Capítulo 28

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Con la música apagada y con todo de nuevo en su lugar, los chicos regresan a los sofás, donde nuevamente deciden recordar los gloriosos años que vivieron juntos.

- Oye Dul, te importa prestarme un pijama, es que empiezo a tener frío…; le pregunta Annie a su amiga.

- ¡Sí claro! ¿Ustedes quieren? ¿Para qué bajar a casa de Annie si en la mía hay cuarto de invitados?; propone Dulce.

- ¡Yo sí! Aunque no sé cómo me sentarán tus modelitos; comenta Poncho entre carcajadas.

- ¡Qué menso eres! Recuerda que vivo con un hombre. Seguro Rodrigo no se los llevó todos a Europa. ¡Marchando un pijama de chica y dos de chico!; le responde Dulce.

- No, yo estoy bien así. Muchas gracias Dul; le dice Christopher, pues la idea de compartir ropa con Rodrigo no era de su agrado.

Tras unos minutos, sale Dulce cargada como Papá Noel. Al igual que éste, reparte regalos a sus niños: pijamas a Annie, Poncho y Chris (sí, se lo ha llevado a pesar de su negativa), y dos mantitas, una para cada sofá…

Ya con sus pijamas, vuelven de nuevo a sus lugares en los sofás. Rápidamente, Poncho y Annie se tapan con una de las mantas. Ucker y Dul son más reticentes, y deciden conversar con sus compañeros sin nada que los cubra. Pero el frío aprieta, y es Christopher quien decide desplegar la manta, aunque sólo se tapa él. Mientras, Dulce sigue en una lucha interna, aunque finalmente el frío le puede y decide acercarse poco a poco a su Chris para finalmente terminar bajo la misma manta. Una colonia de mariposas vive en sus estómagos, y éstas revolotean más y más fuerte cuando sus cuerpos se rozan por segundos.

1. To the moon, and backDonde viven las historias. Descúbrelo ahora