Capítulo 58.

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Luego de recorrer las calles, llegamos a un restaurante elegante de comida rusa.

-¿Ya saben que van a pedir? -Nos consultó el mesero el cual se encontraba vestido con la vestimenta típica de rusia.

-Sirvamos unos pelmeni y okroshka y para tomar una botella de vino blanco.

-Muy bien, enseguida les traigo sus bebidas.

Tras el mozo retirarse, quedamos solos.

-No sabía que existía este lugar. -Digo fascinada recorriendo con la vista el lugar.

-A no mucha gente le llama la atención la comida de mi país. -Comenta Dema- Me agrada que te haya gustado.

-Bien, ¿Ahora me dirás cual es la sorpresa que me tienes preparada? -pregunto llevándome un bocado a la boca.

-Tu si que no sabes esperar ¿no? -Pregunta divertido llevándose la mano a su bolsillo.

-Cuando se trata de sorpresas no. -Respondo riendo- Cuando repartieron la paciencia yo estaba distraída.

-Bien, toma. -Dice extendiendo su mano con una caja de terciopelo color azul.

Al tomarla, solo pude contener el aliento, ¿Mi abuela tendría razón? No lo creo, no puede ser lo que estoy pensando.

-Abrelo. -Insiste Dema juntando sus manos y apoyándolas bajo su barbilla.

Como si saliera de un trance, abrí la caja.

Una llave. Una llave es lo que contenía la caja.

-¿Qué...? ¿Qué significa esto? -pregunto sintiendo como el oxígeno vuelve a invadir mis pulmones.

-Significa, que quiero proponerte que te mudes conmigo. -Responde Dema acomodándose en su asiento y tomando mi mano entrelazándola con la mía.

-No sé que responder. -Suelto intentando acomodar las ideas- Por un lado me agrada la idea, pero por el otro no puedo dejar a mi abuela así como así, también está mi hermano menor, no puedo dejarle toda la responsabilidad...

-Tranquila. -Me frenó Dema- Si te hace sentir mejor, pensé en ello y ellos vendrían a vivir con nosotros.

Tras escuchar su propuesta, el manojo de nervios disminuyó.

-De acuerdo, pero antes de darte una respuesta, quisiera hablarlo con mi abuela.

-Tranquila, tomate tu tiempo y cuando estés lista volveremos a retomar esta charla.

-Gracias. -Digo poniendo en la mano que sostenía la mía, la caja que me había entregado.

-No, quiero que la conserves. -Respondió cerrando su mano sobre la mía una vez más.

Tras la propuesta de Dema, proseguimos charlando sobre nuestro día.

-Hoy me la pasé entre juntas directivas con los socios de mis cadenas hoteleras. Tuve que explicarles cuales iban a ser las nuevas medidas a partir de ahora.

-Por lo que me contó tu hermana, el tipo se involucró con la mafia calabresa.

-Si, La Ndragheta es una de las peores después de la "Cosa nostra". Su red delictiva se extiende por varías partes del mundo, entre ellos países como Argentina, Bélgica, Alemania. -Afirmó Dema- Levinsky se cree que Costa le hará incrementar sus ingresos, lo que no sabe es que está firmando su sentencia de muerte. Si no hacemos algo perjudicará a todos la que tenemos negocios con él, directa e indirectamente.

-El tipo no se quedará quieto. -Suelto sabiendo las consecuencias que estro atraería- Solo prometeme que tendrás cuidado.

-Quedate tranquila, yo estaré bien mientras tú estés bien y protegida. - Respondió en un intento de tranquilizarme- Dejando a un lado el tema de Costa y su mafia ¿Te quedas conmigo hoy?

-Mmmm no lo sé, tendría que pensarlo. -Respondo en broma- Claro, solo deja que aviso y nos vamos.

Tras llamar a mi abuela, Dema pagó la cuenta y nos pusimos en marcha hacia su residencia.

-Este fin de semana es la boda de mi hermano, ¿vendrás conmigo no?

-Claro, no me perdería por nada el ver a mi mujer vestida de dama de honor.

Al llegar, un grupo de escoltas nos recibió y tras dar el parte nos retiramos a descansar.

Como no había traído ropa, Dema me cedió un par de pantalones de dormir y una camiseta.

-Puedes cambiarte aquí, yo iré al baño. - Avisó mientras salía del vestidor.

-De acuerdo, gracias.

Una vez ya cambiada, salí a la espera de que el baño se desocupara. Mientras me encontraba esperando a que Dema saliera, tomé mi móvil y les mandé mensaje a las chicas.

*Angels:

Mariela: ¿Almorzamos las tres juntas mañana? tengo que contarles un montón de cosas.

Danielle: Por mí está bien, paso por ti.

Sonia: Cuenten conmigo. Mariela danos un adelanto, please!!!

Mariela: No, se aguantan hasta mañana.

Danielle: Aguafiestas ¿Cómo esperas que duerma con semejante intriga?

Mariela: Cuenta ovejas. Jajaja.

Danielle: JAJA,muy graciosa.

Sonia: una oveja, dos ovejas, tres ovejas, cuatro...

Danielle: Sonia no la apoyes o le diré a ese cliente nuevo que te ronda que tienes bubbies falsas.

Sonia: Perdón Mari, pero le haré caso a Danielle y tú no abrirás esa bocasa, y lo que dices es mentira.

Danielle: Si lo sé, pero el no.

Sonia: Eres realmente mala.

Danielle: pero así me adoras nena.

Mariela: ustedes dos, dejen de pelear ¿Y cómo es eso de que un cliente te frecuenta Sonia?

Sonia: Ahora te jodes, te aguantas como nosotras hasta mañana.

Mariela: ¡Ouch! Las veo mañana .

La puerta del baño se abrió a penas dejé el móvil en la mesa de noche.

-Mañana me reuniré con las chicas a almorzar. -Le aviso a Dema entrando al baño.

-De acuerdo, pero te llevas a los escoltas. - La voz de Dema resonó detrás de la puerta cerrada.

-De acuerdo. -Respondo sabiendo que si me niego él no entrará en razón.

Verdades  secretasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora