capitulo 11

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Me encuentro desayunando, hable con Christopher, le avisé que en su despacho en la central pondría la jaula de Beliel para dejarlo allí cuando no esté, es el único lugar seguro, tuve que comprar una jaula más grande porque no le gusta la que tiene es pequeña, Parker pasará por nosotras en nada. Cuando terminó el desayuno me lavo los dientes y me llega un mensaje.. Están afuera, me apresuró a bajar.
Ya en la camioneta me siento al lado de Meredith, Rachel está de copiloto, saludos a todos.

- Está todo claro? Pregunta Parker quien me mira por el espejo retrovisor.

- Así es- hablo - mi nombre es Alana Burgués, vengo de Vancouver, tengo 24 años, mi familia falleció hace 10 años en una avalancha que arrasó nuestro hogar. Solo tengo a mi gemela y quiero entregarle mi vida al templo- tomo mi pecho haciéndome la dramática. 

- Quien te recomendó? 

- Mariane Lacouture mi pelirroja favorita- digo señalando a Meredith quien me da una bonita sonrisa, si ríe ahora por qué llorarás después, Rachel me mira sin creer lo que dije, si bueno no conocía esta parte de mí, solo estoy fingiendo. 

- Por qué trabajarás? 

- Por comida y techo donde dormir.

- Perfecto- mira su reloj- la madre superiora las está esperando. Recuerden el papel de cada una, acuérdense de analizar el lugar del plano que les di.

- Cómo ordene- dice Rachel

- Si mi capitán- me mira por el espejo y le doy una sonrisa coqueta y niega con la cabeza divertido.

- Traten de ser amables con todos, los que ya están se ganaron la confianza de la mayoría.

- Tenemos todo calculado.- conteste.

Llegamos a la iglesia, es enorme y muy bonita, parece gótica, hay un montón de feligreses esperando a que se abran las puertas, la multitud es impresionante y yo me preguntó si no tienen otra cosa que hacer, sin ofender a los creyentes, pero no creo en nada de eso. Meredith se acerca a la madre superiora y hablan un rato hasta que nos presenta.

- Ella es Alina - señala a Rachel - y ella es Alana - me señala. 

- Tenemos gemelas, son hermosas.

- Gracias madre - le soy una sonrisa cálida y creo que Rachel se quiere reír por mi actuación.

- Síganme las llevaré a las habitaciones.

- Gracias por recibirnos - habla Rachel.

- Las puertas de dios siempre están abiertas para los más necesitados

Nos devolvemos a otra torre.

- El centro acoge a los que le sirven- explica la madre cuando entramos a la habitación - por eso tenemos tres torres que le brindan alojamiento al personal que trabaja por comida.

Nos guía a una alcoba con 4 camas.

-Ellas son Beth y María, sus compañeras de trabajo.

-Se dividirán la lista de quehaceres, deben levantarse a las 4 am para que no se retrase el desayuno, ni las tareas del día.

-Si señora - dijimos al unísono.

-No sé si Marie les dijo, pero no recibirán pago monetario. En la casa de dios no se trabaja por dinero, se hace para alcanzar el reino de los cielos. 

Mierda no te rías, no te rías es lo puedo pensar por la estupidez que acaba de decir en serio? El reino de los cielos.

- si señora. - contesta Rachel.
- María te explicará lo que haga falta.

Gemelas JamesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora