—¿Que Cedric te ha invitado a dónde?—Penny se levantó de su cama de un salto, mirándome con ojos desorbitados.
—A su casa... para Semana Santa.—respondí, notando ya como se me empezaban a colorear las mejillas.
Penny y Natasha soltaron el mismo chillido agudo y entusiasmado a la vez. No pasó ni una milésima de segundo antes de que mi visión pasara de nuestra habitación a solo el rostro de mis dos amigas, que me rodeaban con sus brazos y hablaban a la vez entusiasmadas.
Tras celebrar el nuevo comienzo del grupo con Fred, George y Angelina y luego pasar un poco más de mi tarde con Cedric, en cuanto pude me dirigí lo más rápido posible hacia el cuarto que compartía con las chicas para contarles lo de la invitación de Cedric a su casa por Semana Santa.
Mila abrió sus ojos marrones de la sorpresa mientras que Annika observaba con una ceja alzada como su novia y Penny se acercaban a mí chillando de la emoción y se ponían a dar vueltas a mi alrededor.
—¡No puedo creerlo!
—¡Quiere que conozcas a sus padres!
—¡Vas a ir a su casa!
—¡Todo esto va muy enserio!
—¡Durante una semana entera!
—Ya no sé si la cara de Lia de agobio es por vosotras o por la invitación de Cedric—intervino Mila, interrumpiendo las habladurías entusiasmadas de mis dos amigas.
—¿Cara de agobiada?—Natasha me estudio el rostro con el ceño fruncido—¿Por qué ibas a tener cara de agobiada?
—Son sus padres—respondí—. Y su casa.
—Creo que a esa conclusión ya habíamos llegado todas.—respondió Nat, cruzándose de brazos.
—Quiere que sus padres me conozcan—continué, para que pillase la razón de mi nerviosismo.
—Ya te dijo eso una vez, ¿verdad? Aquella vez en el bosque prohibido, que nos lo contaste.—intervino Penny, con su ceño rubio fruncido. Había cogido ya tanta confianza con las chicas que cosas como las que pasaron aquel día en el que Cedric y yo nos dijimos «te quiero» por primera vez fueron narradas y descritas al pie de la letra en cuanto tuve un poco de tiempo.
—Lo sé... pero no pensé que todo iba a suceder tan rápido.
—Te dijo eso por primera vez hace unas tres semanas, Lia. Creo que ha pasado bastante tiempo desde eso.
Suspiré. Tres semanas. Tres semanas que se me habían pasado volando y en el buen sentido. Parecía que fue ayer cuando Cedric y yo nos encontrábamos metidos en el bosque prohibido, entregándonos al otro bajo la lluvia y sin dejar de murmuradnos que nos queríamos. Mis mejillas se sonrojaron ligeramente ante aquel recuerdo.
—Es solo que no sé si estoy preparada.
—¿Preparada? Ni que fueses a dar un concierto.—bufó Nat.
—¿Y qué pasa si les caigo mal?
—No creo que debas preocuparte por eso, cariño—Natasha me apoyó los brazos en los hombros—. Quiero decir, los padres de Annika al principio me odiaron, pero eso fue porque no se esperaban que fuese una chica.
—No ayudas, Nat. —suspiré con agobio.
Ella me apretó los hombros para que no dejase de mirarla.
—Dahlia—me llamó, mirándome con seriedad—, si Cedric es un cacho de pan, es porque todo lo que ha aprendido es de sus padres, que son incluso más adorables que él. ¿Recuerdas, Mila, cuando en segundo curso sólo quería irme a vivir con Cedric porque quería muchísimo a sus padres?

ESTÁS LEYENDO
Bajo las estrellas {Cedric Diggory}
Fanfiction«El corazón me latió más deprisa cuando él se giró para que nuestros ojos se encontrasen una vez más, con aquella sonrisa dibujada en sus labios que me volvía tan loca que las piernas me empezaron a temblar. Y entonces extendió su brazo hacia mi, y...