Las gotas de agua caían con intensidad mientras Nico corría por las vacías calles de la ciudad que le había visto nacer, crecer, sufrir, llorar, caer en las horrendas y afrodisíacas garras del amor. Y es por esta última razón que sus piernas se movían con intensidad mientras intentaba llegar.
Deseaba que aquel mensaje fuera falso. Deseaba que todo fuera una farsa y que al llegar todo estuviera bien. Pero la vida no era un cuento de hadas y eso Nico lo sabía con claridad, por ello unos rebeldes hilos de agua caían despiadadamente de sus ojos haciéndole difícil el correr pues le nublaban la vista. Nico quería creer en Will. Confiaba en chico de rostro estrellado que enloquecía sus sentidos. Pero esa llamada... había parado por instantes su latente corazón.
Una voz, tan jodidamente melodiosa que le había erizado cada cabello de su cuerpo, le habló a través del auricular para contarle algo simplemente trágico.
Su novio, Will Solace, la luz de sus días oscuros le estaba engañando. Acompañado de alguien más, el rubio se encontraba en aquella plaza en que una vez a Nico le había dado su primer y más mágico beso, pero ahora -gracias a la posible traición- ese recuerdo y cada uno de los demás que habían compartido se estaban tiñendo de una tinta oscura que destruiría toda alegría vivida con el rubio.
"Mira, pedazo de mierda" habían sido las palabras de la chica en el auricular "¿No te dije que sería mio? Una simple petición y cayó a mis pies. Te advertí que eras de usar y tirar. Ven a la plaza del centro si quieres comprobarlo".
Y por ello corría empapado por las furiosas gotas de lluvia que caían cada vez con más furor, aun cuando ya casi no podía respirar, pues si se hubiera detenido a esperar por la locomoción le habría superado la ansiedad.
_______
No había paz en aquel lugar, sólo gotas de lluvia furiosas cayendo desde la inmensidad del cielo. Y ahí cual película romántica barata, una pareja se daba un fogoso beso que cualquiera juraría podía destruir a cenizas el frío de esa tarde. La cabellera rubia de él brillaba como el sol y la larga y húmeda melena de ella caía sobre sus hombros de un modo tan magistral que cualquiera creería que era una película.
Pues sí. Para Nico también parecía una corrida cinematográfica. Pero una de esas corta venas que vez con tu amiga cuando ella corta con su novio y necesitan una buena serie de putear el amor. Para sus ojos el mundo paro ante la imagen de su novio besando apasionadamente, como si se le fuera la vida, a Drew Tanaka; la chica que llevaba haciendo que viviera un maldito infierno hasta el instante en que se encontraban. Como una explosión, las lágrimas estallaron de sus ojos y volvió a correr, pero esta vez huyendo. Huyendo del dolor. Huyendo de esa cuchilla llamada amor que el chico de ojos color cielo había clavado en su pecho.
Las imágenes de los hermosos momentos que había pasado con él. Su primer beso. Cuando se declaró. La primera vez que se tomaron de la mano como algo más que amigos. Cuando Hazel le dio el visto bueno. Todos esos momentos felices ardiendo. Ardiendo hasta solo quedar el carbón de las emociones reconfortantes y mágicas que un día fueron.
Pero ahora lo había perdido todo.
Su primo, Jason y su novia, Piper estaban en otro estado pues se habían ido a estudiar lejos. Y lo mismo con su otro primo, Percy y la novia de él. Hazel había ido a Canada con Frank, su novio, a seguir su vida en el país vecino. No planeaba volver a vivir con su padre ni muerto. Y su casa vacía no le hacía ilusión. Pero sus planes de invitar a Will a vivir con él - los cuales estaba planeando realizar justo cuando recibió aquella llamada destructora- , o al menos pasar una temporada para no sentirse solo por completo se habían ido a la mierda pues ese desgraciado a su vivienda no volvía a entrar jamás.
Al encerrarse entre las cuatro paredes de su habitación, empapado, apenas respirando de llanto y temblando de rabia, dolor y frío, supo que es lo que venía. No más besos de su Wil. No más caricias de su Will. No más cuídate de su Will. No más alegría de su Will.
No más... "su" Wil.Se había prometido a sí mismo intentar una vez más por la vida pero aquí estaba la respuesta del sanguinario destino.
No más razones de vivir, decidió.
Era precioso.
Su filo se veía tan claro y hermoso, con un mango personalizado, que casi le hizo suspirar.
Paso el dedo por el borde, apenas rozando y eso ya hizo sangrar su pulgar.
Una sonrisa demente cruzó sus labios y sin poder pensar claramente en un momento de felicidad...
Alzó el cuchillo, mientras se preparaba para la puñalada que daría punto final a su miserable vida y entonces-...
- ¡CORTEEEEEEN! - Leo Valdez habló a través de su megáfono de "director" - ¡Genial, Nico! ¡Actuación genial, como siempre!
"¿Quién dejó a las Moiras elegir?" La telenovela más popular entre los campamentos y el Olimpo era un culebrón grabado y transmitido cada semana los lunes y miércoles, a las 8 de la tarde protagonizada por campistas comunes de ambos campamentos y una que otra aparición esporádica de Dioses.
Leo, el director y guionista, planeaba mantener el furor de su historia con artimañas llamadas "meterse con las parejas favoritas". Y como Solangelo estaba siempre en el primer puesto entonces a esos dos siempre les tocaban las peores escenas.- ¡Percy, buen trabajo con la lluvia! Se veía realista. - Leo le sonrió a todo su equipo de producción con orgullo - ¡Bueno, chicos, vamos a almorzar!
¿Fin?
Como tip extra dejó la aclaración: en la telenovela no era Will quien besaba a Drew. Todo era una trampa de ella :v pero bueh.
y esop
996 palabras
ESTÁS LEYENDO
#Writer'sGayChallenge (SOLANGELO)
Aléatoire30 días de retos con el precioso ship que nos dio el tío Rick :3 Will Solace×Nico Di Angelo ----- Actualizó cada 10 días con un OS nuevo. Títulos genéricos xD La lista de días está en la primera entrada. Está historia fue hecha con toda mi devoción...