Capítulo 31.

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Luego de vestirme, volví al baño a aplicarme correrctor, ya que no había pasado una buena noche y las ojeras eran una clara señal de eso.
Una vez terminé, me observé para contemplar el trabajo realizado, quedando satisfecha de que no se notara la falta de sueño.

Mientras bajaba las escaleras, voces provenientede la cocina llegaron flotando.

-Buen día. -Saludo entrando y yendo derecho a la cafetera.

-Buen día hija. -Responde mi abuela mientras se sienta a tomar su desayuno.

-¿Y tú por aue estás vestido así? -Le pregunto desorientada a mi hermanito, quien se encuentra callado desayunando.

-Tengo escuela Ela, es Martes. -Responde serio haciendo que deba reprimir la risa.

-Creo que lo olvidaste. -Digo resignada mientras él me mira desorientado- Ve a acostarte que hoy no tienes clases.

Al decir esto, pareceque algo se activa en su memoria y agranda los ojos.

-Cierto, lo olvidé por completo, ya que hoy no tengo clases ¿Puedo qudarme en la cama y jugar video juegos? -Súplica con sus manitos juntas.

-Claro, pero solo un rato, después ayuda a la nona con los quehaceres.

-De acuerdo. -Dice volviendo a la planta de arriba rumbo a su cuarto.

-Tu hermano se muda hoy, lo comunicó mientras tú y el señor Lévedeb se encontraban afuera. -Suelta una vez que quedamos solas.

-Al fin se decidió.

Mi abuela estaba por replicar, cuando entró mi hermano mayor restregandose los ojos vestido para ir a trabajar.

-Asique al fin te decidiste ir a vivir a lo de Marisa.

-Si, hace unos días lo decidimos, ya que pronto nos casamos nos pareció bien hacerlo -Respondió sentándose a mi lado.

-Hoy vuelvo tarde nona.-Comunico logrando que mi hermano me de una mirada demasiado seria.

-Tranquila hija. -Responde mi abuela guñándome un ojo y sonriéndome.

-Ay abuela, no es lo que te estas imaginando. -Digo sintiendo como mis mejillas comienzan a tornarse coloradas- Ya se los dije entre él y yo no hay nada.

-¿Saldrás con Lévedeb? -Pregunta mi hermano mirándome fijamente.

-Es... que me invitó a cenar. -Respondo llevándome la taza de café a la boca.

-Y después dices que solo son amigos. -Masculla mientras niega con la cabeza.

-Es la verdad. -

《Aja ¿Y el beso de ayer que fue? 》Inquiere mi subconsciente refrescándome lo ocurrido la noche anterior durante la cena.

-Como sea, no te diré nada más, solo que tengas cuidado.

Una vez en el trabajo, proseguí a seguir corrigiendo la novela en la que estaba trabajando ayer, con cada capítulo que leía quería saber como continuaba. Ya a media mañana, frené para tomarme un respiro. Tomé mis cosas y mientras esperaba el ascensor prendí mi teléfono.

Una vez que encendió, las notificaciones de mensajes comenzaron a sonar, algunas  eran de las chicas, otras de mi compañía y uno de Dema.

Por lo que decidí mandarle un rápido mensaje con la dirección de la editorial a las chicas y por último abrí la conversación con Dema y me puse a contestarle.

DEMA:
"A las nueve paso por ti."

YO:
"De acuerdo."

Luego de responderle y con un café en las manos, volví a mi puesto intentando bloquear todo lo referente a Dema hasta que estuviera frente a mis confidentes.

-Díganme ¿Cómo es eso de que Dema les preguntó si sabían donde vivía?

-Si. -Responde Sonia- Llegó hecho una tromba preguntando por ti.

-Yo supuse que le habrías dicho que dejarías el burlesque.

-Le dije que dejaba de bailar, no que dejaba el burlesque definitivamente.

-Ahora entiendo por que llegó tan desesperado. -Reflexionó Danielle.

-Y dinos... ¿Qué era eso que tenías que contarnos?

Medité la pregunta un momento antes de responder.

-Ayer a la noche, se apareció Dema en casa y mi abuela no tuvo mejor idea que invitarlo a cenar. -Sueto sintiendo de pronto un nudo en mi estómago impidiendome seguir comiendo.

-¿Cómo que se apareció? -Pregunta Danielle asombrada.

-Si, me invitó a cenar hoy. -Digo y agacho la cabeza, pues aún falta lo más importante.

-Ay que tierno. -Suelta Sonia.

-Y no sólo eso, hay... hay algo más que tengo que contarles. -Suelto tomando valor para mirarlas y es que quiero ver sus caras cuando les cuente.

-¿Qué? ¿Qué es? -Pregunta Sonia expectante.

-Pues... estábamos cenando, cuando por una imprudencia de mi hermano salí de la casa y él detrás de mi. Estábamos hablando cuando de un momento a otro nos comenzamos a besar.

-¿Qué ustedes que? -Grita Sonia provocando que varios comensales giren sus cabezas hacia nosotras.

-Shhhh, nada, eso... que nos besamos.  -Vuelo a decir en voz baja.

-¿Todavía seguís creyendo que él no gusta de ti? Porque déjame decirte que nadie besa a una persona por amabilidad.

-Solo creo que lo hizo por pena.

-¿Pena dices? -Masculla sarcasticamete Danielle.

-Si, es que estuvimos hablando de temas personales. -Respondo sin entrar en detalles de nuestra conversación.

-¿Qué piensas hacer? -Pregunta Sonia luego de un rato .

-Lo mejor va a ser que queden las cosas cómo están. -Respondo dejando la parte de la cuenta que me corresponde y me levanto de la silla tomando mis cosas.

-Si tú lo dices. -Replica esta vez Danielle.

Luego de que la moza nos traiga el vueto, salimos al exterior para volver a mi puesto de trabajo.

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Hola gente bella, perdón por desaparecer, pero acá les traigo un nuevo capítulo. No se olviden de dejarme su 🌟 que no cuesta nada y a Mariela y a Dema los ayuda un montón para que otraspersonas tengan la oportunidad de conocerlos.
  
                 Bye, Eli❤

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