No sé bien qué pasa, pero Noah está en mi habitación, bueno, sí sé, está apoyándome con primeros auxilios en mi chipote.
Noah es un tipo sumamente guapo y sexy, algo paliducho, pero tiene unos hermosos ojos azules y se ve que debajo de esa ropa debe de haber un cuerpo de adonis.
Madres, notó que lo estoy viendo como adolescente hormonal, pero aunque quisiera apartar la vista no puedo, es sumamente atractivo, en serio que sí.
De pronto siento su respiración cerca de mí aumentando los latidos de mi corazón y en un segundo ya está en mi boca. Wow besa de maravilla. Su lengua casi me llega a la garganta, pero de una manera sensual encendiendo todo dando ligeros mordiscos en mi labio inferior.
Me toma en sus brazos y se deshace de toda mi ropa y no me importa que me vea, es raro pero me hace sentir segura, con él no me da vergüenza que me vea.
Que quité lo que se le antoje.
Subo su camisa solo para percatarme que estaba en lo correcto, tiene un abdomen de lavadero, unos músculos bien marcados, espalda ancha, piernas torneadas y siento el bulto debajo de mis piernas que al retirar su ropa interior tiene un pene bonito, bueno, he visto algunos en pornos y en vivo solo dos, con el de Noah tres, pero no es en nada parecido a los otros, es grande y me estoy temiendo que eso no quepa en mi, pero ya a estas alturas mi juicio ya se ha ido a quién sabe donde y solo quiero sentirlo.
Recorre mi cuerpo con sus grandes manos apretujando en varias partes. Sus labios toman mis bubis y se siente tan bien su lengua sobre mis pezones, lamiendo y dando ligeros mordiscos. La respiración se hace pesada sintiendo lo que se aproxima y me agrada y sobre todo, lo deseo.
Siento como entra en mi lentamente y no puedo evitar soltar un gemido por la invasión, me observa con cautela esperando a que de luz verde o roja, pero al removerse las sensación cambia por placer sintiéndome completamente plena y me dejo llevar.
Mi pulso se dispara y todo mi cuerpo es como si hubiera vuelto a la vida y no sé en qué momento, pero ahora soy yo quien está encima. Mis caderas tienen vida propia y las sensaciones son exquisitas sintiendo espasmos que salen desde mi vagina y se distribuyen por cada una de las terminaciones de mi cuerpo plantándose sobre los puntos erectos de mis pezones. Mis manos arañan su espalda buscando prolonga esta nueva sensación que recae en mi centro y en mi labio inferior adolorido ya que mis dientes lo lastimaron al morderlo de puro placer. Instantes después Noah suelta un gemido llevando su cabeza a mi pecho. Lo abrazo y él enreda sus brazos a mi regulando las respiraciones hasta quedarnos dormidos.
Duermo tan a gusto como hace meses no lo hacía, tanto así que es de esas veces en que sabes que ya has dormido demasiado y las consecuencias serán graves, pero por más que lo intentas no puedes despertar y sabes que ya valió todo.
Despierto asustada viendo inmediatamente el celular y es tarde, tardísimo. Lo sabía. Chingado.
El vuelo, las maletas. Me levanto mareándome un poco hasta que recuero que estoy desnuda, me cubro con la sábana y empiezo a recoger mis cosas hasta que Noah se acerca, toma mi cara y me pide que me tranquilice.
Está loco ¿ahora que haré?
Noah sigue repitiendo que me tranquilice y lo hago hasta que me comenta que viajáremos en su avión privado ¿Qué? Ok, esto de agente automotriz cada vez suena más falso que nada ¿será un mafioso?
Como sea, le hago caso y me relajo, lo que pasó anoche lo deseaba y no me arrepiento, bueno, sí hasta hace unos instantes que ya me veía pidiendo raid para llegar a Alemania.
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Toda una vida. (Terminada).
RomanceNoah es un empresario multimillonario. Alto, guapo, atractivo. Sin líos o compromisos. Todo cambia poniendo su mundo patas arriba con la noticia de un antiguo amor y el encuentro fugaz con una chica que ¿empeorara o tal vez mejorará las cosas?