La Gorda Del GYM

La hora de la Verdad.

Observe a Martin dormir profundamente, luego de tomar hasta la última gota del té de manzanilla con miel que le había preparado, todo lo que recientemente estábamos viviendo nos cayó como valde de agua fría, y a pesar de todo lo que Martin me hizo pasar a tal punto que tildaran mi relación con él, cómo toxica , y puede que tengan razón, pero dejémonos de hipocresía, todos hemos sido tóxicos alguna vez, todos hemos dañado a alguien consciente o inconscientemente, y no estoy justificando lo que Martin me hizo, pero  ahora podía ver todo de otra forma,  la manipulación e influencia de su madre en su vida, ¡vaya mierda!, el miedo a enamorarse nuevamente, el dolor de ver a Yessica destruida, la culpabilidad que sentía por ello, todo eso era una carga muy pesada, y lo comprendía, a la vez no podía evitar sentir lastima. 

Mi celular se ilumino, era un mensaje de Erick, dándome la hora y lugar donde nos explicaría mejor como ha sido la investigación que ha estado realizando estos dos años,  "En casa de Yessica a las  5:00 pm"  se leia en mensaje  que Erick me acababa de enviar, ¿En casa de Yessica? — me pregunté  en un susurro— trate de imaginar el escenario  y la razón, pero no se en que estaba pensando Erick, asi que le mande otro  mensaje de vuelta  "¿Por qué en casa de Yessica?", pero no obtuve respuesta.

Deje mi celular de nuevo sobre la mesa de noche y volví  mi atención a Martín, mañana, esperen ¿Cuál mañana? Si ya es de madrugada, mejor dicho hoy nos esperaba un largo día, lleno de emociones  y verdades encontradas, asi que yo debía descansar también, me recosté junto a Martín, y me abrace a él.
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La mañana llego muy rápido, había dormido 2 horas a lo sumo,  me  levante y Martin aun dormia ¿seria la primera vez que por  fin no me da un susto de esos?, me deslicé sigilosamente  fuera de la cama, me dirigí a la cocina, hoy sería yo quien prepararía el desayuno, pero "ADVERTENCIA ALISSON  DUBON NO ES BUENA COCINERA", a mi con suerte no se me quemaba el agua, bueno, bueno, a veces, pero un sandwich de jamón con queso no estaba fuera de mi alcancé, y claro café, para comenzar bien el  día.

Yo debía ir a trabajar, ya saben uno de pobre no se puede dar el lujo de perder su trabajo, así que deje todo sobre el desayunador, no quería despertar a Martin, necesitaba descansar, tanto por lo que había pasado y también por qué venía de un turno de 24 horas en el hospital, tenía que reponer energía.

Así que tome un lápiz y un trozo de papel, para escribirle una notita a Martin, veamos nos vamos a poner cursis, "Buenos días mi amor, ¿Cómo amanece mi Hombre hermoso?" — Reí internamente, pero la verdad me daba un poco de vergüenza, no soy muy buena mostrando mi lado "tierno"— "acá te dejo un manjar de dioses, un sandwich de jamón con queso, luego te paso la receta, y café, me voy al trabajo, pasas por mi a las 3:00 pm, espero descanses mucho, Te amo" , y le dibuje un corazón algo chueco al final.

Deje la nota junto al desayuno que prepare y salí de casa de Martin directamente al trabajo, y si me bañé, y si tengo un o dos cambió de ropa en casa de Martin, ¿En qué momento paso? No me acuerdo, creo que el los compro para mí.
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El tiempo paso rápido en el trabajo, le pedí a mi jefe que me dejara salir temprano, y no se pudo negar, y como no, si a veces nos hace trabajar horas extras que "se le olvida pagarnos"

Martin ya estaba aparcado en la salida del edificio, me subí al auto, me coloque el cinturón.

— Listo, vamo... — no pude terminar la frase, por qué Martin me estampó un intenso beso en los labios.

— Me gusto la nota — dijo en cuanto se separó, y no pude evitar sentirme avergonzada.

— Ni te acostumbres, qué será la única vez — juguetee con mis dedos.

— Bueno entonces, la guardaré en mi caja fuerte, para no perderla — sonrió.

— Como quieras— me encogí de hombros, pero la sonrisa en mis labios lo decía todo— ahora vamos a casa de Yessica.