»Capítulo 24«

482 59 5
                                    

Veinte de abril de 2016.

—¿Cómo te sientes?

—Bie... —balbució Georgette mientras sonreía con debilidad y a medias.

—Matthew me lo prestó, así que... —al decir eso, Helena le extendió el celular a su amiga y finalmente la francesa agradeció con la cabeza.

Aún estaba trabajando con la movilidad de sus extremidades y se le dificultaba mucho alzarse de la camilla en ocasiones. Con cuidado y paciencia, Barton la esperó en el borde, con las manos enlazadas y viéndola con una suave mirada cariñosa.

—¿Cómo estás?

—Mucho mejor. ¿Dormiste bien?

Georgette asintió una vez y luego volvió a escribir lentamente en el celular de Matthew. Durante los últimos días desde que la morocha fue dada de alta, la vida se fue adaptando de una forma drástica y ahora todo el clan Barton vivía cerca del edificio de Helena.

El apartamento de la mencionada se fue rápidamente adaptando para la cercana llegada de Georgette de salir del hospital. Pronto la darían de alta y habían preparado varias cosas también para la francesa y la bebé.

El desarrollo de la recién nacida iba mejorando con el paso de los días. Durante las dos últimas semanas había triplicado su tamaño y Helena pedía y rezaba cada noche como creía necesario.

Matthew era también religioso, por lo tanto, en su propio apartamento, antes de irse a dormir, pedía por la salud de su mejor amiga y de la pequeña.

—Matthew.

—Está en la sala de maternidad —anunció Barton.

—Tu...fa...mi...

—¿Mi familia? —preguntó Helena para dejar que Georgette no se esforzara demasiado. La rubia asintió una sola vez—. Está bien. Lily te envía saludos y abrazos.

Georgette curveó una sonrisa apenas que se estiraba y después se escuchó la puerta de la habitación abrirse. Entró con cautela Matthew y Helena sonrió al verlo.

—Y hablando del rey de Roma.

—Vaya, me siento halagado al ser tema de conversación —bromeó el abogado, caminando con el bastón batiéndose por el suelo y luego Helena le extendió la mano hasta tocarle el antebrazo. Aquello lo guió aún más y entonces se colocó a un lado de la morocha mientras acomodaba sus gafas—. ¿Cómo te sientes, Georgette?

—Mu... —suspiró y tomó aire—. Bie, Mad...

—Es bueno también escucharte. Poco a poco, tu doctora le comentó a tu padre que pronto comenzarás la terapia de lenguaje —explicó en breve el hombre presente.

—¿Papá aquí? —preguntó después de varios segundos de silencio entre los tres presentes.

—Está afuera. Dice que pronto viene contigo.

Georgette asintió y después Helena le avisó la acción que había realizado su amiga.

—¿Puedo hablar contigo un momento? —preguntó Matt mientras le presionaba con suavidad la mano a Helena.

La morocha asintió, le hizo una señal a Georgette de que regresaría pronto y la francesa comprendió. Barton ayudó a Matthew a poder salir un momento de la habitación.

En cuanto estuvieron afuera, ambos se alejaron un momento y entonces aprovechó él para informarle la novedad que traía consigo.

—Me encontré con la doctora Phelps.

𝐒𝐚𝐯𝐞 𝐲𝐨𝐮 𝐟𝐫𝐨𝐦 𝐇𝐞𝐥𝐥 [𝐌𝐚𝐭𝐭 𝐌𝐮𝐫𝐝𝐨𝐜𝐤]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora