Creí que el chistecito del supuesto compromiso en la fiesta del abuelo traería consecuencias con Lucía, y a pesar de que ese día casi me desintegraba con la mirada, para mí sorpresa han pasado meses y ni siquiera lo ha mencionado. Dudo que le haya agradado la idea o se lo está guardado para cobrármelo; creo es lo segundo.
Ni siquiera he tocado el tema del compromiso con Lucía, pero es algo que realmente quiero, me quiero casar con ella, solo que parece que lo olvidó o no le importa. En ocasiones quisiera mencionarlo, aunque sea solo para discutir, por lo menos así sabría su postura.
Un día antes del cumpleaños de Lucía estoy en la oficina algo abrumado de trabajo y recibo un mensaje de su parte que me alarma.
Hola guapo. ¿Estás ocupado? ¿Podrás ausentarte media hora de la oficina? - Lucía.
Decido llamarla.
-Hola preciosa ¿qué pasó? ¿Estás bien?
-Sí sí todo bien, no es nada grave
-¿Nada grave? Joder ¿qué ha pasado?
-No pasó nada Noah, tranquilo ¿puedes venir a la oficialía como en media hora? Aquí te explico, pero no te preocupes ¿vale?
-¿A la oficialía?
-Sí, ¿puedes?
-¿Segura todo está bien?
-Que sí Noah
-¿En una hora?- pregunto mientras reviso los pendientes, no me podré ausentar antes.
-Sí, perfecto y Noah trae tu identificación porfa.
-Ok, nos vemos.
Termino los pendientes y me dirijo a la oficialía que me indicó Lucía.
En el camino solo puedo pensar ¿y ahora en qué se metió Lucía? Mira que la conozco y me preparo mentalmente en caso de que haya que llamar a algún abogado.
Al llegar están ahí Alek, Jonas, Mariana y Gris las hermanas de Lucía a quienes saludo algo confundido.
-Hola ¿tienes tu identificación?- Lucía me aborda en cuanto llego.
-Sí, aquí está ¿Lucía qué... - no me deja terminar de hablar y ya está entregándole la identificación a una señorita.
-¿Ustedes saben qué pasa?- cuestiono a todos, pero es Lucía quien responde a mi espalda.
-¡Nos vamos a casar!
-¿Qué?- casi grito impresionado.
-¿No quieres?- pregunta Lucía haciéndome ojitos.
-Claro que sí, pero ¿ahora? ¿Así? ¿Aquí?
-Sí, sí y sí- responde Lucía emocionada a todo lo que acabo de cuestionar.
-Señorita González, señor Lehmann y sus testigos- nos acercamos todos a dónde nos indican -La jueza les llamará en un momento, por favor esperen aquí.
-Gracias- respondemos al unísono
-¿Te estás arrepintiendo Noah Lehmann?- cuestiona Lucía levantando una ceja al notar mi silencio. Estoy algo confundido, nervioso y emocionado. La barriga se siente extraña.
-Eso jamás preciosa, nunca, es solo que todo parece...
-¿Loco, precipitado? A mí me hubiera gustado casarme así, que un día de la nada Jonás me llamara y me dijera que nos vamos a casar, es que esto es tan romántico.
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Toda una vida. (Terminada).
RomanceNoah es un empresario multimillonario. Alto, guapo, atractivo. Sin líos o compromisos. Todo cambia poniendo su mundo patas arriba con la noticia de un antiguo amor y el encuentro fugaz con una chica que ¿empeorara o tal vez mejorará las cosas?