Cómo siempre por la temporada de invierno no había buen clima en Alemania, así que el vuelo hizo una escala en Chicago teniendo que pasar la noche en un hotel pagada por la aerolínea.
Las azafatas nos apoyan con información del par de hoteles que son los autorizados que como es de esperarse son básicos, y no es que me moleste, pero necesito descansar así que decido alojarme en uno de los hoteles de la familia.
A escasos metros veo a una pareja discutiendo con una azafata, sé que no me incumbe, pero al ver la de angustia de la azafata camino hacia a ellos para intervenir y tratar de mediar la situación, hasta que de pronto la señora levanta la mano para golpear a la azafata.
Incrédulo acelero el paso, pero de pronto alguien detiene el trayecto del e impide que llegue a la mejilla de la azafata.
-¿Quién diablos te crees. Suéltame- vocifera a la chica, pero esta no la deja terminar de hablar encarándola.
-¿O qué?- le responde ella con voz desafiante. -Mire, vamos a ser claros, sí usted al igual que yo nuestro presupuesto no nos permite alojarnos en un hotel de mil estrellas, pues nos toca quedaremos en los que la aerolínea y de los que la señorita azafata nos proporcionó amablemente la información, así que deje de ser tan poco educada y discúlpese con la señorita para que todos nos vayamos en paz a descansar.
Hubo un silencio por parte de todos los que participábamos como espectadores.
Me encuentro a unos pasos de ellos y aunque no me ven directamente, yo puedo ver claramente todo el panorama.
Fijo la mirada en la cabeza de la chica ya que hay algo que me llama la atención y creo que lo he visto anteriormente, pero no logro recordar de dónde.
La pareja de la mujer se acerca a la chica tirando de su brazo forzándola para que quite el agarre al tiempo que trata de propinarle un golpe.
Al ver eso me acerco para intervenir y poner al tipo en su lugar ya que en primer lugar es una mujer a quien trata de hacer daño y en segundo es mucho más alto que ella y obviamente está en desventaja en cuanto a fuerza, pero para mí sorpresa la chica lo toma del brazo y lo lleva hasta la espalda de este haciéndolo que grite del dolor.
Todos estamos anonadados viendo la escena y de pronto ya recuerdo que me sonaba familiar, era el gorro de la chica, es el mismo que llevaba la chica con la que choqué en México y al acercarme para ver que ella está bien, girándose hacia mí sin soltar al tipo confirmo que es ella.
-¿Está todo bien?- pregunto.
Seré idiota, sí hay alguien que vio todo en primera fila fui yo, claro que ella está bien, aunque no puedo decir lo mismo del tipo que refleja el dolor en su cara.
-Suéltalo salvaje, que no ves que le estás haciendo daño- inquiere de nuevo la mujer.
-No más del que ustedes pretendían realizarles a estas señoritas- intervengo señalando a la azafata y a la chica.
-¡Listo!- dice la chica soltando al tipo.
Seguridad interviene y al parecer la pareja pretende levantar cargos a la chica por agresión guiando a todos hacia unas oficinas para aclarar lo sucedido.
Decido marcharme a mi hotel, hasta que escucho a la pareja insistir en lo de la demandada. Así que decido retornarme para dar mi testimonio. Viendo la escena que montaron no dudo en que la chica no pueda salir bien librada, así que decido intervenir y hablar con un superior.
Ya en la oficina escucho a la pareja que insiste e insiste en la dichosa demanda.
La chica expone una y otra vez los hechos, pero estos insisten en victimizarse.
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Toda una vida. (Terminada).
RomanceNoah es un empresario multimillonario. Alto, guapo, atractivo. Sin líos o compromisos. Todo cambia poniendo su mundo patas arriba con la noticia de un antiguo amor y el encuentro fugaz con una chica que ¿empeorara o tal vez mejorará las cosas?