Purgatorio moral [renacimiento]

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(Soy una bruta culia, que publicó ayer por accidente. Si les llegó la notificación perdón por las molestias)

[Recomiendo escuchar la canción luego de leer el OS o antes, no sé. Pero escucharla xd Quiero ver si alguien se da cuenta del robo casi textual XDDDD. Ahora si, pongámonos serios, que esta mierda empieza bélica]


No sabría como describir el ambiente a su alrededor. Tal vez podría ser un espacio del color de la nieve envuelto en humo negro, pero a la vez le parecía un fondo del color del petróleo envuelto en la bruma más blanca. No estaba seguro.

Sus sentidos estaban adormilados y le pesaban los ojos, a penas pudiendo enfocar su visión.

¿Dónde estaba? ¿Qué era ese lugar? Ambas parecían buenas preguntas, pero había una aún más potente que le oprimía el pecho llenandole de cierta incomodidad que aceleraba su respiración.

¿Quién era él?

Intentó, inútilmente, rescatar de su mente algún mínimo fragmento de su propia identidad, pero la propia estaba oculta bajo kilos y kilos de angustiosa incertidumbre.

- ¿Estás consciente? - una figura divina se situó frente a su ser - eso es bueno - Lucía como una fémina. La mujer estaba cubierta con un largo vestido de bruma que bailaba entre el negro y blanco justo como aquel lugar, demostrándole al joven que ella era parte de aquel limbo que le apresaba. Se miraron a los ojos y el hombre pudo ver en las llamas de su mirada la respuesta a la interrogante que era la identidad de la hembra en instantes.

Como poseído dejó que el nombre de ella saliera recelosamente de sus labios secos.

- Némesis. - La diosa de la venganza estaba de pie frente a él.

Al sentirse reconocida, la deidad asintió. Acarició con cierta dulzura el rostro del joven y en ese tacto las cadenas que ataban sus recuerdos fueron eliminadas por fin.

Tras un fogonazo intenso, pronto sus recuerdos volvieron a ser de su propiedad llenando sus sentidos y obligándole a soltar un alarido.

Pudo ver la sangre de Jason cayendo de la cama del rubio y llenando de un olor nauseabundo a descomposición, el lugar donde había hallado muerto a su primo.

Ni

Escuchó los gritos de pánico y dolor de Leo, quien había sido cremado vivo en aquel horno sellado que, por mucho que intentó, no logró abrir.

Co

Vio de nuevo el cuerpo de Piper desmembrado y cosido pieza a pieza hasta crear una muñeca ensangrentada y sin vida que le quitaría el apetito por siempre.

Di

Vino a su mente la figura desnutrida de Frank, cuando abrió aquella habitación en la que el pobre chico había sido encerrado hasta que murió de hambre y sed sin escapatoria. Revivió las mil pesadillas que tuvo con sus labios secos y trizados o con la sangre que se juntó en sus uñas por haber arañado las paredes en sus inútiles intentos de escapar.

An

Nunca oyó a Annabeth suplicar por nada. Luego de lo que ocurrió desearía nunca haberla oído haciéndolo, porque -aun cuando la rubia rogó por su vida- ese monstruo aún así le rebano la garganta.

Ge

El sonido del cuerpo de Percy siendo engullido por las olas del mar era algo que no querría repetir jamás. Lo peor fue verlo caer de ese acantilado sin poder ir a socorrerlo.

#Writer'sGayChallenge (SOLANGELO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora