-Me gustaría estar ahí contigo, desnudarte poco a poco mientras te estremeces bajo mis dedos, abrir totalmente tus piernas y saborearte, jugar con tu cuerpo hasta llevarte fuera del mundo aún entre esas cuatro paredes. Luego poseerte, hacerte mía y...
Seguía un poco nerviosa por contarle todo esto pero no daba marcha atrás, quiere dejarle saber lo que realmente es, ya no quiere mentirle.
-Desde ahí me di cuenta de que mis hermanos no solo habían cambiado para mal... se habían convertido en asesinos... lo peor es que no pude hacer nada... O tal vez... no quise hacerlo. Se sentía muy bien ver cómo sufrían.
-Estábamos por encima de ellos esta vez. Óscar me pidió que les dijera que pararan. No lo hice. ¿Porque debía hacerlo? Estaba herida. Entonces confesó; que el había asesinado a nuestros padres. Mandó a alguien para que... impactará su auto contra la patrulla. Me hubiera gustado haber tomado un cuchillo y haberle hecho sentir lo que yo al enterarme de que habían muerto y todo por su culpa. Megan me detuvo de cometer una estupidez...
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-Me dejaron en claro que ellos harían el trabajo sucio, pero no dejarían que yo siguiera su camino. No tuvieron opción. No fui capaz de seguir observando así que subí a mi habitación, no quería seguir viendo en lo que mis hermanos se habían convertido.
-Desde entonces me di cuenta de que muchas cosas de lo que ambos lograron, lo tomaron a la fuerza. Arrebatando vidas, amenazando, lastimando... De los tres... Daryl fue el que más cambió. Impulsivo. Vengativo. Poderoso. Se llenó de buenas influencias aquí en Nueva York. Se volvió más sobre protector conmigo. Amenazaba a todo aquel que se me acercaba. Pero, ahí no acabó el sadismo de mi hermano.
-Yo pasé el siguiente año lleno de peleas, discusiones, llantos. Mi relación con ellos fue deteriorándose poco a poco. Comencé a odiarlos por sus decisiones. Óscar y su familia merecían pagar, pero no de esa manera...
Suspira levemente.
-Una noche Daryl y Megan hicieron una fiesta en la mansión. Creo, que yo tenia 17 años en esa ocasión. Conocí a un amigo de mi hermano. Era alto, cabello oscuro, tez blanca y me llevaba como 3 o 4 años. Su nombre era Aaron, la amistad que tenía con Daryl era... distinta a las demás. Eran muy unidos. Se conocieron en Nueva Jersey y creo que Aarón ayudó a Daryl a hacer crecer la empresa. Bailamos... bebimos... Nos divertíamos. Cuando nos cansamos fuimos a la sala, conversamos en mi habitación y sin darme cuenta me quede dormida a su lado. Poco después una voz familiar me sacó del sueño. Mi hermano gritaba y hablaba algo con él a la vez que sentía que lo jalaba obligándolo a salir de la cama.
-Desperté. Estaba aún oscuro y el reloj marcaba casi las 4:00am. Aron se levanto de la cama sin rechistar. Pensé que algo había sucedido pero me miré, y mi ropa seguía tal cual como me quede. Y el estaba igual. No entendía porque Daryl se había enojado. Es decir, no estábamos haciendo algo malo. Me enoje con mi hermano cuando lo vi obligando a Aarón a salir de la habitación pero este no parecía enojado, más bien... me guiñó el ojo con una sonrisa cómplice y se fue tranquilamente... Daryl comenzó a regañarme, decía que era mayor que yo y todas esas cosas.
