La Gorda Del GYM

INTERROGATORIO 2.0

Hacia unos minutos llegue a mi casa, le habia pedido a Martin que me trajera, tenia muchas cosas que pensar, porque mierda si le daba una oportunidad, asi sin mas, seria como fallarme a mi misma, debía pensarlo con cabeza fria, si en realidad estoy dispuesta a arriesgarme por él otra vez.

Y aunque parezca la mejor oportunidad de mi puta vida, por que es el hombre que cualquier chica desearía, tal vez otras estarían "brincando en una pata" pero yo estaba mas abrumada que nunca, por que mis malditas dudas no me dejaban pensar claramente ¿y si es solo un espejismo mas? ¿y si se vuelve a ir? ¿y si vuelve con ella? ¿Que seria de mi? ¿lo superaría nuevamente o esta vez si me hundiría? ¿soportaria una depresión mas? , no tenia el suficiente valor para rechazarlo, por que ¿A quién quiero engañar? Amo a ese maldito hombre.

Me tumbe en la cama, mirando al techo perdiendome en los pequeños detalles del cielo falso, ese hombre removia mi mundo, siempre supe que seria un problema, desde el primer segundo cuando llamo mi atención, pero nunca paso por mi cabeza que todo esto pasaria.

Me habia pedido que me quedara, pero me zafe con la escusa de "Si me amas dejame ir", el camino a casa fue silencioso, espero como siempre a que entrará, mirándome con esa mirada que me erizaba la piel.

Mi celular vibró, lo tome con desgano, era un mensaje de Erick, y he aqui otro problema, ¿porque no me podia enamorar de Erick y dejar de amar a Martin?, siempre era si, sufriendo por la persona equivocada, ¿era Martin la persona equivocada?.....

<< ¿Nos vemos hoy?>> le habia prometido salir hoy con él.

<< Siii :') >> ¿por que no? Era libre, ademas era solo un amigo..

<<Paso por ti a las 7:00 pm, sin falta>> una pequeña sonrisa se dibujo en mi rostro sin que pudiera evitarlo.

Deje mi celular de lado, necesitaba una ducha, mis amigas habian insistido en venir a mi casa, según ellas "Quieren saber como estoy, porque estan preocupadisimas por mi, que las he tenido con 'el Jesús en la boca' ", ¿quien se los cree?, a esas dos les encantaba "el chicle".

El timbre de la puerta sonó, baje rápidamente las escaleras, nadie mas estaba en casa, mis padres siempre pasan el fin de semana donde mis abuelos, y era costumbre mia quedarme sola, aveces la soledad también es bonita.

- Amiga - gritaron ambas al unísono, abalanzandose sobre mi.

- Tienes que contarnos todo sin omitir ningún detalle - dijo Aurora tan ansiosa como siempre.

- No hay mucho que contar - suspire pesadamente, encongiendome de hombros.

- No somos tontas Aliss, entre tu y Martín sucedió algo - Fernanda me miro con los ojos entrecerrados.

- Vamos a mi habitación.

Subí las escaleras, bajo las expectantes miradas de mis amigas, sabia que no se tragaban mi "No hay mucho que contar", ellas tenían un octavo sentido para detectar cuando se estaban perdiendo de algo o les ocultaba algo.

- A ver Aliss, ven aca - dijo Aurora, palmando el colchon de mi cama para que me sentara junto a ellas.

- ¿Me someterán a otro interrogatorio? - pregunté sentandome a su lado.

- Claro, si no es asi tu no nos sueltas nada .

- Aurora tiene razón, tu nunca nos cuentas nada Aliss, siempre usas la escusa "Mi vida es aburrida, no tengo nada que contar" - bueno a decir verdad esa era mi realidad hasta hace ¿Que? ¿9 meses?, pero ahora era diferente.

- Es que es verdad - menti insistentemente.

- No, esta vez no, Martin te llevo ayer, y estamos segura que pásate la noche con él.