Capítulo 56

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Mañana es mi cumpleaños y Alek me dio el mejor regalo trayendo a Agnes para que pasara el día conmigo. Me compró un pastel y junto con Winnie cenaran conmigo. Debí haber hecho algo muy muy bueno para merecer a este par.

Comemos, bebemos, platicamos, bailamos hasta que Agnes cae rendida y la llevo a recostar regresando encontrándome con un Alek y una Winnie secreteando, pero en cuanto me ven se quedan mudos. Pregunto de qué se trata y me esquivan con el momento de confesiones.

-Confieso que cuando me declaré abiertamente gay pensé que mi familia me rechazaría, pero no fue así, fue todo lo contrario, mi familia me dio todo su apoyo y me ayudó en todo el proceso- comienza Alek.

-Salud por eso- digo levantando nuestras copas.

-Confieso que me daba mucha vergüenza pedir ayuda cuando estaba tocando fondo, por suerte apareció un ángel de la guarda que me enseñó que valgo mucho- continua Winnie tomando mi mano.

-Así es amiga, te quiero mucho- respondo abrazándola.

-Tú turno- me dice Winnie al tiempo que seca unas lágrimas.

Tomo aire para decir las siguientes palabras, llevo todo este tiempo planeándolo todo este tiempo y no había encontrado el momento, creo ya llegó.

-Confieso que pasado mañana regresaré a México.

-¿Queeeeeé?- dicen al unísono 

-Lo sé y lo siento, pero creo que ya es hora, ya pasé bastante tiempo fuera de mi país y extraño a mi familia. Podrán visitarme cuando quieran, la casa de mis papás siempre estará abierta para ustedes, además seguiremos en contacto y respecto a mi trabajo en la cafetería todo está en orden Winnie por eso no tendrás que preocuparte.

-¿Y qué pasa con mi hermano y Agnes?- inquiere Alek. Esa pregunta dolió.

-Ellos estarán bien, espero poder hablar con Agnes de vez en cuando, no soy quién para pedirte esto Alek, pero me gustaría verla crecer, y respecto a Noah, puedes entregarle esta carta por favor- acerque una carta que había escrito y reescrito hace varios días. Espero haya escogido las palabras correctas.

-Creo que mi hermano aún siente algo por ti Lucía.

-Y lo lamento Alek, pero me tengo que ir y por ahora dejemos el tema por la paz ¿sí? sé que debí decirles hacer tiempo, pero no me atrevía, me duele ponerlos en esta posición, pero sé que habrían tratado de persuadirme para que no me fuera y esto hubiera sido más difícil.

-¿Así que esta es tu despedida?

-Sí Winnie y lo lamento, pero siempre siempre vas a contar conmigo.

-¿Y qué voy a hacer sin ti?- dice mi amiga conteniendo el llanto.

-Mil cosas Winnie, tienes el mundo a tus pies, no te límites por alguien ni siquiera por ti misma. Puedes seguir aprendiendo como defenderte, viajar, conocer nueva gente, hacer nuevos amigos e incluso volver a enamorarte, puedes hacer lo que quieras Winnie. Sí hay alguien en este planeta capaz de hacer lo que se proponga esa eres tú y lo digo porque doy fe de ello y estoy muy orgullosa de ti y agradecida por haber topado en tu camino.

Si pudiera describir a Winnie con una sola, sería perseverante. Todo lo que ha pasado y sobrellevado no ha sido fácil, sin embargo, ella sigue firme, al pie del cañón sin dejar de ser ese ser humano que podrás defraudar, pero ella nunca lo hará contigo.

La noche sigue entre tragos, risas y baile y a pesar de que Alek no alegó más estoy segura de que en algún punto de la noche abordará de nuevo el tema.

Toda una vida. (Terminada).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora