Una escuela donde ser perfecto es lo más importante y las cosas fuera de lo común son raras...
Todos quedaron descolocados cuando el chico entró por las puertas de esa secundaria con una falda, una falda que debería ser usada por una chica. No por u...
Lo primero que Matias sintio cuando desperto fue un fuerte dolor de estómago y una sensación de náuseas que lo hizo correr al baño para vomitar. Una linda forma de empezar el día.
El vino no era su bebida favorita justamente por esa razón, solía provocarle muchas ganas de vomitar al día siguiente. Así que trataba de evitarlo lo más posible, pero en la noche anterior parecía ser la única escapatoria a ese amargo momento.
-Eso pasa cuando tomas más de la cuenta-Miro hacia la puerta donde Josh estaba parado con una sonrisa burlesca.
-Callate-Respondio molesto haciendo reír al pelirrojo.
-Te traeré agua.-dijo antes de irse.
Matias continuó vomitando por unos minutos más hasta que Josh volvió con unas pastillas para el mal estar de su novio. Le entrego el vaso y pastilla que el pelinegro acepto con gusto.
-Que haces aquí? Pensé que Marcus iba a abandonar tu cuerpo en un baldío-Bromeo.
-Lo convencí de hablar, hasta hace una hora estábamos hablando. El ya fue a dormir, quedamos bien pero aún sigue un poco molesto-le contó mientras prendía la ducha con agua tibia.
-Seguro sigue molesto conmigo-Matias le devolvió el vaso.
-Un poco, pero le dije que yo te obligue a no decirle. Lo que no es mentira, te pedí que no lo hicieras.-respondio.
Josh sin previo aviso comenzó a desvestir a Matias que estaba confundido pero pensó que tal vez el pelirrojo quería ponerse cariñoso, o al menos pensó esto hasta que lo metió en la ducha y abrio la llave, mojando al pelinegro.
-Lo siento cariño, hueles a alcohol y vomito.
Matias solo le saco el dedo del medio haciendo un gesto obsceno.
-Que grosero-Se río el pelirrojo-Bañate, te haré el desayuno. Como buen novio que soy.
Josh se fue dejando al pelinegro en la ducha. Aunque quería hacerse el ofendido estaba disfrutando del agua muy agradable. Termino de bañarse, se paso al lavabo para afeitarse y cepillarse los dientes.
Mientras lo hacia recordó lo que el director le había dicho el día anterior, no le había dicho al equipo de esa conversación que el hombre quería tener. Así que cuando terminó con su rostro fue a su cuarto para buscar su teléfono para avisar en el grupo de la reunión para que lleguen temprano.
-Su desayuno majestad-Josh entro con una bandeja en sus manos.-Ja! Pareces un bobtail mojado-se burló. Matias lo miro mal-Ten tu desayuno y yo voy a buscar el secador.
Matias se sentó en el suelo junto a su cama aún con la toalla al rededor de su cintura y con la bandeja en sus pierna. Josh se sentó en la cama dejando al pelinegro entre sus piernas para poder alcanzar su cabello, empezo a secar su cabello mientras el menor comia su desayuno tranquilo.
-Voy a extrañar esto cuando te vayas-comento el pelinegro.
-Puedes ir a visitarme o ire yo cuando tenga vacaciones y te secare el cabello cuantas veces quieras-le respondo su novio.
-No va a ser lo mismo, prácticamente solo nos separamos cuando estoy en la escuela. Como voy a acostumbrarme a no tenerte cerca?
-Por eso te dije que esto no era buena idea. Va a doler separarnos, es la realidad.-Matias volteo a verlo para responder pero prefirió no decir nada.-Lo mejor será disfrutar de cada momentos juntos. Dame un beso y quita esa cara-le dio el beso pero continuo con mala cara.
-Voy a vestirme, no puedo llegar tarde al colegio.-se levanto y fue a su armario.
-Bueno, yo te llevaré. Marcus me dio sus llaves-Josh agarro la bandeja con la que llego a la habitación y salió nuevamente.
El comentario de Josh había molestado a Matias, pero no pensaba hacer mucho show al respecto, iba a esperar que se le pase por si solo.
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