo podría llevarte a tu perdición. Conmigo tienes más que perder que ganar.

Admite volviendo a sentir esa presión en el pecho aún más intensa, pero se fuerza a fingir una sonrisa.

- ¿Te parece suficiente explicación? Y, sobre cómo me rompiste el corazón mejor ni hablemos. Para ti ni siquiera importaría.