Capitulo. 74. Parte 1.

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Pequeña advertencia: Esta de mas decir que contiene spoilers si no has leido el final del manga. Si eso no es problema adelante... Solo te dire que es el futuro triste.
Empezare por el triste, el resto creo que seran un poco mas alegres.

¿Los viajes en el tiempo son posibles? Algunos creen que cada decisión que tomes, e incluso los caminos que elijan tus seres queridos pueden influir en tu futuro. Cada futuro es una puerta que se abre siempre que eliges un camino. ¿Cuántos futuros tienes según tus posibles elecciones? Infinitas.
Tana llegó a Tokyo con 8 años. Aun estaba aprendiendo a superar la muerte de un ser muy querido, su mamá. Akashi Sasuke fue un padre dedicado. Cuido de su hija como si fuera su mayor tesoro, y lo era. Incluso cuando encontro su antiguo amor de la adolescencia procuró no ser invasivo con su hija.
Aun asi Ryoko y Aitana rápidamente se hicieron amigas. No fue exactamente asi con el hijo de la mayor. Baji Keisuke desde pequeño era muy hiperactivo y muy propenso a los problemas. Tener una hermana menor y un tipo raro en casa no era para nada su idea.
- ¿Por que no me llevas al dojo contigo?- Pregunto Tana deseosa de pasar tiempo con su nuevo hermano.
- Porque no.- Respondio tajante el niño arreglando el obi de su kimono.- ¿Por que estas en mi cuarto?
- Mamá Ryoko dice que debemos pasar tiempo juntos.- Explicó la niña.
- No es tu mamá.- Dijo para salir del cuarto.
Aitana insistió muchas veces durante sus estadias en casa de los Baji. Sasuke confiaba ciegamente en que seria bien cuidada. Además, así iria haciendo un lazo con su nueva familia. Tana aprendió rápidamente una cosa. Su nueva mamá no tenia problemas para consentirla siempre que hacia un puchero.
- Llevame contigo. Por favor...- Insistia la niña.
- No.
- ¡Mamá Ryoko!- Llamo a la mayor. No se consideraba una consentida, pero sabia que era una buena carta a usar de vez en cuando.- Kei es malo conmigo.
- Kei. ¿Por qué no quieres llevar a tu hermana al dojo?- Pregunto la mujer.
El niño salto en su lugar. No sabia que excusa darle. Tendria un regaño de su madre si no pensaba rápido.
- Se puede hacer daño... Y... Despues me echaras la culpa a mi.- Replico el menor.
- Me aburro sola.- Insistió Tana.- Ademas quiero ver como es un dojo. No molestaré.
Ryoko lo penso por un momento. Su hijo estaba dando solo una excusa. Pero sabia que no era el mejor momento para llevar a la pequeña por primera vez.
- Esta bien. Ai-chan, en estos dias seguro Kei y sus amigos se reuniran a jugar. - Explicó la mayor.- Ese dia Kei te llevará, haras nuevos amigos y te enseñara el dojo. ¡Sin excusas!
Keisuke no pudo decir nada más. El futuro fue doblado por la insistencia y la obstinación de una niña. Un par de días después conoció a los amigos de su hermano.
Primero estaba los hermanos Akashi, Harushiyo y Senju, con quienes curiosamente compartía apellido. Penso que quizás era uno muy popular en este país, como el Pérez o el García en su tierra natal. Asi que no le dio importancia. Le seguia Sano Manjiro, o Mikey, quien parecia ser muy cercano a su hermano.
Todos eran muy buenos con ella. Haru no era muy conversador, al contrario de Senju. Mientras que Mikey solo preguntaba por el lugar del que venia, pues se habia dado cuenta de que era extranjera. Era muy dificil seguirle el ritmo a todos. Corrian de un lado para otro jugando con un avion de juguete.
- Hola...- Escucho una vocecita a su espalda.- Soy Emma.
- Soy Aitana.- Se presento ella intentando recobrar el aire. Habia estado corriendo detras de los otros menores.- ¿Tambien vives aqui?
- Soy la hermana menor de Mikey.
- Yo soy la nueva hermana de Keisuke.- Dijo la pelinegra animada.- ¿Podemos ser amigas?
- ¿¡En serio?!- Dijo contenta para abrazar a la otra infante.- Si. Si. Por favor. No puedo seguirle el paso a ellos.
- Yo tampoco.- Dijo riendo Tana y correspondiendo el abrazo.- ¿Y a que podemos jugar?
- ¿Qué tal a las muñecas? Tengo un osito nuevo.
- ¡Si! Para la próxima traere mi muñeca también.- Dijo Tana sonriendo.- Oye... ¿Y me puedes llevar a ver el dojo?
- ¿El dojo? Si. Pero ¿para que? No estan entrenando ahora.- Dijo confundida la rubia.
- Es que nunca he visto uno.
- Ah. Esta bien. Pero es mejor cuando estan los estudiantes alli. ¿Te gustan las artes marciales?
- Me llaman la atención.- Admitió Tana.- Pero nunca he practicado nada.
Ambas estuvieron jugando juntas el resto del dia. Pero la tranquilidad fue cortada antes que nuevos vínculos pudieran germinar completamente.
El futuro tambien da sorpresas. Algunas buenas. Otras terribles y dolorosas. Entre juegos un accidente habia ocurrido. Desde ese día en adelante la familia Sano no volvio a ser la misma.
- ¡Papá!- Reconocio Tana a su padre una vez que llegaron al hospital.
El pequeño Manjiro, quien habia sufrido un accidente golpeandose fuertemente en la cabeza, estaba siendo atendido. El resto, niños y adultos esperaban fuera.
- Tana. ¿Qué haces aqui?- Pregunto el mayor viendo a su hija con lagrimas en los ojos.
Los otros infantes estaban igual, y los adultos se veian decaidos y preocupados.
- Por favor salva a Mikey.- Pidio Tana.- Es uno de los mejores amigos de Kei, y es un buen niño. Por favor.
El hombre no sabia que hacer. El caso no era nada sencillo por lo que habia averiguado. Pero no se quedaria de brazos cruzados si su hija se lo pedia, más considerando que era solo un niño.
- ¿Ryoko-chan sabe que estan aqui?- Antes que uno de los niños dijera algo el primogénito Sano habló.
- Yo le avise. Ella viene en camino.- El hombre asintió.
- Vere que puedo hacer. Les informare pronto.

Hola. Como estan? Bueno... Resulta que el capítulo salio muy, pero muy largo. Asi que lo corte en dos partes. Pronto actualizare. Mientras me gustaria que comentaran que les parece la historia. Ah, tambien si han visto el final de Tokyo revengers, ¿que les parecio?

Cuidense mucho. Hasta pronto.

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