Capítulo 27

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En unas semanas es el cumpleaños de Agnes y Alek se empeña en hacer una fiesta, según el necesitamos animarnos y como no tengo ganas de discutir, cedo. Él se encargará de todo y yo solo tendré que aparecer y poner mi mejor cara, será difícil pero lo intentaré.

Mi regalo de cumpleaños se adelanta. Regreso temprano de la oficina, dejo mis cosas en la entrada y escucho unas voces familiares que vienen del jardín, dos de ellas las reconozco, Alek y Agnes están de espaldas mirando el monitor de una lap top.

-"Mamá"- balbucea Anges.

-Aaaaaw corazón, tan bella mi nena ¿te has portado bien?- casi me da algo al escuchar la respuesta.

-Es Lucía, mi Lucía- pienso y digo en voz alta sin percatarme.

Alek se gira con Agnes dejando libre parte de la visión de la computadora y ahí está Lucía, mi preciosa Lucía, hermosa como siempre. 

Me sonríe.

-Hola, pensamos que llegarías más tarde- dice Alek sonriendo para que no lo reprenda.

-Sí, bueno, terminé antes. Voy a cambiarme- indico el camino con el dedo y avanzo.

-¡Noah! - gritan del otro lado y hace que mi corazón se acelere con el simple hecho de mencionar mi nombre girando para ver el monitor.

 -No fue culpa de Alek yo soy la responsable, no volverá a pasar, lo siento- se disculpa Lucía y no tiene por qué hacerlo. 

Estoy contento de que no se haya alejado por completo.

-No hay problema, pueden continuar con lo que estaban y también cuando lo deseen. Que estés bien Lucía.

-Gracias Noah, cuídate.

Subí a cambiarme y ni corazón estaba desbocado. Sentía calor en todo el cuerpo.

Lucía mi Lucía no nos abandonó, bueno tal vez a mí, pero no a Anges y le agradezco.

Ahora que lo pienso ¿desde cuándo pasa esto? ¿Alek le habrá dicho que estuve en México? Y si le dijo ¿por qué no he sabido nada de Lucía? ¿No le importo?

Espero impaciente a que terminen la videollamada caminando de un lado al otro hasta que culminan y voy a donde Alek.

-Ya sé ya sé, debí haberte avisado...- dice Alek en cuanto me ve.

-No no no eso está bien, de seguro Lucía sabe que estuve en México- inquiero nervioso -su hermana le ha de haber comentado ¿ha mencionado algo?- cuestiono con algo de emoción.

-¿Está bien? Vaya, pensé que te molestaría- él sabe que nunca sería así, no me molestaría solo me está haciendo sufrir por gusto.

-¡Alek!

-Jajaja hay hermano, no creo que lo sepa, lo habría mencionado y hasta ahora nunca ha dicho nada.

-Ok, gracias- respiro aliviado, no sabe que estuve en México, pero sí que veo su perfil y que le deje un "me gusta" en una de sus fotos. Que vergüenza.


La oficina es un caos al no lograr llegar a acuerdos con algunos de los socios, llevamos más de 2 horas de reunión sin avanzar en nada.

Alek insiste en mi celular por un par de ocasiones. No contesto, terminando la reunión le regresaré la llamada, pero insiste un par de veces más y eso me pone en alerta deteniendo la reunión.

Me retiro de la sala de juntas y regreso la llamada en el pasillo. No da ni un timbre e inmediatamente atiende.

-¡Noah!- contesta agitado -Estamos en el hospital.

Toda una vida. (Terminada).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora