La voz de mi dulce amor.

Raro

Tori salió de bañarse, aún estaba lidiando con su cabello y una toalla cuando pasó frente al espejo de cuerpo entero que tenía (cortesía de Trina) y observó detenidamente su cuerpo.

El nuevo régimen y la dieta estaba haciendo maravillas en ella, tenía más fuertes los brazos, si apretaba el estómago unos cuadritos hacían su aparición y ni se diga sus piernas, jamás había notado que tenía músculos en la pantorrilla. Llevaba puesto solo un short (estaban en pleno Verano) y el top deportivo, lo que le permitió verse bien, hasta que llegó a cierta parte de su anatomía.

En terapia poco a poco vencía algunas cosas pues aunque frente a Jade y sus amigos siempre se mostró "orgullosa" o como si no le molestara lo cierto es que apenas estaba superando algunos complejos que tenía. Aún le daban pena ciertas reacciones aunque actuará muy natural o segura, cómo la vez que estuvo besándose y restregando se en Jade en el departamento que rentó cuando participó en Hawkeye, o cuando Sofía obligaba a Jade a sentarse en sus piernas pero fuera de ahí en si no sabía cómo acercarse a su novia.

- Si quieres puedes ir a desayunar con tu reflejo - escuchó a su espalda encontrando a una recién llegada gótica.
- ¿Desayunar?
- Si, desayunar, ya sabes, la comida de.la mañana, tu abuela nos está esperando y por cierto tapate, ni que tuvieras algo que presumir.
Cómo pudo entre que se cubria y agarraba ropa se vistió pues no era buena idea hacer esperar a la Vega mayor.

- Nada más te recuerdo que es mi cuarto y puedo andar posando si quiero, aparte deberías leer los comentarios que dejan diciendo que eres afortunada por comerte todo esto - presumió Tori
- ¿Comer? Por favor Vega, ni de entrada sirves, me voy a quedar con más hambre de la que tenia
- Andas con hambre por qué quieres - dijo la Abuela colocándose entre la pareja - vamos, tu madre y Trina esperan en el auto desde hace media hora

- Tendrás que comprar un coche - comentó Jade pues iban medio apretadas en el que Sofía le había prestado.
- Pues Trina y mamá deberían andar.viendo eso, yo sigo sin ser muy fan de.manejar, lo haco.porque bueno California no se.presta para no tener noche. Simplemente para ir al gimnasio a pie tenía que arriesgar mi vida caminando bajo la.inexistente banqueta de dos calles.
- Mamá tiene la.idea de comprar una camioneta, cómo la del Tío Raúl - dijo Trina - ya sabes para salir todas con comodidad, veré qué la cajuela sea grande para que Morticia nos acompañe.
- Mira...
- Antes de que se maten ¿Creen que pueda pararme por más salchichas? - interrumpió Tori a Jade - tengo hambre y de verdad no quiero detenerlas con el estómago vacío.
- Vega, después de tres platos de.fruts, dos de huevo, tres tazones de salchicha y vaso y medio de.leche con chocolate tu estómago está de todo menos vacío.

El buffet recomendando por una compañera de clase a Holy las más tuvo entretenidas gran parte de la mañana, hablaron de muchas cosas, molestaron a Tori, se pusoero de acuerdo con lo que seguía respecto a la educación de ambas Vega, molestaron a Tori, escucharon a Trina y sus planes de hacer las pruebas para la sub 18 de Angel City.
- ¿Espera soccer? Trina está bueno que lo tuyo son las patadas pero no creo que en esa modalidad - dijo su hermana.
- Pues te recuerdo que jugamos juntas hasta los 11, ayudé a Rick entrenando al equipo del Centro Comunitario y he tomadoalgunasclasesconunentrenadorparticulardesdequefuimosaAngelCity.
- No entendí nada, pero la tuya por si acaso ¡Au! ¡Mamá!
- Te recuerdo que es la misma hermanita - se burló Trina - Auch, ya, está bien, está bien, no dije nada.

Resulta que la mayor de las Vegas durante su estancia en el club, visitó algunas veces los campos de entrenamiento y con ayuda de uno de los entrenadores puso en marcha un pequeño programa que de momento la tenía firmemente convencida de qué podría entrar.

- ¿porqué tanta desconfianza a tu hermana? - preguntó Jade mientras se acomodaba en la cama de Tori para empezar a ver una película y tomar la siesta post desayuno.
- ¿Jamás supiste como ingresó a HA?
- Agarró drogado a Sickowitz ¿No?  Eso nos habías dicho.
- Bueno, si entró por eso, pero me refiero a lo que la motivó para hacer el casting.
- Eso no nos lo contaste
- Bueno, pues resulta que durante mis clases de guitarra, para una presentación necesitaba a alguien que cantará y mi.profesora sugirió a mi hermana, le dio unos ejercicios y todo, al final de la presentación decidió inscribirse en la clase de canto y tras unas semanas se aventuró a HA.
- ¿Le dijeron que cantaba bien?
- Salvo papá, nadie lo dijo, ni la.profesora pero era firme creyente de que un cantante se hace, no se nace. No te preocupes, tengo su nombre anotado en algún lado, te lo paso y puedes no se hacerle voodoo, escribirlo en tu Death Note, no sé, lo que se te ocurra.
- ¿Anotarlo en mi qué?
- ¿No conoces Death Note?

En lugar de la película Tori puso el anime y si que tal vez Jade lo negaria después se interesó y hasta pegó de gritos cuando la latina sin querer presionó el botón que regresó la TV al menú con las plataformas de streaming.

Después de una tarde bastante tranquila viendo anime, la noche llegó y Tori tuvo que ir a dejar a su novia a casa.
- ¿Segura que no quieres pasar la noche aquí? - preguntó por cuarta vez Holy
- Muchas gracias - contestó la gótica - pero no, mañana llega la respuesta de la Academia CB y quiero verlos primero con mis padres.
- ¿Pasarás la noche allá entonces? - preguntó ahora viendo a su hija.
- por mis padres no hay problema - recordó Jade.

La cena con los West fue más ligera que el desayuno y rápida, ambos estaban nerviosos igual que su hija y esperaban calmar los nervios durmiendo así que en cuanto dieron las 11 ya estaban más que listos para recibir a Morfeo.

- Vega, no es necesario que te cubras toda - reprendió Jade a Tori al verla jalar su cobija como si su vida dependiera de ello - se muy bien que no eres de las que duerme tapada o con la cabeza bajo las sábanas.
- Pero
- Ash, ¿ahora que tienes Vega? Siempre me dices que hable cuando algo me incómoda y cosas así y ahora es tu turno de hacerlo ¿Que te traes? Desde la mañana que contempladas tu reflejo estabas rara.

- No estaba, soy rara Jade - dijo con cierto tono frustrado Tori - no soy normal, mi cuerpo menos, soy, soy un bicho raro.
- Nunca dije que me gustara lo normal - dijo Jade gateando sobre Tori hasta quedar cara a cara - adoro lo raro