Victoria "Shelby Marx" Vega

En casa de los suegros

- ¿Hola? - preguntó o saludó Elizabeth al ver entrar a su hija como alma que lleva el diablo, aunque sería mejor decir como la Jade que se peleaba con Beck.

- Jadelyn August West, ven para acá, esto no se queda así - entró gritando Tori - eh, hola, ahorita saludamos - explicó mientras subía las escaleras rumbo a la habitación de Jade, el portazo indicó que ahí había entrado - sabes que esa puerta no me va a detener Jade, abres o la tiro.
Los gritos de Tori aún se escuchaban y sabían que la chica era capaz de cumplir, no en vano los años de ejercicio.

- Jade - habló más tranquila Tori
- No me hables Vega - le contestó la gótica apartándose lo más posible de la puerta.
- Pues me vas a tener que escuchar
- ¿Que vas a decir? ¿Que es falso?
- Claro que voy a decir eso Jade

- Te lo dije, celos - habló Blake extendiendo su mano para recibir un billete de 5 dólares de su esposa.

- Vas a negar que le diste tu número a la veterinaria.
- Ok, eso no
- Ja, ves.
- Tiempo, no puedo negar eso, le tuve que dejar ambos - hizo enfasis en esa palabra - para que nos avisen cuando podamos ir por los perros, no es la primera vez que llevamos a Dog, la de Mal si pero eso no viene al caso.
- ¿Y eso de que te ha mandado mensajes? - preguntó Jade ya con un tono de voz más tranquilo.
- Promociones de la estética más que nada, la foto que mencionó que me envió era un cupón de descuento.
- Que le costaba decir "¿Aún tiene el cupón que le envié?" En lugar de "¿Tienes la foto que te mandé?"
- Estrañaba tus celos - dijo Tori abrazando a Jade por primera vez desde que llegaron.
- ¿En serio?
- No, la verdad no, no me gusta verte así.
La gótica aceptó el beso que le dió su novia, las manos de Tori acariciaban suavemente sus caderas levantando un poco la blusa que llevaba ese día, mientras las de ella estaban en el cuello de la latina.
- Tenemos de menos una hora antes de ir por los perros.
- Estamos en casa de tus padres.
- ¿Y?

- ¿Chicas? ¿Están vivas y descentes? Porqué les recuerdo que entraron sin saludar y sin lavarse las.manos.
- Y alguien dejo su cubrebocas aventado a media entrada - grito Blake desde el piso de abajo mientras su esposa tocaba la puerta.

- ¿Todo ese drama por un cupón?
- Que ya no está vigente por cierto - contestó entre bocados Tori al señor West.
- Tenía mucho que no te veíamos tan mmm Jade - dijo Elizabeth.
- De hecho, extrañaba dar portasos.
Después de lavarse las manos, recojer lo que habían dejado tirado y saludar, estaban los 4 comiendo.
Todo había empezado cuando dejaron a los perros en la estética para su baño, la Veterinaria que siempre atendía a Dog-Nut le preguntó a Tori si había recibido sus mensajes y si aún conservaba las fotos que le había mandado.
- Jade pensó que eran fotos ehm inapropiadas pero solo eran los cupones y.promociones.
- Aún así se merecía los gritos.
- ¿Por?
- Nadie coquetea con mi novia en mi cara y sale impune.

- ¿Sigues viva Tori? - fue el saludo de Cat en cuanto contestó la llamada.
- ¿Tanto gritamos?
- Digamos que su frase de " te grito, me gritas, fuerte, más fuerte" en su canción no era broma, juro que mamá en San Diego escuchó - contestó Trina, al parecer Car tenía el altavoz activo.
- Trabajas, no pasó nada, solo que al parecer debo buscar una veterinaria atendida por un chico, feo y que no sepa de tecnología.
- Me conformo con que des mi número y no el tuyo - habló Jade quien estaba atenta a lo que decía su novia al teléfono.

- Hey, otra vez yo, Gastón y Mal les dicen Hola - Tori se encontraba grabando de nuevo para Disney mientras caminaba a casa de los West mientras ambos perros la arrastraban, bueno más Dog-Nut quien volvía a ser Gastón al que le urgía alcanzar a Jade. Mal iba tranquila al lado de Tori, hasta parecía posar cada que su dueña la enfocaba.

De nuevo el programa había Sido un éxito, Tori seguía mezclando las versiones inglés/español y para sorpresa de los West algunas veces la gruñona de su hija le seguía.
- No sé que me sorprende más, el español o que cante canciones de Disney
- Las canciones, jamás pensé verla cantar algo más que Cruella de Vil, las de El Extraño Mundo de Jack o el tema de algún villano.
Elizabeth y Blake no dudaron en molestar a su hija.
-Mucho tiempo con Vega - se explicó Jade en tono neutral
- Ni Cat logró eso - ahora habló la Nona de la peliroja quien acababa de llegar - de hecho está enojada porque jamás logro que Jade cantata con ella el tema de la sirenita.
- Estábamos leyendo la letra - dijo Tori - no es de.mis favoritas.
- Que Cat no te escuché decir eso, es capaz de dejarte de hablar - le comento Jade - es su favorita, es desesperante.
- No mientras Jade, cuando eras niña disfrutabas ver la película con Cat, nos hicieron comprar hasta la versión de aniversario y otra en VHS, y ni siquiera sabías que era un VHS - explicó Elizabeth.
- Te burlas y te quedas soltera Vega
Con eso Tori solo hizo el ademán de cerrar sus labios y levantó las.manos en seña de rendición, no le agradaba mucho esa idea.

