Querido Angel [Notas]

433 50 81
                                    

"Querido angel
¿Te has visto al espejo mientras sonríes? Por el amor al cielo, que vista tan perfecta. Si no lo has hecho... por favor no lo hagas. Si te enamoras de ti mismo, nunca podré competir contra tal belleza.
No sé que estoy diciendo, solo traté de acotar a palabras la hermosura que me parece que es tu sonrisa sincera y, de solo recordar lo bella que es, me deja de funcionar el cerebro. Discúlpame.

_Tú distraído admirador."

Como es su costumbre, el chico estudia con cuidado las palabras que acaba de leer. Sus marrones ojos delínean la calígrafia que forma las palabras en ese trozo de papel. La novia de uno de sus primos, comparando el tipo de letra, había descubierto hacía unas semanas que Travis y Connor Stoll recibían veinte dolares al mes por crear las notas por orden de un contacto que se negaron a delatar, aludiendo a que su paga eran siete para hacer los mensajes, otros cinco para entregarlos y los últimos para asegurar su silencio, y el dúo de bromistas no traicionaba a sus clientes. Ahí di Angelo y sus amigos se quedaron sin fuentes de información para descubrir al misterioso admirador del azabache.

Nico deja caer un suspiro pesado, antes de agitar la cabeza. Si bien la curiosidad le cárcome por dentro, no dejará que ésta se apodere de su día. Dobla con cuidado la hoja y preparándola para dejarla reposar dentro de una libreta que tenía sin utilizar hasta la aparición de su "admirador". Desde que ese chico —se alude a sí mismo con pronombres masculinos, así que di Angelo asume que se trata de un hombre— llegó a su vida, el azabache a guardado entre esas páginas abandonadas, las notas regaladas por el desconocido.

¿De nuevo una nota? — Uno de sus compañeros de clase se sienta a su lado, sosteniendo su cabeza con la palma, mientras que su codo se apoya en la mesa.

El azabache desvía la mirada hacía otro lado, no queriendo mirar a Will a los ojos.

Si...

El chico hace una mueca poco disimulada ante la respuesta corta y se la arrebata de las manos, para descubrir más al respecto de la reacción de di Angelo por su cuenta. Su ceño se frunce ante la imagen de la letra descuidada, incluso debe concentrarse de más para poder leer algunas partes.

Realmente le faltan un par de clases de calígrafia ¿no crees?

Nico abre la boca, con una leve chispa de ferocidad en el fondo de sus ojos.

Le paga a otros porque escriban las notas. No es la letra del anónimo.

El rubio se sorprende por instantes al ver una actitud como esa viniendo del azabache. Un escalofrío le recorre la espalda, mientras el mismo se anima a hablarle con cierto tono de desafío.

¿Oh˜? ¿Y esa actitud de loba cuidando a sus crías? — dice con un sútil toque mofa, que busca esconder otras emociones que le recorren — ¿No me digas que el Señor Oscuro, Nico di Angelo, ha dejado que un chico entre a su corazón en base a mensajes melosos?

Las mejillas de Nico se calientan y tener la mirada de Will, con esos preciosos orbes azulados, sobre él no lo ayudaba para nada.

¿Q-que...? — Seguro el rubio ahora creería que era un blando desesperado por afecto. — No. Para nada. Solo...- admiro su tenacidad. Nunca entenderé porqué me sigue escribiendo, si alguien como yo no vale la pena. —  el azabache desvía la mirada.

#Writer'sGayChallenge (SOLANGELO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora