{♥︎‿♥︎} 𝕆𝕟𝕖 𝕊𝕙𝕠𝕥𝕤, ᴀʟᴀɴ ʀɪᴄᴋᴍᴀɴ ʏ ᴄᴏᴍᴘᴀɴ̃ɪᴀ {♥︎‿♥︎}

❤️ Juez Turpin ❤️

Un día más para el Juez Turpin, paseaba como todos los días por el parque mal echo, esto lo hacía por obligación junto a su mano derecha, ya estos rumbos no eran seguros y mucho menos confiables, pero eso no le importó y siguió su recorrido siempre con su mirada seria adorando ver cómo los pueblerinos bajaban su cabeza cuando lo veían, esa era su parte favorita del día.

Una joven vestida con un vestido casi ajustado a sus curvas, color verde olivo, cabello azabache casi negro, piel de porcelana y ojos cafés de tono obscuro, caminaba con su cabeza casi escondida por una fina tela negra, parecía que se prevenía de todo y todos.

El Juez Turpin miraba a todos con desprecio y horror, giro su mirada y la vio, esa joven escondida debajo de esa tela llamo su atención y su mano derecha lo noto, sonrió y se acercó al Juez para hablarle en secreto.

- Se llama TN Brown , vive a una cuadra de aquí sañor - le informo pues no había persona que no conociera, después de todo, ese era su trabajo.

- TN - pronunció maravillado - bello nombre para una bella dama - sonrió de lado.

Desde aquel día El Juez Turpin la seguía, escondido entre árboles o edificios pero sin pegarse mucho por la suciedad de estos, ella sentía esa mirada y solía apurarse más para llegar a su casa, vivía sola, El Juez se maravillaba con cada estilo y color de vestido que ella portaba todos los días, siempre era un color diferente pero adoraba verla, eran sus colores favoritos, amaba verla caminar moviendo sus caderas como solo ella sabía. Era un hecho, él se enamoró de ella y dejó de lado a la joven Johanna, prefería ahora salir más por la joven TN y no por ella, lo cual le fue un alivió.

La mano derecha del juez le decía siempre que debía acercarse a hablarle, invitarla a salir y así llegar a algo más íntimo, pero él lo rechazaba por miedo, sabía que no tenía buena fama y seguro ella lo ignoraria por eso, tuvo la brillante idea de cambiar un poco el lugar y así lo hizo.

Mando a construir orfanatos para los niños de la calle, hospitales para los enfermos, las calles las arreglo un poco más y ahora él estaba dando indicaciones para cambiar el parque, en donde la había conocido, TN paseaba ese día mirando todo a su alrededor sonriendo un poco por los enormes cambios y se descubrió su cabeza para que el sol que a penas comenzaba a verse le diera en el rostro sonrió cerrando sus ojos y sin dejar de caminar, choco con un pecho grande y abrió sus ojos de la sorpresa. El Juez iba a gritarle a aquel que se atrevió a tocarlo, pero se quedó callado al ver ala chica de sus sueños y la responsable de los cambios.

- Señorita, ¿Se encuentra bien? - dijo tomando delicadamente una mano de ella para verla.

TN alzó su mirada hasta ver esos orbes cafés que la hipnotizaron, no era ningún secreto el quien era él, sonrió tímida y bajo su mirada sin apartar su mano.

- Lo siento señor Juez, estaba distraída en mi camino - Turpin sonrió.

- No tiene que preocuparse señorita, dígame solo Turpin - soltó su mano para inclinarse caballerosamente.

- Soy TN - se inclinó de igual manera sosteniéndose su vestido con delicadeza.

- Me parece conocida, ¿La eh visto en algún lado? - ella sonrió.

- No eh tenido el placer, señor Turpin -

- En dado caso, le pido me acompañe a comer - extendió su brazo.

TN sonrió ampliamente y acepto el brazo ofrecido.

- Será un placer para mí acompañarlo -

Desde aquel día ambos empezaron a salir más seguido creando ese ambiente de seguridad y confianza, hablaban de ellos, reían de sus locuras, TN solía contarle de ella y contestar todas las preguntas que él le hacía, se sentía segura estando con él pero no en las calles, estás aún eran inseguras.