Capítulo 19

160 10 7
                                    

Narra Lola

Pasados unos diez minutos, cuando mi respiración se tranquilizó, mi ritmo cardíaco era normal y las lágrimas habían dejado de inundar mi ojos, levanto la cabeza para mirarlo nuevamente.

Paso mis brazos alrededor de sus hombros y le susurro un gracias de corazón. A lo que él responde con otro abrazo.

Para evitar hacerme sufrir más se levanta y extiende su mano hacia mí.

- Vamos, tenemos planes. Cámbiate, te he traído el desayuno.

De un salto me levanto de la cama y con energía renovada fui a la dicha para tomar un baño e intentar deshacerme de esa horrible pesadilla.

Decido ponerme unos vaqueros oscuros y una camiseta de manga corta blanca con detalles negros. Agarro mis converse negras y completo el look con una de mis chaquetas de cuero negras.
Acomodo el flequillo con los dedos y dejo el resto de mi pelo caer libre en ondas por mi espalda.

Ahora sí estaba lista.

Casi corriendo salgo del cuarto, con cuidado de no despertar al resto de niños que dormían, y me dirigí a la cocina donde estaba Luis con mi desayuno favorito.

Nos sentamos y pasamos alrededor de media hora hablando de cotidianidades, que para nosotros eran el mundo, pues cualquier tontería hablada con Luis se me hacía lo más interesante del mundo. Hacía que todo lo demás pásase a un segundo plano.

Me contó que el director le había concedido permiso para estar conmigo hasta las batallas, es decir, hasta el sábado. El lunes siguiente debería volver y cumplir con su horario habitual y algunos trabajos extras debido a esta escapada.

- ¿Conociste al asesor de Vanesa? ¿Y te gusta?
- ¡Sí! No te vas a creer quién es. Fue genial. Es súper simpática y atenta. Y además, tiene una voz increíble.
- No sé… ¿Me das alguna pista más por favor?
- Es una gran amiga de Vanesa. ¡Ah! Representó a España en Eurovisión 2012.
- ¡Pastora Soler!
- Sip
- Eres toda una sortuda chavala. Vaya si te lo vas a pasar bien, y no hablamos de todo lo que vas a aprender.
- Por supuesto.

Luis se pone en pie y comienza a recoger la mesa mientras continúa hablando conmigo. Pero esta vez de nonosotros.

- Según tengo entendido hoy es tu único día libre. Así que lo vamos a aprovechar como si fuera nuestro último día en la tierra.
Ya lo tengo todo pensado. Sólo queda que desconectes y me dejes hacerte sentir la niña más feliz.
- Luis.
- Dime.
- Aquí me siento feliz.
- No es el lugar, si no las personas que te acompañan.

Dice a la vez que me dedica una sonrisa bonita y sincera.
___________________________________________

Junto a Luis pasé uno de los mejores días de mi vida. Él siempre logra sacarme de esa oscuridad que a veces tira de mí con fuerza, él es mi luz. Mi puerto y lugar seguro.

Sin embargo, los buenos días no acabaron. Aunque no estuve precisamente de vacaciones lo pasé muy bien en los ensayos generales con Raquel y Lucía.

Las tres creamos un gran vínculo, gracias a esta pasión por la música.
Nos conocimos más en profundidad y decidimos que en nuestra actuación predominaría la naturalidad y el sentimiento. La verdad.

Con ellas todo eran risas y bromas. Lucía estaba loca por Vanesa, y eso a Raquel y a mí nos daba oportunidades increíbles de molestar y pasarlo en grande entre risas.
Nosotras en cambio no teníamos ninguna obsesión, pero sí es cierto que eso no quitaba que no hubiese piques en lo que yo siempre estaba envuelta.

En un principio fue difícil trabajar la canción, sobre todo para mí y Lucía. Para Raquel fue más fácil, ella nos ayudó, y con paciencia y trabajo obtuvimos nuestro adorado resultado.

Pero no un resultado definitivo.

Dependiendo del momento, las circunstancias, la cantábamos conforme a lo que sentíamos y eso era lo que le daba ese toque impredecible y atrevido, pero a la vez tan real.

Solamente nos quedaba el ensayo con Pastora y Vanesa, y al día siguiente sería la actuación.

La parte negativa de esta es que nos habíamos hecho tan amigas que nos daba pena no poder seguir juntas en esto. Lo bueno es que apoyaríamos 100% a quién superase la batalla.

Llevábamos un rato esperando a que nuestra coach llegase, pero al parecer la puntualidad no era lo suyo.

Apareció casi 10 minutos tarde siendo seguida por Pilar.

Ambas nos saludaron con un par de besos y maravillosas sonrisas.

Estaba un poco tensa ya que alrededor nuestra todo estaba lleno de cámaras grabando, lo normal en un programa. Pero esa falta de intimidad se me hacía extraña, y tanto mis compañeras como las artistas lo notaron.

Los ensayos con los vocalistas no se grabaron y pensé que esto tampoco.
Lo pasé tan bien la última vez, que pensé que sería igual.

Echaba de menos esas miradas furtivas, esas sonrisas de lado y risas tontas. Piques y descuidos que nos hacían más nosotras.

Nada de eso.

Son unas grandes profesionales.

Y no sé por qué algo dentro de mí sufre por esta indiferencia-profesionalidad.

.
.
.

Hola, ¿qué tal?
Disfrutad de esta calma, esto sólo ha sido una introducción a todo lo que se viene.
Ya conocéis a los personajes y estáis en contexto.
De ahora en adelante puede pasar cualquier cosa. Y se vienen cosas.

Un saludo 💜

Segunda oportunidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora