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Me alejé para bajar mi vestido quedando en ropa interior, Jungwon también se deshizo de su pantalón...

Se sentó en el medio de la cama apoyando su espalda en el espaldar y tomó mi mano volviendo a qué me sentara en su regazo.

Lamí mis labios con la sensación de que fuese la primera vez... En si, es la primera vez en la que no estamos ebrios como para no recordarlo.

Mis manos comenzaron a sudar de los nervios y Jungwon se percató de eso asique simplemente me acostó en cuestión de segundos.

no estés nerviosa... — respondió volviendo a besar mis labios.

Tragué duro haciendo el esfuerzo para calmarme pero mis nervios aumentaron aún más por sus caricias en mi muslo al igual de los besos que dejaba en mi cuello que cada vez iba bajando más y más.

Un escalofrío recorrió mi cuerpo por completo por lo que pensé que la ventana estaba abierta... Pero solo eran los nervios.
Sus besos llegaron a cadera dónde lentamente bajo mi braga hasta sacarla y tirarla en el suelo...

Abrí con lentitud mis piernas sintiendo más de sus besos húmedos en mi entrepierna...
Justo cuando creí lo que iba a pasar, Jungwon volvió a subir dando besos bruscos llenos de lujuria empezando a introducir un dedo en mi intimidad.

Solté un gemido que ni yo esperaba por su acción y seguí besándo mientras disfrutaba del placer de sus movimientos y roces.

Jungwon introdujo otro dedo más acelerando la velocidad de sus movimientos provocando que mi cuerpo de estremeciera por completo.
Entre aquellos besos que no parecían terminar se escapaban de mis labios los jadeos llegando a cerrar mis piernas de lo mucho que temblaban.

Lamí mis labios después de que Jungwon dejara un último beso en mis labios he hice caso a todo lo que hacia.

Acosté mi cuerpo boca abajo, no sin antes sacarme el brasier. Sus manos se posaron en mis glúteos apretando éstos hasta que levanté mi cadera siguiendo sus indicaciones.

Abrí mis piernas con un poco de dificultad sintiendo como su pene de introducia con lentitud provocando fuertes punzadas en la zona.
Cerré mis ojos soltando quejidos oyendo lo que decía Jungwon.

— Jungwon duele...— Murmuré.

— Es normal... Seré cuidadoso... — contestó.

Mordí mi labio tratando de ignorar el molesto dolor hasta que Jungwon volvió a moverse haciendo presente las punzadas, siguió con los movimientos hasta que poco a poco fueron disminuyendo...

Relajé mi cuerpo empezando a disfrutar de las estocadas que Jungwon daba soltando otros gemidos un poco más altos.

Agradecía que su cama no rechinara ya que de ser así, sería incómodo...

Mi cuerpo seguía sudando y creería que Jungwon también, ahora sí rogaba que la ventana estuviera abierta por el calor que tenía... Mi boca y mis labios estaban un poco secos...

Sus movimientos fueron más profundas y bruscas que hacían mover mi cuerpo, acosté mi cabeza como podía entre las sábanas disfrutando y apreté a las sábanas totalmente excitada.

Podía oír que Jungwon también disfrutaba de esto...

No sé cuántos minutos pasaron pero mis piernas habían vuelto a temblar pasando que segundo después me venga al igual que Jungwon, su líquido se deslizó por mi entrepierna y caí rendida a la cama.

Peiné mi cabello con la mano estando agitada y cerré mis ojos lamiendo mis labios secos.

Me senté viendo a un Jungwon con las venas que resaltaban en su cuerpo, con su cabello húmedo y despeinado...

Tomé la manta tapándolo a el primero y luego a mi para ser la primera en abrazarlo...
Tenía miedo de que me dijera que me fuera pero todo lo contrario, él acarició mi cabello y con la otra mano me abrazó apesar del calor que teníamos.

𝐒𝐎𝐔𝐋𝐌𝐀𝐓𝐄   | yang jungwon & tn |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora