Capítulo 66

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Ante las directas e insistentes preguntas de Christopher, Dulce no pudo evitar darle la respuesta más sincera:

- ¿Quieres saber la verdad? Tendrás la verdad. Sí, la canción sí significa, lo significa todo. Significa que te echo de menos como una maldita imbécil, como nunca he echado de menos a nadie. Echo de menos cuando me despertabas con tus besos babosos mientras suplicaba mis cinco minutos de más. Echo de menos nuestras noches hablando sobre nada en particular, donde únicamente nos abrazábamos y esperábamos que el amanecer nos diese los buenos días. Echo de menos esas otras noches de amor mientras una y otra vez sonaba nuestra canción. Echo de menos estar lejos de ti para poder llamarte y discutir sobre la inmortalidad del cangrejo si eso significaba escuchar tu voz un segundo más. Echo de menos nuestras cenas románticas a base de pizza en una alfombra después de chamuscar tu intento de pollo al limón. Echo de menos nuestras tardes de selfies haciendo muecas estúpidas sólo para echarnos unas risas y disfrutar de los pequeños placeres de la vida. Echo de menos tu mano en el cine sobre la mía, fuese cual fuese la película, y tus abrazos cuando tiritaba de frío. Echo de menos viajar cual espía para evitar una maldita foto que nos pusiese en la portada de las revistas mexicanas como la pareja revelación del año. Echo de menos los "Sólo somos buenos amigos". Echo de menos los conciertos donde cualquier momento era bueno para rozarnos aunque fuera por un instante. Incluso echo de menos cumplir tus caprichos y jugar tardes enteras con la dichosa consola dejándote ganar para que el niño no se enfadase... ¿Pero sabes qué es lo que más echo de menos? Mirarte y sonreír como una boba porque confiaba en ti, porque estaba segura que nunca me ibas a fallar, porque estaba enamorada de ti...; solloza Dulce mientras los momentos salen de su boca como balas directas al corazón de Christopher.

1. To the moon, and backDonde viven las historias. Descúbrelo ahora