𝐒𝐎𝐔𝐋𝐌𝐀𝐓𝐄 | yang jungwon & tn |

69

Miré a Jungwon y me senté en la cama con lentitud.

— tomate tu tiempo. — contestó Jungwon.

Había comenzado bien como para recordar lo que tenía en el presente.

— Me despidieron del jardín y expulsaron a Jun por los rumores de prostitución, no tengo nada de dinero, mamá cada día está peor y su diagnóstico tiene que ser si o si estar internada en un hospital y la casa se está viniendo abajo porque tengo muchas deudas. — respondí con rapidez frustrada.

Me quedé en silencio luego de oír mis propias palabras y mordí mi labio para susurrar.

— solo quiero que sepas que... No lo digo para que me tengas pena.

Apreté la tela de mi pantalón y me levanté queriendo abrir la puerta por nervios, sin embargo, Jungwon la cerró con fuerza y colocó su mano a mi costado.

— ¿Crees que te tendría pena? — preguntó.

— No lo sé... Siento que ya no te conozco Jungwon. — Susurré.

— Yo si y por el momento es lo que importa... — suspira — Mira, todo eso tiene arreglo.

— Lo tiene pero es difícil.

— No mientras esté ayudando, ¿No tienes trabajo? Te daré un puesto en la empresa, mandaremos a Jun a un jardín Excelente, tu madre será internada y las deudas serán pagadas con tu esfuerzo.

— ¿Mi esfuerzo? — pregunté confundida.

— Claro. Te daré un puesto fácil y con buen salario, la deuda será vaciada con un ingreso de tu esfuerzo en la empresa y todo estará arreglado.

— ¿Entiendes? — volvió a hablar acercando su rostro.

¡Está muy cerca! Coloqué mis manos en su hombro y lo separé con nervios.

— Solo dime con que puedo agradecerte. — respondí tomando distancia.

— Solo dejándome ver a Jun todos los días... Tú estarás trabajando y yo te avisaré si algún día no puedo, descartando la idea de las mismas horas cuando trabajemos en la empresa. — respondió dando una leve sonrisa.

Asentí segura y salí de la habitación yendo a buscar a Jun, lo lleve a la habitación de invitados notando que en ésta no había ducha asique busqué en otras habitaciones hasta encontrar la que es de Jungwon.

Su baño era... Cómo explicarlo, hermoso, enorme, muy moderno y bastante limpio.

Tenía un espejo largo con una extensa mesada dónde se supone que se lavan las manos, también había una tina de mármol negro en una esquina y al fondo del cuarto había una ducha con muchos huecos en el techo...

— creo que ahí cae el agua. — Susurré.

También habían asientos dentro de aquella ducha, ¿Para un sauna o solo para sentarse? No lo sé.
Llevé a Jun a la tina y allí coloqué un poco de agua calentita para comenzar a ducharlo mientras metía algunos juguetes para que él pudiera jugar sin aburrirse o dormirse.

Jun es como yo en el sentido de caricias en el cabello, termina dormido.

Me tomé mi tiempo para darle un buen baño y luego lo sequé, calenté su ropita y lo vestí para llevarlo al primer piso encontrandome con Jungwon sentado en la enorme mesa donde había un desayuno con muchas opciones de comida.

— oh... ¿Siempre hay desayunos así? — pregunte sentando a Jun a mi lado.

— Solo cuando hay más personas que yo. — contestó haciendo el celular a un lado.

— uhmm, tienes una casa enorme y un baño muy grande.

— Te agradezco. — contestó rascando su nuca mientras sonreía.

— Tú ducha también es enorme. — contesté pensando en lo costoso que debe haber salido.

— Creo que es muy grande para que solo yo me esté bañando.— contestó tomando su taza.

Mierda.

Su indirecta fue muy directa.