#Writer'sGayChallenge (SOLANGELO)

¡Por la ciencia! [SPOP I]

Me empecé She-ra por sus lesbianas y me obsesioné con un ship hetero. Soy una decepción.

Esto está basado en el ship Entrapdak, de la misma serie y, como siempre que hago referencias de algún producto previo, intentaré que sea lo más entendible posible, habiendo visto la serie previamente como sin haberla visto. De todos modos, cualquier pregunta, estaré atenta a los comentarios.

Pd: Sé que a más de uno esto le va a sonar demasiado a un Nico OoC (Out of Character), pero necesito que alejen sus mentes de Emo-Boy y se concentren en el Nico Before Bianca y se darán cuenta que esto es bastante correcto en cuanto a concepción de personaje.

Sus párpados están cerrados, mientras intenta conciliar el sueño. La oscuridad le onda tanto en mente como en cuerpo, y esto es enfermizamente desagradable. No debe ser así, se recuerda. Necesita la luz de Octavio Primero ¿¡Por qué no está en las garras de su maestro?! La respuesta es evidente; está solo. Es un clon defectuoso y lleno de fallas, perdido en un mundo al que no pertenece, pero que debe conquistar para demostrar que si merece ese sitio al lado de su hermano mayor.
Lo que no es perfecto en todo él le enferma. Se abraza a si mismo, pero no es reconfortante ya que el calor de sus propias manos le da asco.

Abre los ojos. Aun sin poder concentrarse del todo en su alrededor, solo sabe una cosa. Debe volver con Octavio, debe terminar el jodido portal de una vez por todas. Cecil, el pequeño diablillo que le sigue a todos lados, revolotea a sus espaldas, mientras sus pasos resuenan claros por sus instalaciones. Tiene el ceño fruncido y los labios apretados, avanzando por fríos pasillos hasta su santuario, el laboratorio donde prepara su máquina.

Alista los preparativos para poner a funcionar el objeto y traga saliva por un instante, intentando creer que esta vez no explotará. Que esta ocasión todo saldrá bien y podrá generar la energía que necesita. Presiona los botones que activarían el mecanismo y espera con un deje de ansiedad.

Es inútil, la electricidad no aguanta el complicado sistema y se dispersa. Debe apretar los puños, intentando contener sus ganas de soltar alaridos. Necesita una pausa, no está de humor para recordarse que es un fracasado, por lo que sus pasos se alejan del laboratorio. Y es entonces que alguien se mueve por entre las sombras.

- No tienes que rendirte al primer intento. - El chico se mueve, arremolinando oscuridad a sus pies, que le sirve como un deslizador - Si eso fuera suficiente para derrotar a un investigador, tú no estarías aquí, Bianca. Yo no sería quién soy si la primera explosión me hubiera frenado... ¡O cualquiera de las primeras cincuenta! - El robot araña sigue a su dueño haciendo pequeños sonidos que el príncipe de Dryll puede identificar como su lenguaje.