1. To the moon, and back

Capítulo 169

Un incómodo silencio se convierte en el protagonista de aquella sala durante unos segundos.

- Christopher y yo éramos novios pero lo hemos dejado, y digamos que...; se pronuncia Dulce.

- Y digamos que vamos a actuar como profesionales. No se preocupen, de verdad; adjunta Ucker.

- No sabía, lo siento... Si no muestran oposición, continuamos con el plan establecido; comenta una de las coreógrafas.

- Al fin y al cabo, llevamos toda la vida actuando; sonríe Christopher cínicamente.

- Son cuatro canciones las que componen este bloque. Tras ellas, en el concierto, le hablará Dulce al público. Ahora lo que queremos es que las escuchen, y que simplemente se dejen llevar por la música con su pareja. Imagínense que no hay nadie alrededor suyo, y hagan lo que les diga su corazón; propone Verónica.

Tras sus palabras, todas las miradas recayeron sobre nuestros protagonistas, pues nadie pudo evitar acordarse de Roberta y Diego en ese instante. A ellos dos tampoco les fue indiferente la propuesta de la coreógrafa, consiguiendo que miles de recuerdos llegaran a su mente para transformarse en esas mariposas que ya revoloteaban en sus estómagos.

- Créanse una pareja real, a través de las canciones nos contarán cómo avanza su historia. Empezamos por el principio: 'Nuestro amor'...; anuncia Adriana.

Sin más dilación, suenan los primeros acordes de este tema: «Es tan mágico cómo todo pasó, en nuestro amor, nuestro dulce amor... Es tan fácil que ya nada me sorprende, de nuestro amor, es increíble amor... Todo fue como en un sueño, en nuestro amor, todo va sucediendo». Como buenos actores, Dulce y Christopher muestras sus mejores sonrisas, aunque por dentro estuviesen derramando lágrimas por lo que habían perdido y tenían enfrente. «Y es así, así es, y no hay nada que hacerle. Y es así, así es, y es así como sucede, este amor. Es tan sencillo que no sé cómo explicar, nuestro amor, nuestro dulce amor...». Por primera vez en mucho tiempo, sus manos vuelven a unirse, mientras saltan celebrando su amor. «Y no sé cuánto tiempo dure el amor, pero hoy, no hay nada mejor...». Se escucha de fondo mientras Christopher, embelesado por la canción y cegado por sus sentimientos, agarra el rostro de Dulce para fundirse en un tierno beso que hace que sus compañeros dejen sus actuaciones para observar el espectáculo que tenían enfrente.