La cena ya había terminado y todo mundo estaba en sus respectivas camas, por los ronquidos que alcanzaban a escuchar Blake ya estaba en el 5to sueño, al igual que la señora Valentine, Dog y Mal estaban en sus respectivas casas en el jardín mientras Jade y Tori simplemente disfrutaban de una sesión de besos, igual que la que había interrumpido horas antes la señora West.

Las manos de Tori se deleitaban con los levemente marcados abdominales de su novia para de ahí subir a su segunda parte favorita de su novia, el sostén y la playera que usaría de pijama estaba en algún lado del piso o tal vez sobre la silla o el escritorio, ya buscarían las prendas en la.mañana.
Los suspiros de Jade le indicaron que iba por buen camino, mientras con sus labios recorría desde el cuello hasta el ombligo las manos lidiaban con el pantalón de la pijama.
- Eres torpe Vega - se burló Jade al ver que Tori en lugar de deshacer el nudo que mantenía el pantalón en su lugar lo había amarrado más.
Comentarios parecidos habían cortado el ambiente pues Tori se apenaba de inmediato, pero ahora no obtuvo ese efecto, al contrario, la envalentono, pues usó su boca para deshacer.el nudo y de paso llevarse el pantalón a los tobillos .
- ¿Decías? - retó Tori.
La latina volvió a besar a su novia, quien regresó solo a los suspiros y gemidos al sentir la.mano de la castaña sobre su ropa interior.

Jade que anteriormente solo estaba disfrutando ahora batallaba en quitar de.igual.manera el short que traía Tori.
- para ser "nulo" creo que te.gusta mucho mi trasero - le dijo la peladora al sentir ambas manos ahí, el agarre se intensificó cuando uno de sus dedos se hizo camino entre la única prenda que tenía Jade y encontró su destino - hey, sin ruido, estamos en casa de tus padres - dicho eso volvio a besar a su novia, mientras su mano más al sur atendía como debía al amor de su vida.

- Chicas, ya está el desayuno.
El grito de Elizabeth ocasionó que Tori se metiera más en la cama, prácticamente haciéndose bolita, bueno, tanto como estar abrazada de cucharita a Jade se lo permitía.
- Se enfria el café - volvió a gritar la señora West.
Con eso una pelinegra de mechas mandó a volar a su novia y le empezó a exigir que encontrará su ropa.

Todos, hasta la abuela de Cat estaban con su respectiva pijama de Disney viendo algo en la TV cuando las.chicas bajaron.
- Con dinero todo es posible, si el resto de los descubrimientos médicos tuvieran el apoyo monetario y humano que la vacuna hasta la cura del cáncer y el VIH encontrarían.
Lo.dicho por el señor West las sorprendió, al parecer ya había en ensayos posibles vacunas para la COVID lo que ponía cada vez más cerca el fin de la cuarentena que ya iba por su 6 o 7 mes.
- Pues que le metan velocidad, jamás pensé decirlo pero extraño ir a la cafetería.
- ¿A gritarle a las chicas que atendían a tu novia? - preguntó en broma Blake, aún recordaba a una pobre camarera que terminó con un pastel de chocolate embarrado en su uniforme solo por preguntarle a Tori si se le ofrecía algo la última vez que desayunaron fuera.
- Olvidenlo, no extraño las idas a la cafetería - dijo haciendo un puchero y ganándose un beso de Tori en la frente
Las risas no se hicieron esperar, contrario a épocas pasadas dónde una plática sobre los celos terminaba en discusión y gritos ahora podían ser.motivo de risa, de hecho Jade después de ese ataque se disculpó con la chica, pagó la cuenta dando una propina generosa y se había encargado de la.lavanderia.

La comunicación con Tori era genial y apesar de ser tan despistada solía marcar la distancia con cualquier chica, indicando de  inmediato que tenía novia o dejando en claro que Jade era la única en la que se fijaría.
Los celos y ataques que eran tan constantes con Beck ya no existían, igual que las.discuciones, las marcas que en algún momento adornaron sus brazos eran solo un recuerdo, ya no tenía que usar blusas o chamarras que cubrieran los moretones y rasguños, si quería una simple camiseta de tirantes era suficiente para vestir, las.pulseras y accesorios que de igual manera usaba ya tampoco eran necesarios.

Jade dirigió la mirada a la castaña que la tenía abrazada por los hombros mientras veían la tv desde el sofá de sus padres, la película era lo de menos, al menos para ella quien solo se acomodó para darle un beso en la mejilla.
- ¿Te gusta lo que ves?
- No estás tan del asco Vega