Pagar el precio [por una trampa] (Au!Anime: Danganronpa VI)

1.2K 50 234
                                    

Nico miró al frente. Justo delante de él estaba un chico de apariencia muy extravagante, por decir lo menos. Su cabello era de una mezcla bicolor de blanco y negro, y tenía los ojos heterocromáticos, de negro y rojo. Sus vestimentas eran algo opacas excepto por la gran bufanda púrpura que cubría su cuello. Sus manos se encontraban cubiertas por blancas vendas.

— ¿Y?

Nico desvio la mirada de él, con el rostro caliente, sus acciones no eran controladas, sino más bien automaticas.

— ¿Qué?

— ¡No ocultes lo que pasa en tu mente, mortal! Nos hemos jurado lealtad hace bastantes ciclos lunares. No puedes evadir a mi Ojo Que Todo Lo Ve ¿Cómo fue tu cita con el Curandero Solar? 

Di Angelo guardó silencio unos momentos. No sabía qué ocurría, pero su cuerpo y boca se movían sin preguntarle. Por entre sus labios escapó un suspiro enamorado y su rostro comenzó a calentarse. 

— Nosotros... — Se mordió la lengua por unos segundos, mientras agarraba coraje. — ¡Nos besamos, con fuegos artificiales y todo! Fue como una película. 

Cuatro pequeños hamsters escaparon de la bufanda del chico excéntrico y Nico no pudo evitar sentir que las criaturas le miraban con una especie de ¿podía llamarlo orgullo?

— ¡Eso es un gran progreso de tu parte, Mensajero Infernal! ¡Yo, Gundham Tanaka, Señor Supremo del Hielo Gélido, estoy genuinamente impresionado por tu crecimiento! Regocíjate, mi aliado.

Nico tuvo que concentrarse un poco para estar seguro de entender todo el despilfarro de palabras que el chico frente a él estaba soltando.
¿De qué hablaban? El tal Gundham hablaba a di Angelo como si fueran grandes amigos, pero él estaba seguro de que jamás le había visto antes. Y sumado a eso, Nico ni siquiera había dado su primer beso aún, así que no podían hablar de un hecho real.

Eso pensaba, justo cuando de un fogonazo una imagen llegó a él. Estaba en un parque en medio de una noche estrellada. Fuegos artificiales estallaban alrededor y besándole, con la dulzura e inexperiencia del primer beso, se encontraba Will Solace, el apuesto Médico Definitivo, con el que compartía habitación en el Coliseo Mortal.

Y en ese punto, lo onírico abandonó su ser y abrió los ojos, encontrándose con la realidad de su mundo.

Estaba acostado en la cama, del Hotel Ogigia de la Desesperación, que le correspondía al rubio, que es donde había pasado las últimas noches

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Estaba acostado en la cama, del Hotel Ogigia de la Desesperación, que le correspondía al rubio, que es donde había pasado las últimas noches.  Will estaba de pie a su lado, ya levantado, y le remecía los hombros con la suficiente intensidad como para que abriera los ojos. 

— Arriba, Bello Durmiente. Somineko abrirá un nuevo piso. Así que hay que ir a desayunar, para luego explorar.

Nico tuvo que parpadear seguido intentando desadormecerse. Su sueño se había sentido demasiado real, pero... ¿Cómo eso podía ser posible? Estaba seguro de que si conociera a alguien tan estrafalario, como ese tal Gundham Tanaka o si hubiera besado a Will, lo recordaría.  

#Writer'sGayChallenge (SOLANGELO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora