𝐒𝐎𝐔𝐋𝐌𝐀𝐓𝐄 | yang jungwon & tn |

045

Una vez en casa, decidí acomodar, limpiar absolutamente todo con la esperanza de que tal vez se quede.

Puede quedarse a comer o dormir.

Asique si Jungwon decidía comer, tenía que mostrarle mis excelentes habilidades de platillos que mamá suele hacer en casa.

Y como dije, dicho y hecho Jungwon llegó pero a eso de las 11 de la noche.

Sonó el timbre de casa y bajé de mi habitación a paso apresurado, al llegar a la puerta acomodé mi cabello un tanto nerviosa y abrí la puerta.

— Hey

— No sé si estás sean pero son de la chica que las recomendó. — contestó Jungwon estirando su mano con la bolsa.

Tomé la bolsa viendo la caja con lentitud, esa maldita pastilla si que salió caro.

— gracias... — respondí.

— Si eso...

Estaba a punto de cerrar la puerta pero Jungwon volvió a hablar.

— Estoy enfermo.

— ¿Enfermo? — Pregunte confundida.

— Si y tú también podrías estarlo.

Me hice a un lado para dejarlo pasar y cerré la puerta.

— ¿Es tos? ¿Fiebre? — pregunté sentandome en el sofá.

Pude notar a Jungwon con nervios ya que seguía rascando su nuca esperando tener el momento indicado para decirlo.

— Fui a un doctor porque bueno, tenía picazón.

Empezando a dudar de sus palabras y su extraña incomodidad en cada palabra que resonaba en la habitación.

— ¿Exactamente en dónde?

— Aquí. — señala su miembro.

— ¿Y como te diste cuenta? ¿Que te dijo el doctor?

— Es difícil complicarlo. — responde sonriendo mientras rasca su nuca nuevamente.

— Te mansturbaste.

— ¡No! — respondió de inmediato. — Bueno, si. Lo hice y comenzó a doler horriblemente.

Jungwon decía cada palabra con sentimiento, como si realmente la pasara mal o solo exageraba todo.

— realmente dolía. — suena convencido.

— Uhm.. ¿Qué te dijo el doctor? — pregunté.

— Tenemos Clamidia.

Dejé caer la bolsa en el suelo y simplemente pasé mis manos por mi rostro.

— ¿Cómo que tienes clamidia?

— porque me hice un estudio y salió que me infecté de eso asique es tu problema — respondió sincero.

— ¿Mi problema? Yo no he tenido enfermedades. — respondí sintiéndome atacada.

— El doctor me dijo que me contagiaron — contestó tirando su cuerpo en el espaldar del sofá.

— Fue una sola vez.

— En esta semana no tuve sexo con alguien más excepto tú.

— mientes.

— enserio.

— no te creo.

— hablo enserio.

Observé a Jungwon y me levanté tomando la bolsa.

— Ya me haré un análisis.

Fue lo único que dije antes de irme a la cocina, allí agarré la pastilla y serví un vaso de agua pensando en que le diría a mamá, ella seguramente me acompañaría y tendría que decirle que aún sigo con Jungwon después de la discusión.

Ella aún cree que seguimos juntos cuando ni siquiera somos algo.

Que pena.

Coloqué la pastilla en mi lengua y junte el agua en mi boca tragando con mucho esfuerzo.
Bajé la mirada a la mesada pensando en muchas cosas que tenía que hacer o que iban a pasar llegando al punto de frustrarme.

Cerré mis ojos sintiendo el cálido abrazo de Jungwon en mi cuerpo...

— ¿Te estresa?

— ¿Tú enfermedad? — pregunté.

Jungwon me dió la vuelta obligando a mirarlo.

— no es mi enfermedad, tú eres la apestada.

— me ofendes. — golpeé levemente su pecho mientras reía

Jungwon mostró su linda sonrisa y permaneció cerca a mi rostro.
Su mirada bajó directamente a mis labios reconociendo cada una de sus intenciones hasta oír la voz de mamá.
Jungwon se hizo a un lado y tomó la caja de la pastilla escondiendola en su bolsillo.

— ¡Llegué!

Lamí mis labios y caminé hacia el mueble sacando unas tazas.

— Oh Jungwon. No sabía que estabas aquí. — respondió la madre.

— Vine a visitar a Tn. — contestó metiendo las manos en el bolsillo.

— Ya que estás aquí, quédate a comer, prepararé una deliciosa sopa...

Miré a Jungwon con curiosidad... ¿Se quedará o se irá?

— Me quedaré. — contestó.

Oculte mi sonrisa y preparé la mesa ayudando a mamá con la comida mientras que Jungwon esperaba en la cocina sacándole conversación.

Por suerte, mamá no hizo ninguna pregunta sobre la relación que fingimos hasta que llegó el momento donde nos sentamos a comer.

— ¿Cómo va su relación? — preguntó.

— Eh bien.

— ¿Ya arreglaron la discusión? — preguntó sería.

— Hace tiempo. — reí junto a Jungwon.

— ¿Y se están cuidando...?

Pestañee varias veces impresionada he ignorando que Jungwon estuviera ahogándose con la bebida debido a la repentina pregunta.